You are everything I've been looking for
Capítulo 33. Let's not fall in love
Desde aquella vez que lo encontró en el restaurante de la carretera, justo unos días atrás, Changmin no volvió a saber de Yunho, nadie en casa de Donghae lo había visto y a esas alturas, la noticia de la próxima boda de BoA había recorrido cada rincón de aquel pueblo, el que alguna vez fue testigo de la relación entre la cantante y Yunho, sin duda el tema favorito del momento para el cotilleo. Él se volvió prácticamente un fantasma que no atendía ni siquiera el teléfono, preocupando no solo a sus amigos más cercanos, sino también a muchos conocidos
La única persona que conocía su paradero era Heechul, a quien su amigo contactó horas después de enterarse sobre la noticia, posteriormente le pidió ayuda para hospedarse unos días fuera del pueblo, huyendo del cuchicheo y las expresiones de lástima. La ocasión era distinta a todas las demás en el pasado, esta vez Yunho se encontraba tranquilo, en paz consigo mismo, darse cuenta que dejó atrás el amor por la chica fue más que un alivio, resultó una completa sanación.
Despertó una mañana con fuerte resaca, de esas que te hacen olvidar tu nombre, miró a su lado opuesto en la cama y observó a un desconocido, durmiendo desnudo, tan plácidamente que se le antojó volverse a dormir. Tardó unos segundos en recordar el origen de aquel chico, un japonés que conoció en un bar “normal”, pues la noche anterior le apeteció dormir con una mujer, sin embargo falló en su búsqueda y en cambio lo encontró a él, que si no fuera porque sabía algo de coreano, se habría ido a la cama con él sin apenas entender lo que hablaba. Como era de esperarse, no recordaba su nombre
- Vaya, me estoy internacionalizando – pensó mientras lo observaba, luego sonrió divertido – Será mejor que lo despierte – decidió sin pensarlo mucho, ahora que experimentaba el sexo tanto con hombres como con mujeres, se daba cuenta que solía ser menos indulgente con ellos, tanto a la hora del acto sexual, como al momento de decir que todo llegó hasta ahí y que en definitiva ahora tendría que marcharse
Estiró la mano y lo movió con gentileza en la primera ocasión, al no obtener respuesta lo sacudió con un poco más de fuerza, pero tampoco tuvo suerte, suspiró cansado
- Hey tú, despierta – insistió una tercera ocasión, moviéndolo más fuerte, obteniendo éxito, pues el chico comenzó a abrir los ojos. Sonrió al ver a Yunho y recordar tan maravillosa noche
- Buenos días – saludó al notar que ya había amanecido, Yunho sonrió en respuesta
- Konbanwa – dijo de forma natural, levantando su mano derecha, el chico rio
- Excelente pronunciación, saludo equivocado – respondió entretenido, mientras se sentaba en la cama no notó el sonrojo en su anfitrión de la noche anterior
- Tal vez debería aprender japonés – comentó por amabilidad, en realidad no estaba interesado en saber otros idiomas
- Si quieres, yo puedo enseñarte, además de otras cosas – respondió al instante, acercándose a él con sonrisa maliciosa, besó sus labios y se apartó solo para mirarlo a los ojos
- Tentador – contestó Yunho aclarándose la garganta – Pero me temo que…
- Solo querías follar conmigo una noche y se acabó ¿cierto? – completó lo que Yunho no se atrevió a decir, y ante la confirmación solo hubo silencio, el japonés sonrió resignado – Qué lástima, realmente me gustaste – confesó sin dolor alguno, no dejando de sonreír – Tomaré una ducha, si no te molesta
- Adelante – manifestó señalando el baño, el extraño se puso de pie y encaminó hasta entrar en el lugar indicado, sin cerrar la puerta se comenzó a bañar, Yunho miró unos segundos, luego se tiró de nuevo en la cama, mirando hacia el techo
La primera persona que vino a su mente fue Donghae, su amigo seguramente se encontraba muy preocupado por su ausencia, lo notó cuando recibió las primeras llamadas que no regresó, después apagó el celular y solo lo encendía por las noches, para revisar las decenas de mensajes que le enviaban el mencionado y los demás, incluso recibió mensajes de Jonghyun, los cuatro habitantes de la casa de enfrente intentaron comunicarse con él, pero todos sus mensajes fueron vistos sin responder, se sintió un desgraciado, un hijo de puta, pero aun así no respondió a nadie, solo a Heechul
- No puedo esconderme siempre, el pueblo es mi hogar, qué más da si todos se la pasan murmurando ¿no ha sido así toda mi vida? – reflexionó un instante, sin ser consciente del paso del tiempo, hasta que vio a su amante de una noche frente a la cama, vestido y dispuesto a despedirse, ya no sonreía, al menos no tan ampliamente, Yunho se irguió para mirarlo mejor
- Fue un placer, literalmente – dijo estirando su mano, Yunho la estrechó, luego asintió
- Cuídate – inclinó un poco la cabeza a un lado y sonrió, el otro le dio la espalda y salió de la habitación, dejándolo solo, así que de nuevo se tiró sobre la cama – Extraño a Changmin, no creí que me costaría trabajo admitirlo – suspiró cansado, luego cerró los ojos e intentó no pensar más en él.
Aquella noche de jueves, Changmin y Jonghyun bajaron al Bar como cada día, tuvieran o no trabajo ellos iban, rara vez pasaba lo contrario, después de todo, no había otra cosa que hacer en ese pueblo, salvo las veces que la cama los absorbía como una novia celosa, aunque la función principal de aquello no fuese en realidad la de dormir
La música sonaba por los parlantes, clientes iban y venían en poca proporción, pero estable, una noche como cualquier otra, mientras Donghae preparaba las bebidas o servía cerveza, Eunhyuk y Junsu atendían las mesas, la otra pareja sentada frente a la barra, conversando simples banalidades, como sucedía con frecuencia, hasta que unos segundos de extraño silencio se atravesaron entre los dos
- ¿Qué sucede? – preguntó con gentileza Jonghyun, deslizando su mano hasta colocarla sobre la de su novio, al instante Changmin lo miró, sonriéndole
- Nada ¿Por qué? – cuestionó amable, en respuesta puso su otra mano sobre la que acababa de ponerse encima de la suya
- Olvídalo – movió la cabeza a los lados
- Ahora tendrás que decírmelo ¿acaso me veo extraño? – poco a poco separó su mano y colocó ambos brazos sobre la barra, empujando un poco su tarro con cerveza
- No quiero que te enojes
- ¿Por qué me enojaría? Explícamelo – comentó ansioso, tratando de no apretar mucho los labios, aquel gesto de impaciencia que su pareja conocía de sobra
- Bueno, desde que no sabemos nada de Yunho tú… – pausó al ver la expresión cambiante de Changmin, aunque tratara con fuerza de no mostrarse molesto, Jonghyun lo conocía de sobra – ¿Sabes qué? Olvídalo, de verdad no deseo que te incomodes
- No me incomodo, me preocupo que te sientas mal porque él me importa – respondió bajando después un poco el tono de voz – Ya sabes, después que te dije que aún me gusta – completó con sigilo, pretendiendo que el barman no le oyera
- No me siento mal – movió la cabeza en negativa al decirlo – Tal vez un poco celoso
- Jonghyun… – se acercó a él y para su sorpresa le dio un beso en la boca, aunque no solían mostrarse afectuosos en público, al menos no en el lugar donde son empleados – Sabes lo mucho que te quiero ¿verdad?
- Lo sé
- Entonces no seas tonto ¿sí? – sonrió más amplio y se apartó un poco de él, en respuesta el otro afirmó, sintiendo un agradable cosquilleo en el estómago
- Oigan ustedes dos – habló de pronto Eunhyuk, acercándose a ellos lentamente – Dejen la miel para cuando estén en privado – sugirió en broma
- Envidioso – contestó Changmin, burlándose, el mesero miró discretamente a Donghae, que preparaba un pedido para Junsu y no prestaba atención de nadie
- La verdad sí – confesó con pesadez, sorprendiendo a la pareja
- ¿Y eso? Yo lo decía por joda – indagó Changmin preocupado, oyendo el largo suspiro por parte del otro, quien dirigió de nuevo una mirada a su novio, que continuaba absorto, después volvió su mirada al otro par
- Donghae y yo no hemos tenido sexo en varios días – admitió en voz baja, pero lo suficientemente audible para los otros dos
- ¿Cuánto? – examinó Jonghyun, asombrado
- Desde antes que desapareciera Yunho – respondió resignado, Changmin y su novio se miraron mutuamente, luego observaron a su amigo
- O sea que cuando se fueron de fin de semana ¿Nada de nada? – cuestionó Changmin, obteniendo la negativa silenciosa de Eunhyuk
- Nuestra relación de pronto se volvió delicada, pero hicimos las paces y volvimos bien, sin embargo no hemos vuelto a intimar y sé que él está demasiado preocupado por Yunho, no lo culpo, yo también estoy algo preocupado por él – expuso mientras miraba por intervalos a Donghae, que seguía en lo suyo, sin oírlos ni mirarlos
- Creo que todos estamos preocupados – aceptó Jonghyun, mirando unos segundos a Changmin, este asintió – Debe estar pasándola muy mal – dijo con expectación, imaginando por lo que estaría atravesando ahora que el amor de su vida se casaba con otro.
Tiró las llaves de la habitación del Hotel donde se hospedaba sobre la mesa donde solía dejar su celular antes de ir a dormir, mientras su mano izquierda no perdía oportunidad en desabrocharse la camisa, su boca devoraba unos carnosos labios pintados de carmín, pronto la mano desocupada comenzó a tantear terreno por debajo de la minifalda, encontrando el elástico de la ropa interior, la que no dudó en deslizar hasta quitarla
Ella sonrió, su cintura aprisionada por las fuertes y ásperas manos de Yunho, él la levantó hasta subirla al alfeizar de la ventana cerrada y se desabrochó los pantalones. La invitación fue directa, abrió sus piernas y sonrió, agarrándolo por el cuello lo atrajo y se besaron por algunos segundos, al separarse la despojó de la blusa y besó su cuello, mientras las manos hacían lo suyo quitándole el sostén. Sostuvo ambos senos con sus manos y acarició con firmeza, había extrañado tanto aquella sensación, la suave piel, sentir el frío de los pezones entre sus dedos
La oyó gemir y supo que era el momento, quería tomarse su tiempo, pero él también estaba desesperado, su primera mujer en semanas, había deseado aquello desde hace días. Metió la mano dentro del pantalón y extrajo la cartera, donde guardaba los condones de la noche antes de salir a cazar, la mujer sonrió al verlo colocándose el preservativo, tenía buenas proporciones. Yunho empujó la falda hacia la cintura y se introdujo, sosteniéndole los muslos, se balanceó con poca delicadeza y escuchó con satisfacción los gemidos desinhibidos
El deslizar de las largas uñas sobre su espalda, la contracción de su interior, los senos acariciando su torso, eran cosas que no podía disfrutar con un hombre y ahora lo llevaban al paraíso. Se corrió dentro del preservativo, apretando su cuerpo contra el ajeno, hasta que sus pieles se juntaron sin obstáculo alguno, se dieron un beso final, lento y húmedo, luego se apartó, ayudándola a bajar del alféizar, se dirigió al baño para tirar el condón a la basura, al volver la observó acomodándose la falda en su sitio, avanzando luego a su ropa interior
Yunho la observó fijamente, preguntándose de pronto qué pensaría ella si supiera que justo dos noches atrás, un desconocido hizo lo mismo que hacía en esos momentos, buscar su ropa tras una apasionada sesión de buen sexo, sonrió con discreción y recordó que debía acomodar sus pantalones también, no tuvo siquiera la educación de quitárselos minutos atrás
- ¿Te marchas ya? – preguntó cuando la mujer finalizó de colocarse la ropa, luego peinó el cabello con las yemas de sus dedos y lo miró, sonriéndole
- Sí – admitió tranquila – ¿O acaso deseabas que me quedara? No es lo que esperaría de un sujeto a quien conocí en un Bar apenas hace unas horas – completó su respuesta, Yunho sonrió amplio, le gustaba cuando las personas eran directas
- No te estoy corriendo al menos, puedes irte hasta mañana si quieres – respondió con sinceridad, ella se acercó hasta tenerlo enfrente, después besó rápido su boca
- Me encantaría, pero no quiero que mi marido se preocupe si no llego a dormir – confesó sin problema alguno, Yunho se apartó un paso hacia atrás, mirándola sorprendido, él no estaba a favor de la infidelidad y eso le molestó un poco
- Debiste decirme que eras casada, no estarías aquí – espetó observando sus ojos, pero ella no parecía sorprendida o enojada, en cambio sonrió divertida
- ¿Debía decirlo? – levantó la mano izquierda y mostró su anillo de matrimonio, Yunho palideció, estaba tan urgido de tener sexo con una mujer que no reparó en detalles, ahora incluso pudo ver en su rostro que era mayor a él, al menos en cinco años
- Yo…
- Mira, no te sientas culpable, mi esposo es homosexual y él sabe lo que hago ¿sí? – expuso esta vez sorprendiendo aún más a Yunho, que no esperaba aquello, sobre todo porque ella no le debía ninguna explicación, pero ahora estaba intrigado, quería saber más
- ¿Qué? Pero ¿cómo puedes estar casada con un Gay?
- Es simple, somos amigos desde hace tiempo, su padre quería un nieto, así que solo hemos follado dos veces, la noche de bodas cuando concebimos a nuestro hijo y una noche de copas, su amante, él y yo – explicó divertida, las expresiones de Yunho eran realmente graciosas
- ¿Y cómo es?
- ¿El qué?
- Un trío bisexual, porque supongo que el amante de él no te… – antes de terminar ella soltó una carcajada, Yunho parecía más fascinado que horrorizado, la primera vez que le contó esa experiencia a alguien fue su amiga, quien la juzgó duramente, ahora se la contaba a alguien que acaba de conocer y parecía realmente interesado
- Estaba muy alcoholizada, realmente no recuerdo mucho de eso, pero sin duda lo haría de nuevo – confesó mordiéndose el labio inferior, Yunho tragó saliva, por segundos le pasó una idea por la cabeza y quizás a ella igual, se sonrojó antes de apartar la mirada – ¿Quieres intentarlo acaso? – preguntó para tomarle la medida
- ¿Qué? No, yo solo tuve curiosidad – respondió mirándola de nuevo
- Hace tiempo que mi marido terminó con su amante – informó observando atenta su reacción, los ojos de Yunho le dijeron que realmente lo estaba pensando, pero se quedó callado, sintiéndose nervioso, toda su vida fue liberal, pero nunca llegó a tanto, ahora se encontraba en una etapa de libertad total, el amor por Boa no lo ataba más a ser miserable
- Gracias por la oferta pero…
- Mira, te dejaré mi número – interrumpió, acercándose a la mesita donde Yunho aventó las llaves, había una libreta de notas del Hotel, apuntó su número y miró de nuevo a Yunho – Piénsalo con calma, si es tu primera vez con un hombre no te sientas cohibido, a él le encanta ser pasivo – comentó con tanta ligereza que Yunho no pudo evitar reír un poco
- Eres muy amable – sujetó la libreta y miró lo escrito – Eunbee – leyó junto al número
- Entonces, espero tu llamada, sé que te animarás – guiñó un ojo y se apartó hacia la puerta, colocó por último sus zapatos, dirigió una última sonrisa y salió de la habitación, dejando a Yunho confundido y pensativo, quizás es que de verdad lo estaba considerando.
Apenas recibió el mensaje de Yunho por la mañana, Heechul se preparó para marcharse, buscando las llaves de su auto que por alguna razón no lograba encontrar, aunque el vehículo era de Siwon, él tenía total libertad de utilizarlo
- ¿Acaso buscabas esto? – oyó la voz de su jefe justo a unos pasos de él, Heechul volteó y lo observó mirándole fijamente, lucía serio y en su mano derecha sostenía las llaves, moviéndolas un poco, temió una próxima disputa
- Sí – respondió sin miedo
- ¿Dónde vas? – cuestionó con voz seca, resultando extraño, rara vez usaba ese tono con él
- Un asunto personal – respondió en el mismo modo, pero tratando de ser amable
- Tus asuntos personales son mis asuntos – dijo de forma determinante y aquello hizo molestar al otro, sonrió sarcásticamente, burlándose
- Disculpe señor, temo que está usted equivocado – expresó de forma sátira, acercándose para arrebatarle la llave del auto, cuando estuvo justo enfrente, Siwon lo sujetó con fuerza de la mandíbula y se miraron a los ojos
- No te burles de mí – amenazó enojado – No te pago para eso – habló con arrogancia, Heechul sintió un malestar en la boca del estómago, cuando Siwon se proponía lastimarlo siempre lo lograba. Heechul se deshizo del agarre
- Lo sé, me pagas para ser tu puta ¿verdad? – respondió agresivo pero con un dejo de tristeza, apretando con fuerza los puños, el otro apartó la mirada unos segundos, pero no admitió que no quiso decir eso, sin embargo ese silencio le dejó a Heechul las cosas claras – Además, estás muy entretenido con alguien más ¿no? Así que déjame en paz – culminó la conversación arrebatándole las llaves, Siwon no se opuso
- No creas que no me doy cuenta – espetó apenas su empleado le dio la espalda, dispuesto a marcharse – Te ves con Yunho, han ido a bares, los lugares que frecuentamos tú y yo… ¿Desde cuándo es él así? ¿Hace cuánto han vuelto a ser amigos? – indagó sin pausas, Heechul se sorprendió por unos instantes, luego comprendió que ciertas cosas no se pueden ocultar, mucho menos a Siwon, que tenía ojos y oídos en todos lados
- Desde que me has cambiado por ese – contestó refiriéndose a Minho
- No te he cambiado – contradijo rápido, cambiando el tono seco, Heechul sonrió, sin creerle, tampoco quiso contestar, comenzó a avanzar y de nuevo fue detenido por la voz ajena
- ¿Vas con él justo ahora? – inquirió nervioso, conteniéndose de no ir tras él. No hubo respuesta alguna – ¿Se han acostado? ¿Cuántas veces te lo ha hecho? – continuó interrogando, pero Heechul ya no quiso discutir, lo ignoró por completo, alejándose – ¡Jamás sentirás con él lo que sientes conmigo! – gritó avanzando unos pasos, pero su empleado se marchó sin mirarlo siquiera – Maldito Yunho ¿en qué momento te has vuelto homosexual? No lo entiendo – murmuró cabreado, tratando de encontrarle sentido a eso
Junto a la pared contigua, apeado mientras los observó discutir, se encontraba Minho, tratando de no reírse de aquello, pero todo fue tan divertido, sobre todo el saber aquello tan interesante, el tal Yunho se había desatado por vivir la vida loca junto a Heechul, quizás aquello le serviría para lastimar a Changmin, de alguna forma sentía que su ex amigo y Yunho tenían un pasado que ocultar, aunque no le constaba, todas las cosas que le dijo a Jonghyun para molestarlo sin duda las creía, algo pasó entre ellos.
Por regla tras haber perdido una dura batalla de piedra, papel o tijera, Changmin tuvo que hacerse cargo de gran parte de la limpieza del Bar. En la mayoría de las ocasiones se turnaban aquella tarea, pero de vez en cuando solían jugar para determinar quién debía hacerlo
- Detesto esto – se quejó por lo bajo, maldiciendo su suerte de esa mañana – Además estos líquidos dañan mi piel – miró ambas manos, las que solía cuidar detalladamente con una crema especial que se hacía llegar por paquetería desde Seúl
Suspiró profundamente antes de tomarse un descanso, sentándose cerca de la puerta de entrada, en una de las mesas para dos personas, apoyó la cabeza sobre su mano y en pocos segundos se encontró mirando hacia la casa de Yunho, solitaria y abandonada, continuaban sin saber de él
- Diablos Yunho ¿Dónde te metiste? – balbuceó, preocupado, si tan solo le hubiese contestado un solo mensaje, si hubiese atendido una sola llamada, pero no fue así, pero al menos sabía que estaba con bien, sus mensajes fueron vistos aunque no tuvieran una respuesta
Recordó el día que lo vio por última vez, aun podía sentir el pesar cuando Yunho rechazó su ayuda, pidiéndole que lo dejara solo, aquello dolió más de lo que se hubiese imaginado, era como saber que perdió a un amigo, uno tan especial como él
- No me afectaría tanto si no te quisiera – pensó agobiado, aunque admitir aquello le hizo sentirse confundido ¿acaso no fue él quien alejó a Yunho primero? Sabía que su decisión de elegir a Jonghyun como su pareja traería consecuencias, pero aun así lo hizo y no se arrepentía, ver a su mejor amigo sonriendo a su lado era el beneficio de su decisión, aunque esta misma tuviera el alto costo de haber perdido a Yunho
Volvió a suspirar. Huyó de Seúl porque su vida se volvió complicada, porque deseaba alejarse de todo aquello que ahora consideraba tóxico, pero estar en su situación actual ya no parecía ser la mejor opción, pensando que tal vez irse del pueblo podía ser lo mejor, que Jonghyun y él volvieran a la ciudad donde pertenecían, después de todo Minho lo encontró, ya no estaba a salvo más. Sin embargo, si lo analizaba más a fondo, le gustaba su vida en la actualidad, cantar en el bar, la tranquilidad de un pueblo, sus nuevos amigos, todo ahora era tan familiar que no imaginaba su vida de nuevo dentro del caos de la gran ciudad
- Si lo consulto con Jonghyun seguramente me dirá que nos vayamos, es lo que él siempre ha querido – analizó un poco, sintiendo pesar por haberle confesado lo de Yunho, ahora su novio estaba inseguro, aunque tratara de esforzarse y no demostrarlo – Basta Changmin, deja de darle vueltas al asunto y termina aquí – miró a su alrededor, avanzó muy poco en más de dos horas que llevaba ahí, los quehaceres del hogar nunca fueron lo suyo.
Yunho abrió la puerta cuando Heechul llamó, apenas lo vio le sujetó por la muñeca y lo metió en la habitación, sorprendiéndolo un poco, luego cerró la puerta
- ¿Te pasa algo? – cuestionó intrigado, Yunho se veía por demás ansioso
- Anoche tuve sexo con una mujer – informó enseguida, Heechul soltó una carcajada
- ¿Felicidades? – respondió con burla – Pero ¿no crees que pudiste decírmelo por teléfono?
- Me propuso estar en un trío – informó inquieto, aquello sin duda no podía decirlo de otra forma que no fuese en persona, pero su amigo parecía muy tranquilo
- ¿Y? ¿No es esa la fantasía de todo hetero? Sexo lésbico y algo de participación… – agregó con fastidio, los hombres como Yunho eran por demás predecibles, pero el menor negó enseguida – ¿No es esa tu fantasía?
- Sí, claro que la es – admitió sin problema, Heechul solo entornó los ojos – Pero me refiero a que no es el tipo de trío que me propusieron
- ¿Ah no? Cuéntame – pidió con morbo
- Ella y otro hombre, su esposo Gay – confesó finalmente, el mayor enarcó ambas cejas, sin duda jamás se esperó aquello
- Jung Yunho, esos son terrenos peligrosos
- Lo sé – realizó una mueca y miró hacia abajo – Me dejó su número – volvió a mirar al otro
- Lo estás considerando ¿cierto? – inquirió interesado, Yunho volvió hacer la mueca
- ¿Has hecho algo así? Sinceramente quiero tu consejo – respondió enseguida, alejándose luego de él, llegó hasta la cama y se sentó
- Claro – sonrió con descaro – A Siwon le gustan las excentricidades, te lo dije antes ¿no?
- Sí pero, no te imagino a ti con una mujer, sinceramente – aceptó avergonzado, pero la risa de su amigo lo desconcertó
- Cariño, ni yo a ti con un hombre, y mira que te has vuelto un experto cazador – contestó sin disimular su risa y lo divertido que se encontraba de admitir aquello, Yunho se sonrojó sobremanera, apartando la mirada unos instantes, después lo observó de nuevo
- Entonces ¿Qué me aconsejas? – cambió de nuevo al tema principal, Heechul lo analizó un poco, mirándolo aún desde la puerta
- Hazlo, será una experiencia nueva – sonrió ligeramente – Pero si tu moralidad no es tan libre como piensas, es probable que te arrepientas después de hacerlo – finalizó el consejo, pero aquello solo dejó más confundido a Yunho
- ¿Eso qué significa?
- Que quizás no eres tan liberal como crees, pero ya solo depende de ti
- ¿Te arrepentiste tú? – preguntó intrigado, Heechul se encogió de hombros
- Las vaginas no son lo mío, pero no me arrepiento, en realidad, de nada que haya hecho por él… Soy un idiota ¿verdad?
- No lo eres, solo estás enamorado de la persona equivocada
- ¿Y eso no me convierte en un idiota? – cuestionó con seriedad, Yunho se quedó callado sin saber que responder, aunque había algo de razón en eso – Pero no quiero hablar de eso – sonrió de nuevo – ¿Lo harás entonces?
- Pensaré un poco más en ello, pero gracias por tus palabras – él también mostró una sonrisa
- Mantenme informado de eso, pero ahora por favor, vayamos a desayunar algo, tengo hambre – propuso mientras se tocaba el estómago, eso Yunho no tuvo que pensarlo, inmediatamente se puso de pie
- Vamos – avanzó hacia la puerta y ahí se colocó los zapatos, Heechul le siguió los pasos y ambos salieron de ahí rumbo a algún restaurante, la comida del Hotel no era en realidad muy buena.
Esa noche de viernes el Bar estuvo poco concurrido, siendo fin de semana no era normal, pero a ninguno de los que trabajan ahí les importó. Mientras Donghae servía las bebidas y su novio se encargaba de entregarlas, Changmin cantaba sobre la tarima, tocando una balada acústica, mientras Jonghyun observaba desde la barra, días atrás comenzó con sus terapias, pero aún no lograba ningún avance, aumentando aún más su frustración. Del otro lado del Bar, cerca de la puerta, Junsu hizo una seña a Donghae para indicarle que saldría un momento, al no encontrar inconveniente lo hizo, alejándose unos pasos del Bar
Recibió minutos atrás un mensaje de Siwon pidiéndole que le llamara en cuanto tuviera la oportunidad de hacerlo. Llegó hasta la esquina y sacó su teléfono, haciendo la llamada
- Hola – saludó apenas escuchó la voz del otro lado
- ¿Noticias? – preguntó sin contestar, Junsu conocía sus modos así que simplemente lo ignoró – ¿Ese bastardo de Yunho ya apareció?
- ¿Bastardo? Creí que te caía bien – comentó extrañado
- Solo dime ¿hay noticias?
- Ninguna – respondió al instante – Nadie sabe nada de él, ni siquiera Donghae
- Ya veo – pausó unos instantes – Hablé con Boa el otro día, ya no serán necesarios tus servicios – indicó con indiferencia, aunque para Siwon aquella situación era mejor, no quería seguir atendiendo los favores de su amiga, menos ahora que Yunho le parecía insoportable
- Muy bien, era difícil salir sin que sospecharan
- Ven cuando puedas por tu liquidación, si no estoy yo, te lo dará un empleado
- Está bien – sonrió emocionado, ese dinero extra le venía bien – Hasta luego
- Adiós – contestó de mala gana y colgó, Junsu miró el teléfono y sonrió con fastidio
- Grosero – encogió de hombros y regresó al Bar, sin levantar la más mínima sospecha.
Llegó la hora del último descanso de Changmin antes de acabar su turno, se sentó justo al lado de su novio y le agarró la mano unos segundos, Jonghyun lo miró y sonrió
- ¿Estás cansado? Podrías ir a dormir – comentó el mayor, preocupado de que su pareja se deprimiera cada vez que solamente podía escucharlo sin ser partícipe de ese escenario
- ¿Cansado? Para nada, además escucharte es un placer – respondió convencido, Changmin le dio una pequeña palmadita en el hombro
- Búsquense una habitación – planteó Donghae, claramente envidioso de verlos tan unidos
- Más tarde – guiñó el ojo Changmin al responder – Después no te quejes de los “sonidos raros” – determinó sin vergüenza alguna, el aludido solo entornó los ojos
- ¿Está todo bien? – preguntó Jonghyun preocupado, después de la confesión de Eunhyuk la noche anterior, el barman asintió tranquilo
- Solo estoy algo desconcentrado – miró de reojo a su novio, el mesero conversaba con una pareja sentada en una de las mesas cercana a la tarima – Los mensajes que le dejé a Yunho, luego él desapareció, mi cabeza está en otro sitio
- Algo supimos de eso – respondió Jonghyun, a Donghae no le extrañó que Eunhyuk les hubiese contado que no habían intimado en varios días
- Pero tú y Eun están bien ¿cierto? – cuestionó Changmin, claramente interesado
- Sí, no estamos peleados, incluso dormimos muy juntos, es solo el sexo. No sé, él tampoco ha tenido iniciativa
- Tal vez espera que tú la tengas – aconsejó Jonghyun – Deberías seducirlo
- ¿Qué? Es una locura – dijo avergonzado – Además temo no corresponderle, pienso en mil cosas y no puedo… lo dejaría a medias, entienden ¿cierto?
- Claro – sonrió Changmin al responder – No importa si no completas, solo deja que te lo haga, quedará satisfecho – sugirió sin pensarlo mucho – O hazlo con la boca, al menos para mantenerlo contento, no sé
- Vaya ¿ahora eres el Dr. Sexo o algo así? – respondió claramente apenado, Jonghyun miró a su novio con asombro
- El otro día hiciste eso conmigo ¿verdad? – espetó con curiosidad, había querido tener sexo, pero Changmin no, así que aquello fue el premio de consolación, el otro no dudó en admitirlo y sonrió amplio
- Ni te quejes, te gustó – descifró el “misterio”
- Sí, es verdad – encogió los hombros, después de todo no había delito que perseguir
- No sé, generalmente hacemos todo, a excepción de cuando estuvo convaleciente – confesó mientras lo analizaba – Creo que sería muy forzado ¿no crees?
- En su situación sí – consintió Changmin – Entonces mejor solo dejen que suceda
- Es un mejor consejo – accedió Jonghyun – Son una pareja muy estable
- Gracias – respondió Donghae sintiéndose más tranquilo
- Bien, creo que volveré a la tarima – dijo con pereza Changmin – ¿Quieres cantar algo? – miró a su pareja, pero él negó en silencio – Está bien – sin sentirse satisfecho por la respuesta se puso de pie y se alejó de la barra, tomando su turno de nuevo.
La madrugada del sábado llegó y con ella la finalización de la jornada del viernes, mientras el barman y el mesero se quedaron en el Bar a hacer las cuentas de cada día, Changmin y Jonghyun subieron a la habitación del primero, donde ahora dormían juntos
- ¿Sabes? Estuve pensando algo – habló Changmin mientras se desnudaba para ponerse la ropa de dormir, en tanto Jonghyun se acostaba en la cama, con solo la ropa interior puesta, lo miró al oírlo hablar
- Dímelo
- Buscaré a Minho, iré a casa de Siwon – declaró decidido, sorprendiendo a su novio, pues no esperaba aquello en absoluto e inmediatamente se mostró en desacuerdo
- No creo que sea conveniente ¿Cómo para qué? – confrontó inquieto, Changmin colocó su ropa interior y luego una camisa, avanzando a la cama, sentándose en una esquina
- Quiero respuestas, por ejemplo ¿Cómo me encontró? – explicó enojado, solo de pensar en las artimañas que hizo para malograrle su nueva vida le hervía la sangre
- ¿De qué te sirve? Solo te dirá cosas hirientes
- Lo sé – admitió cansado – Pero siento que debo cerrar ese episodio, no quiero permitirle lastimarme, quiero ser yo quien lo enfrente y no que venga él a buscarme creyendo que le tengo miedo… ¿Tengo tu apoyo? – preguntó expectante, mirando fijo a su novio – Es importante para mí que me apoyes – completó estirando su mano hasta tocarle el tobillo
- Está bien – respondió tras pensarlo unos segundos, luego sonrió
- Lo sabía – también dibujó una sonrisa. Se deslizó sobre la cama y llegó hasta él, dándole un abrazo por la cintura, Jonghyun le correspondió cerrando sus brazos alrededor de los hombros y besó su cabello
- Tengo miedo de que te lastime, no quiero que te haga daño – confesó preocupado
- Si estoy contigo, nada me hará daño – contestó honestamente, pero Jonghyun sabía que sí había cosas que podían dañarlo, si Changmin descubriera que le mintió acerca de no haberse acostado con Minho sin duda lo lastimaría, pero si se oponía demasiado a que viera a su ex amigo podía hacerlo sospechar, aquello era un arma de doble filo
- Siempre estaré contigo, nunca lo olvides – lo abrazó con más fuerza, el aludido volvió a sonreír, cerrando sus ojos
- Jamás – respondió tranquilo – Hay algo más que deseo pedirte – habló tras una pausa
- Dime
- Quiero que cantes esta noche
- ¿Qué? – sorprendido por la petición, alejó un poco de él a su pareja, Changmin lo observó con seriedad, la mirada de Jonghyun decía mucho
- Sí, esta noche, yo tocaré y tu cantarás, no aceptaré negativas
- Pero amor…
- Nada de peros, subirás a la tarima e interpretarás algunas canciones – determinó con insistencia, pese a los pucheros de su novio – No vas a ser un mantenido ¿eh? Solo yo estoy trabajando – dijo en broma, su verdadera intención era que Jonghyun se animara un poco
- Está bien – sonrió conmovido, logrando que Changmin sonriera de nuevo
- En menos de lo que piensas, esta prodigiosa mano volverá a tocar la guitarra – definió mientras agarraba su mano derecha, luego la besó
- Eso espero – sonrió en respuesta, usando esa misma mano para acariciarle el rostro – Gracias Changmin, te amo – ratificó mirándolo a los ojos, el aludido volvió a acurrucarse en sus brazos, cerrando los ojos
- Te quiero… te quiero mucho – fue su respuesta, rápida y sincera, para Jonghyun fue suficiente, había decidido que no se estresaría porque Changmin lo amara, no quería caer en el error de obsesionarse con ese hecho, en cambio disfrutaría cada segundo a su lado.
Esa noche Yunho no salió a ningún lado, Heechul regresó al pueblo apenas desayunaron, el resto de la tarde lo pasó igual que en esos momentos, encerrado dentro de cuatro paredes, cuando llegó la hora de comer, pidió servicio a la habitación, no cenó y en esos momentos no sentía hambre. La charla con su amigo lo dejó pensativo
Las ganas de aceptar eran mayores que sus deseos de declinar tan peculiar propuesta, pero aún se sentía confundido, en esos momentos de su vida era 100% libre de ataduras, el amor por Boa ya no lo consumía, su recuerdo no lo orillaba a buscarla en otros cuerpos, en otros aromas, además Changmin había dejado de ser su tormento, el haberse acostado con otros hombres le ayudó bastante, incluso cuando sentía que lo extrañaba, que quería volver al pueblo, después recordaba que si volvía lo vería al lado de alguien más, entonces sus deseos se disminuían y la rutina del sexo acudía a él, el círculo vicioso de nunca acabar
- ¿De verdad necesito tener la moral tan baja como para aceptar? – pensó mientras recordaba las palabras de Heechul, nunca tuvo problemas para ello, mientras se acostara con mayores de edad y no vírgenes no tenía ningún problema, incluso la diferencia de años, en una ocasión hace tiempo sostuvo relaciones sexuales con una mujer quince años mayor que él
Pero no era aquella la duda central, se trataba de un matrimonio, pero no uno que buscara revivir la pasión, sino uno bastante atípico, un hombre Gay maduro y su libertina esposa, cuya idea de invitarlo al lecho conyugal estaba causándole severos conflictos además de una terrible curiosidad
- Aceptaré ¿Qué malo puede pasar? – deliberó finalmente, apareciendo en su rostro una extraña sonrisa, no podía decir que no seguía confundido, pero tomó esa decisión
Estiró los músculos antes de decidir dormir, se comunicaría con Eunbee por la mañana y aceptaría la propuesta para esa misma noche de sábado, sin saber que le depararía después de aquella experiencia, pero no deseaba pensar mucho en eso, ya lo haría después de experimentar, lo peor que podía pasar es que sucediera lo que le dijo Heechul, que terminaría arrepintiéndose de haberlo hecho, pero en esos momentos aquello no parecía nada probable.
Changmin despertó temprano aquella mañana, para su asombro, Jonghyun continuaba dormido, así que se levantó despacio y bajó al primer piso, ahí estaba Donghae, preparando el desayuno y sorprendiéndose de ver a su amigo levantado temprano, los comentarios sarcásticos no se hicieron esperar
- Vaya, hoy se acabará el mundo – comentó divertido, recibiendo del otro un ligero empujón, luego el menor se colocó a su lado
- Tenía la intención de ayudarte pero…
- En el cesto hay naranjas, haz el jugo – indicó tras interrumpirlo, no dejándole opción, por lo que a regañadientes comenzó a lavar la fruta antes de cortarla
- Quiero contarte algo
- Dime – respondió Donghae sin dejar de remover la masa para los hotcakes que pensaba cocinar
- Más tarde iré a buscar a Minho a casa de Siwon – informó sin esperar, inmediatamente al oírlo Donghae dejó de batir la mezcla y volteó hacia él
- Estás loco – espetó un poco molesto – No irás
- Ya lo decidí – contradijo enseguida, oyendo de parte del otro un largo y fastidiado suspiro
- Eres un adulto, no te lo puedo impedir, pero sí te diré que es un error – manifestó con seriedad, volviendo a su tarea
- ¿Por qué es un error? No quiero esconderme más, también necesito respuestas, no puedo seguir huyendo de mi pasado – expuso convencido de que nada lo haría cambiar de parecer
- ¿Te has puesto a pensar que tal vez tu ex también está en esa casa y que Minho precisamente lo que quiere es que vayas? – indicó preocupado, Changmin que no había pensado en aquella posibilidad enmudeció por algunos momentos, luego reflexionó y negó
- Conozco muy bien a Kyuhyun, es impulsivo y testarudo, si supiera donde estoy, seguramente ya habría estado aquí en la casa, buscándome – explicó a su amigo
- Tú lo conoces, yo no. Pero piensa que es una posibilidad, ten cuidado por favor
- Gracias por preocuparte por mí – sonrió conmovido
- Eres mi amigo y te quiero ¿Cómo no voy a preocuparme? – respondió avergonzado
- Bueno, para la cursilería y terminemos esto que tengo hambre – alegó también apenado, Donghae asintió y continuó al igual que Changmin, mientras los otros dos aún no bajaban.
Después del almuerzo unos limpiaron la mesa y los otros se encargaron de lavar los trastos, al finalizar, Changmin subió hasta su habitación y buscó qué ropa ponerse, pero por más que sacó varios atuendos no se decidió por ninguno, así que se sentó en la orilla de la cama, agotado. El recuerdo de la noche en que Minho se apareció en el Bar llegó ante él, un espectáculo vergonzoso en el que salió huyendo sin proponérselo, pues Yunho lo sujetó de la mano y lo sacó de ahí, alejándolo del mal trago, ahora no estaba él, sin embargo tenía el apoyo de su pareja y sus otros dos amigos, no estaba solo
“Déjame estar contigo”
Las palabras de Yunho aquella noche resonaron en su cabeza, el recuerdo de su seductora boca susurrando cerca de la suya, luego tomándole los labios, robándole el aliento como siempre, pero él lo rechazó tras eso, motivado por la desesperación de ver a su pasado llamando a la puerta, sacándolo de su zona de confort. No se arrepentía de estar con Jonghyun, de ser su pareja, pero ahora que Yunho cada vez se alejaba más y más de él, le preocupaba perderlo, de haberlo lastimado tanto aquella noche que ya no hubiese punto de retorno para los dos
Se tocó inconscientemente los labios, recordando los últimos besos, hasta que la puerta de su habitación abriéndose lo sacó de sus recuerdos, era Jonghyun, sonrió cuando sus miradas se encontraron
- Vaya, has sacado todo – expresó al ver tanta ropa sobre la cama, se acercó hasta donde estaba el mayor, al llegar agarró una camisa color negro – Esta se te ve muy bien, pero ¿Por qué sacaste tanto?
- No sé qué ponerme – encogió de hombros – Quiero que me vea muy guapo y se muera de envidia, supongo – admitió avergonzado, haciendo reír a su novio – No te burles
- Como sea que vayas, te verás muy guapo, eres el más apuesto de todos – halagó sin pensarlo un segundo, Changmin sonrió
- Me ves con ojos de amor, es lo que pasa – refutó enseguida, Jonghyun quitó una prenda junto a Changmin y se sentó en ese espacio, dejando la camisa que agarró antes
- No tienes que impresionar a ese idiota ¿de acuerdo? Solo sé tú – aconsejó sinceramente, el mayor asintió, Jonghyun sujetó su mano y le besó la mejilla – Anda que se te irá el día pensando en cómo vestirte
- Ya voy – respondió con flojera, haciendo un esfuerzo sobrehumano por ponerse de pie
Jonghyun lo observó mientras daba una segunda vuelta a la revisión de su ropa, eligiendo por fin un atuendo simple, pantalones ajustados color negro y una camisa azul marino de mangas cortas y cuello V, luego avanzó hacia la cómoda y peinó su cabello, terminando de prepararse.
Desde el pleito en la mañana anterior, Siwon y Heechul no se dirigieron la palabra, el segundo pese a ser otro trabajador, solía tener otra clase de privilegios dentro de la casa, los demás empleados lo sabían, así que ese día se lo tomó libre, quedándose en su habitación, sin ganas de salir y verle la cara a su arrogante jefe
Por su parte Siwon se encerró en la oficina y pidió que no se le molestase, sin embargo fue interrumpido por uno de los empleados que llamó a la puerta, él lo hizo pasar
- ¿Qué sucede? Dije que nada de molestias ¿eh? – cuestionó enojado
- Lo siento, es que afuera está un joven preguntando por Minho, pero ya que usted dijo que todo lo relacionado con él se lo informemos no le he avisado, preferí venir con usted antes – explicó con templanza – Si lo prefiere entonces le diré
- Basta… está bien, atenderé eso, dile que pase – indicó aún de mal humor, el empleado solo asintió y salió de ahí – Debe ser Changmin, no hay otra explicación – pensó con fastidio
Minutos después el recién llegado caminó tras el empleado, asombrándose nuevamente de lo grande y elegante que era esa casa, pero también de lo fría y solitaria que lucía. Se detuvieron frente a la oficina y la puerta se abrió, Changmin observó a Siwon sentado tras el escritorio, con su laptop y unos papeles justo al lado, este sonrió al verlo, como si fuesen amigos
- Retírate – ordenó a su empleado y este obedeció – Pasa – habló hacia Changmin, pero este se quedó de pie en el marco de la puerta, no quería arriesgarse a estar a solas con él – Vamos, no te haré daño – mencionó sardónicamente, sonriendo con burla, al otro le hirvió la sangre pero se contuvo, así que solo apretó los labios unos segundos
- ¿Puedes salir tú? ¿Por favor? – respondió con seriedad, tratando de ser educado
- No, entra o lárgate – contestó molesto, Changmin supo que ya se encontraba de mal humor y si lo hacía enojar más no obtendría un encuentro con Minho. Entró a paso lento y se quedó cerca de la puerta – Cierra la puerta
- Prefiero…
- No estás aquí para poner condiciones, cierra la puerta y siéntate – decretó sin delicadezas, Changmin no tuvo más opción que obedecer. Cuando se sentó Siwon suavizó su expresión facial y cerró la pantalla de su computadora – Te escucho
- Solo quiero ver a Minho, créeme que no estoy aquí por otra cosa
- Lo sé – encogió los hombros – Pero ya que él es mi “invitado de honor” quiero saber qué es lo que quieres
- Hablar con él – respondió tranquilo – Quiero saber qué pretende
- Ya veo – asintió varias veces – Lo llamaré aquí y oiré todo
- Pero…
- Mi casa mis reglas. De otra forma él no sabrá que estás aquí, lo aseguro – dijo de forma amenazante, logrando impacientar a Changmin
- Eres un idiota – expresó molesto, sin contenerse, Siwon frunció el entrecejo
- Vete de mi casa, ya mismo – indicó enojado, Changmin comprendió su error, así que trató de tranquilizarse, respirando profundo
- Por favor, solo quiero hablar con él. Está bien si quieres oír – admitió paciente, sabiendo que no tenía de otra
- Qué bueno que lo comprendas – sonrió sarcásticamente y se puso de pie, rodeó el escritorio pese a tener el teléfono junto a él y se colocó tras la silla donde estaba Changmin
- Gracias – respondió nervioso, detestándolo más en ese instante, se sentía acosado en todo momento, cuando sintió la respiración ajena cerca de su cuello tuvo un escalofrío y se sobresaltó un poco
- Me encanta tu olor, tu aroma es tan sexual – susurró cerca de su oreja y Changmin estuvo a punto de golpearlo pero Siwon se separó por sí solo, estiró la mano hacia el teléfono y marcó dos dígitos, a la habitación donde estaba su inquilino – Ven a la oficina, rápido – ordenó con tono neutro y colgó, luego se apartó de la espalda de Changmin y volvió a su escritorio, el menor lo miró con recelo, con el coraje contenido de no haberle propinado unos golpes
Siwon se dio cuenta de esa actitud y no dejó de sonreír, sabiendo que por lo pronto tenía todo el dominio de la situación, Changmin mansito, obedeciéndole, así lo había querido ver desde que pasó por aquella humillación del rechazo. Ambos esperaron a Minho en silencio, observándose fijamente como dos enemigos naturales.
Donghae se acercó a un ansioso Jonghyun, quien se paseaba de un lugar a otro en el Bar, esperando por noticias de Changmin a pesar de haberse marchado apenas diez minutos atrás
- No te hace bien estar así ¿Por qué no te sientas? – preguntó preocupado, el aludido lo miró y negó en silencio – Changmin sabe lo que hace, solo confía en él – aconsejó sinceramente
- Confío en él, pero en Minho… – pausó unos momentos – Además en casa de Siwon, pudo haberlo contactado y mirarse en otro lado, no sé – encogió los hombros con inquietud, haciendo una peculiar mueca, luego le dio la espalda a su amigo y miró hacia afuera
- Vamos adentro – se acercó hasta él y le agarró la mano por unos segundos, el otro volteó ligeramente y asintió
Entraron en la casa, Eunhyuk bajaba las escaleras, acababa de salir de bañarse
- ¿Changmin ya se fue? – cuestionó al ver la expresión trágica de la pareja de su amigo
- No debí dejarlo ir solo – lamentó angustiado – Iré por él
- Estás comportándote muy aprehensivo ¿no crees? – observó el mesero, Jonghyun lo miró detenidamente, analizando – Él quiso ir solo, de otra forma te habría pedido que lo acompañaras, apóyalo así y no cometas una imprudencia
- Eunhyuk tiene razón – intervino Donghae – Esperemos, te aseguro que nosotros también estamos preocupados, solo nos queda esperar
- Está bien – admitió al fin, resignado. La pareja se miró y asintió, habían logrado el objetivo.
El corazón de Changmin palpitó aceleradamente cuando oyó el llamado a la puerta, Siwon sonrió y miró de reojo a su inquieto invitado, luego respondió indicando que pasara
Minho observó la espalda de su antiguo amigo y no tardó en distinguirlo, aunque no estaba acostumbrado a verlo con ese cabello, las grandes orejas y el fino cuello lo delataban, así que sonrió ampliamente, con morbo, compartió una mirada con Siwon
- Oh vaya, que sorpresa me has traído – habló hacia su “benefactor”, pero este negó
- Vino solo – contestó con indiferencia – A verte – explicó
- Como sea, es una desagradable sorpresa – comentó con malicia, Changmin apretó los labios, controlándose de no tirársele encima a golpes, Siwon se dio cuenta pero se mantuvo al margen de la situación, no le interesaba intervenir, solo quería estar enterado de todo, por mero morbo – ¿No vas hablar? ¿Te comieron la lengua los ratones? – se mofó sonriente
- Créeme que para mí tampoco es agradable – habló finalmente, girando un poco la cabeza
- ¿Y qué quieres? ¿No pudiste esperar a que te buscara de nuevo? ¿Extrañaste mi rostro acaso? – inquirió divertido, comenzando a caminar hacia donde se encontraba Siwon, posicionándose a su lado, mirando por fin los ojos de Changmin, este le sostuvo la mirada y por algunos segundos solo se quedaron así, mirándose
- ¿Cómo me encontraste? – encaró finalmente, Minho enarcó una ceja, no esperaba que le preguntara aquello – No entiendo como diste con este lugar – anexó
- ¿Preguntas cómo? Fácil, me lo dijo tu novio – respondió con descaro, confundiéndolo
- ¿Jonghyun? – indagó perturbado, Minho lanzó una sonora carcajada
- Ahora son novios, vaya final tan bonito – bromeó entretenido, logrando que Changmin se comenzara a molestar – Así que definitivamente el insignificante Ése cumplió su sueño
- No lo llames así – contestó enseguida, frunciendo el ceño con dureza – Colmas mi paciencia y te arrancaré los cabellos como aquella noche – amenazó enojado – No… te romperé la cara
- ¡Cállate! – espetó indignado, el recuerdo de aquella noche siempre lo perseguía, nunca en su vida se sintió tan humillado como aquella vez
- Dime a quién te referías con mi novio – exigió recuperando la compostura, tratando de no perturbarse demasiado y terminar golpeándolo
- Al otro ¿Yunho se llama? – respondió aquello, sorprendiendo no solo a Changmin, sino también a Siwon, este último lo miró fijamente, intentando atar cabos
- Él no es mi novio – contradijo enseguida – Además, Yunho jamás me habría hecho algo así. No creeré en tus mentiras nunca más, no lograrás provocarme – dijo con firmeza, a Minho le pareció muy poco conveniente que le tuviera esa confianza
- No me creas, pero recuerda que él fue a Seúl, ahí nos conocimos ¿te lo contó? – continuó, intentando echar veneno, Changmin sonrió confiado
- Claro que sí
- Ya te lo dije, si no quieres creer allá tú
- No sé cómo hiciste, sé que no me contarás la verdad, así que ya no me importa lo que quieras decirme – expuso convencido – El principal motivo de venir, es decirte a la cara que no me afecta tu presencia – sonrió un poco – El daño que me causaste quedó atrás, enterrado. Solo me molesta tu descaro y el saber que tontamente te di confianza y cariño, pero los tiraste a la basura y el motivo ya no me importa. También dile a Kyuhyun si es que aún lo ves, que siga con su vida, ya no lo amo y nunca volveré con él, hace mucho que dejé de amarlo, pero lo perdono. Dile eso
Mientras Changmin hablaba, Minho intentaba parecer estoico, pero realmente hervía de coraje, cuando se presentó en el Bar le dio la impresión de que aún había algo de dolor, que podía lastimarlo, pero ahora se mostraba decidido y sincero, entonces lo hizo pensar que sin duda tenía que recurrir a llevar a Kyuhyun al pueblo, quizás así lograría descolocarlo, dañarle lo suficiente para destruirlo de una vez, como su plan inicial
- No soy tu mensajero, ve a Seúl a decirle toda esa basura, ni tú te la crees – respondió enojado aunque supo que su ex amigo decía la verdad, sus ojos siempre eran claros y fáciles de leer, así podía saber si le mentía o no
- Da igual – encogió los hombros y se puso de pie, ignoró a Minho y miró hacia Siwon – Eres un imbécil, pero gracias – expresó tranquilamente, el aludido se quedó quieto, aun pensando en porqué Minho diría que Yunho y Changmin son novios. De forma confiada les dio la espalda y avanzó hacia la puerta dispuesto a marcharse
- ¿No te da curiosidad saber quién dio el primero paso? – sin otra forma de detenerlo, sacó aquello de la manga, tal vez Changmin dejó de amar a Kyuhyun, pero su orgullo estaría herido toda la vida, lo conocía de sobra
- No – respondió aun tranquilo, sujetó el picaporte y lo movió hacia abajo para abrir
- Fue él, Kyuhyun se me abalanzó como una bestia – informó de todos modos, Changmin se detuvo, empuñando con fuerza el picaporte, Minho sonrió al darse cuenta, mientras que Siwon se quedó en su sitio, solo observando con curiosidad la escena
- No me importa – resolvió aun tranquilo y abrió la puerta
- “Changmin está distante conmigo” el típico pretexto del infiel ¿no te parece? – continuó hablando, imitando al inicio a su ex amante, Changmin cerró por algunos segundos los ojos, luego se giró hacia atrás, Minho vio en sus ojos que estaba teniendo éxito
- Eres tan patético – espetó irritado – Para de una vez
- Fue unas semanas antes de su cuarto aniversario – sonrió con nostalgia – Después de eso ya no pudimos parar, estábamos locos el uno por el otro. Lo tenías tan insatisfecho… Yo solo le di lo que tú no, pasión
- ¡Cállate! – explotó por fin, acercándose a él le estrelló un puñetazo en la cara, el cuál no vio venir, fue tan fuerte que cayó encima de Siwon, quien miraba asombrado y sin embargo sonrió, que buen espectáculo era aquello – Zorra de porquería
Totalmente asustado Minho se agarró la cara al sentir un terrible dolor, luego se miró las manos con sangre y gritó, el rostro del que tanto se vanagloriaba estaba roto, aun con todo su coraje, Changmin se sintió un poco culpable, pero no retrocedió, luego miró a Siwon
- No tengo idea de cómo o por qué se han aliado, pero te apuñalará por la espalda, ten cuidado – advirtió como forma de agradecimiento, lo detestaba, pero gracias a él logró ver al idiota de su ex amigo, Minho era traicionero y él lo vivió, no deseaba ver a nadie en su misma situación
Changmin se giró sobre sus talones y salió rápido de ahí, cerrando la puerta tras de sí, avanzó hacia la salida, en la sala se topó con Heechul, ambos se detuvieron de improviso al verse, el mayor pudo ver los ojos irritados del menor, su expresión compungida y no fue difícil adivinar
- ¿Estás bien? – preguntó casi preocupado, Changmin negó en silencio. Agachó la mirada unos segundos y después lo miró de nuevo, sin decir nada continuó su andar, no dándole tiempo a añadir nada más, Heechul avanzó hacia la puerta y ahí se quedó, viéndolo marcharse.
Changmin subió a su auto y como pudo se alejó, lo suficiente para no tener la mansión de Siwon cerca, pero no tan lejos como para estar próximo al Bar, estacionó afuera de una heladería y apagó el vehículo
- ¿Insatisfecho? – analizó con el pulso aún a mil y sintió deseos de llorar, solo por coraje. Jamás se perdonaría a si mismo haber confiado ciegamente en los dos
Siempre fue doloroso saber que le traicionaban, pero nunca se puso a pensar en los detalles, ahora tenía unos cuantos y habría preferido no saberlos En su cuarto aniversario Kyuhyun le regaló un costoso reloj y Minho presumió haberle ayudado a elegirlo, pero Changmin nunca sospechó ni un poco. Ahora tenía claro cuando pudo haber empezado todo y por más que quisiera no especular sobre ello, no podía evitarlo, sacaba cuentas y algunas escenas venían a su memoria, ahora las veía de diferente forma, la conclusión era inevitable
- Más de un año… estuvieron viéndome la cara más de un año – molesto golpeó el volante, haciendo sonar el claxon, luego agarró este por los bordes y se estiró hacia atrás, apoyando la cabeza en el asiento, respiró profundo y cerró los ojos, segundos después los abrió y miró al frente, trató de calmarse – No vale la pena Changmin, piensa frío – esperó un par de minutos más antes de volver a echar andar el coche y regresar a casa, no quería preocupar a los demás, así que era mejor no hacerles ver lo afectado que estaba.
Luego que se marchara la peculiar visita, Siwon llamó a uno de sus empleados y dio indicaciones de llevar a Minho con un doctor, no preocupándose siquiera de acompañarlo ni nada, después de todo no le importaba, el único inconveniente es que por un tiempo no tendría deseos de besar esos labios partidos
Ahora lo que venía a la mente de Siwon era la pequeña charla que presenció, tenía dudas, así que pese a saber que Heechul estaba enojado con él, mandó un mensaje a su celular y le pidió ir al estudio, pero su empleado no respondió, entonces no tuvo más remedio que irlo a buscar a su habitación, entrando sin ser invitado. Lo vio sentado en la cama, con el celular
- Te llamo después – dijo en voz baja y colgó el teléfono, segundos atrás llamó a Yunho para contarle que vio a Changmin ahí, que seguramente habló con Minho, pero no tuvo oportunidad de hacerlo – Es mi día de descanso
- Lo sé – respondió escuetamente, acercándose a la cama, se sentó en ella, cerca de los pies de Heechul, quien lo miraba con frialdad – Ya te lo pregunté antes y sé que me mentiste, así que dímelo de una vez ¿Qué hay entre Yunho y Changmin?
- Nada – declaró sin miramientos
- ¿Hubo algo antes?
- No lo sé – encogió los hombros y pretendió ignorarlo
- Anoche hablé al club Magnolias – informó con tranquilidad – Yunho se ha estado acostando con varios hombres a quienes contacta ahí – explicó impaciente, Heechul tragó saliva – Me han contado cosas realmente difíciles de creer para alguien que lo conoce de tantos años como yo, pero no las dudo, Yunho ya no tiene escrúpulos, se tira lo que sea que se mueve ¿no?
- Él no es tú – respondió rápidamente, Siwon sonrió mordaz, pero el comentario lo molestó
- ¿Donghae lo sabe?
- Siwon por favor… – intentó detener la intención de lo que seguía
- Se lo diré si no me dices la verdad – amenazó decidido, no quería caer tan bajo, pero lo haría si no conseguía lo que quería saber
- Basta, no lo hagas. Donghae es muy importante para Yunho, lo destrozarás si se entera que Yunho se ha acostado con hombres – explicó preocupado, pero al otro no le importaba – ¿No solías preocuparte por Donghae? ¿Quieres verlo sufrir? – cuestionó con intención de hacerlo retroceder, pero se veía más decidido que nunca
- Es sencillo Heechul, está en tus manos
Sin tener otra opción, Heechul finalmente lo aceptó y asintió en silencio, luego habló
- Fueron amantes, ya no – contestó con seriedad, sintiéndose el peor por haber traicionado a Yunho, pero sabía que si esa información llegaba a oídos de Donghae, sería peor para su amigo, en realidad el barman no le importaba, pero Yunho sí
- Vaya, vaya – expresó sin sentirse sorprendido, de hecho era algo que ya esperaba oír
- Los dejarás en paz ¿verdad? A todos ellos – continuó con la charla, a manera de súplica, Siwon hizo una mueca con los labios, como si lo estuviera pensando
- Depende de cómo te portes conmigo – respondió jocosamente, Heechul entornó los ojos
- Siempre he accedido a toda tu porquería sin chantajes
- No hablo de sexo – interrumpió antes que dijera más tonterías – Quiero que dejes de follar con Yunho ¿entendiste?
- Nunca lo hemos hecho – informó al instante, sin que le creyera
- ¿En qué quedamos con las mentiras?
- Una noche en un club, nos besamos. Ha sido todo – reveló sin problema alguno – Solo somos amigos – completó con seriedad
Siwon lo miró detenidamente, analizando su comportamiento, las palabras, creía en él, pero de cualquier forma odiaba esa amistad recuperada, estaba celoso
- Más te vale – amenazó con autoridad, Heechul enarcó una ceja
- No eres mi dueño – contradijo molesto, pero Siwon negó, acercándose hacia él sobre la cama, llegó hasta su rostro y le mordió el labio inferior
- Eres mío – dijo mirándolo a los ojos, Heechul no fue capaz de objetar aquello, quedándose quieto cuando su jefe comenzó a besarle el cuello. Estaba cansado de sentirse el juguete de un niño egoísta y malcriado, pero lo amaba y era capaz de seguir a su lado sin importar aquellas pequeñas humillaciones, de algún modo, Heechul controlaba a Siwon, ahora lo tenía enfermo de celos y aquello era un punto a su favor.
Regresó por fin al Bar y atravesó este, sorprendiéndose de no ver a su novio ahí, cuando se fue lo dejó nervioso y angustiado, ya imaginaba verlo ahí esperándolo, pero no fue, eso lo hizo sentirse aliviado. Entró en la casa y apenas comenzó a subir las escaleras, oyó la puerta de la habitación de sus amigos abrirse, después a Donghae asomarse, se le unió Eunhyuk después, no le dieron siquiera tiempo a terminar de llegar al segundo piso
- ¿Cómo te fue? ¿Estás bien? ¿Pudiste verlo? – comenzó a interrogar el barman
- Les platicaré ¿sí? – respondió avergonzado, hace tiempo que no recibía tanta atención
Llegó hasta el final de las escaleras y la puerta de su habitación también se abrió, volteó hacia allá y vio a Jonghyun salir, acercándose enseguida a él, mirándolo atento
- ¿Lo viste? – a su cuestionamiento Changmin asintió, después los miró de forma general
- No quiero hablar aquí – comentó incómodo, subiendo la mano derecha se acomodó el cabello tras la oreja
- ¿Qué te pasó en la mano? – inquirió un asombrado Eunhyuk, enseguida los otros dos miraron también, después lo hizo él mismo y se miró los nudillos rojos, con algo de sangre, sentía la mano acalambrada pero no le había prestado atención, de no ser por el otro ni lo habría notado
- ¿Qué te hicieron? Iré y…
- Cálmate macho en potencia – interrumpió a su novio, intentando ser bromista para que no hicieran aquel tema más grande del que se merecía, luego sonrió – Estoy bien, no me hicieron nada – explicó un poco
- Acá nos cuentas, te limpiaré eso – habló el barman, agarrando a Changmin de la muñeca lo jaló hacia la habitación de él y su novio, los otros dos los siguieron
Entraron y Donghae le indicó a Changmin que se sentara en la cama, mientras Jonghyun se sentó en el sillón y Eunhyuk permaneció de pie junto a la puerta. Sacó el botiquín y se sentó junto a él, comenzando a limpiarle el área afectada aunque no fuese su sangre, pero los nudillos de Changmin estaban raspados y la piel irritada
- Hablando con Minho me alteré y lo golpeé en la cara - aclaró finalmente el porqué del estado de su mano
- Bien hecho, yo le hubiera tumbado todos los dientes – halagó Eunhyuk sin pensarlo mucho, haciendo sonreír a su amigo, aunque lucía un poco preocupado
- No quería demostrarle que me importan sus palabras, pero me hizo enojar, mucho. No suelo ser violento, perdí los estribos y siento culpa – confesó avergonzado, mientras Donghae continuaba limpiándolo
- Por Dios Changmin, ese tipo arruinó tu vida, destruyó todo lo que conocías y te obligó a apartarte de tu familia, no te sientas mal, tampoco culpable, ese golpe es lo menos que se merece ¿de acuerdo? – expuso Donghae, convencido, el aludido asintió
- No estoy de acuerdo en una cosa – declaró enseguida – No arruinó mi vida, los tengo a ustedes ahora – sonrió, sonrojándose, luego miró hacia Jonghyun – Y estamos juntos… tal vez debería agradecerle – completó, mirando de nuevo a Donghae, este sonrió
- Claro, nos tienes a nosotros, somos como un tesoro ¿cierto? – expresó Eunhyuk con orgullo
- Tú eres un tesoro medio feo, pero sí – opinó en broma, causando la indignación del aludido y la risa de los demás
- Donghae – regañó a su pareja, este lo miró
- Yo te veo guapísimo mi amor – expresó de forma exagerada, guiñándole un ojo, el mesero solo se cruzó de brazos, aparentando seguir indignado
- Bueno pero… ¿Qué más pasó? – irrumpió Jonghyun, mirando a su novio
- No es importante, dijo tonterías para lastimarme, me contó detalles de su amorío con Kyuhyun, de verdad no vale la pena que hable de eso – hizo una mueca con los labios al pausar – En resumen puedo decirles que le dije lo que tenía pensado decir y me siento tranquilo, de verdad, dejé en claro mi posición ahora, él no tiene más armas para dañarme, se los aseguro – dijo convencido, siendo completamente sincero
- Me alegra oír eso – respondió Jonghyun, sintiéndose tranquilo, temió por un momento, cuando Changmin se fue de la casa, que Minho dijera alguna estupidez, que le contara lo que hicieron en su casa, la tarde que se volvieron una fugaz pareja
Donghae terminó el primer paso y después untó una crema relajante en el área afectada, colocó una venda corta y le indicó a Changmin que la quitara hasta el día siguiente
- ¿Les parece si vamos a comer algo? Son casi las dos, es tardísimo – propuso Changmin, que apenas desayunó esa mañana, los demás estuvieron de acuerdo y bajaron a la cocina a preparar algo.
Se dieron las diez de la noche cuando Yunho se detuvo frente al portón de una acaudalada casa, no una mansión, pero sí una vivienda bastante lujosa, corroboró el número con el que anotó en su celular, dudó en timbrar, pero volvió a convencerse casi enseguida, así que por inercia tocó, escuchando en el interfono una pronta respuesta
- ¿Quién es? – escuchó una voz masculina, alguien de edad madura, pero no percibió los años, pensó que quizás era un empleado, tal vez el esposo de Eunbee
- Yunho – contestó serio, después dudó si había hecho lo correcto, no recordaba haber dado su nombre, si sabrían que se trataría de él, con quien habían arreglado un trío
- Adelante – obtuvo pronta respuesta y el portón eléctrico se abrió. No tardó en recorrer el pequeño camino hacia la casa, la puerta de madera que seguía fue abierta por la mujer con quien se acostó, ella sonrió al verlo
- Bienvenido – saludó como si fuesen viejos amigos, cuando el otro entró cerró la puerta y lo hizo pasar a la sala de estar
Yunho miró a Eunbee de pies a cabeza, lucía una coqueta falda unos pocos centímetros por arriba de la rodilla, color verde opaco, una blusa lila de botones al frente y manga larga, el atuendo la hacía lucía un poco mayor que la primera vez, pero también más atractiva, Yunho tragó saliva, los carnosos labios color rojo le invitaban a devorarlos, pero sabía que faltaba un tercer elemento para comenzar la fiesta, así que se contuvo y decidió mejor prestar atención en los zapatos de tacón que combinaban con su atuendo
- ¿Sabes? Me sorprendiste con tu llamada, no creí que aceptarías tan pronto – comentó tranquila, como si hablasen de cualquier negocio, pero el motivo era más oscuro del que pensó cuando aceptó la propuesta
- Si, ya sabes… solo se vive una vez – sonrió un poco tras decirlo, ella sonrió coquetamente
- Ponte cómodo, iré por mi marido – habló sin agregar otro comentario, luego se apartó de ahí, caminando lento, elegante, a Yunho le pareció una mujer muy diferente a la que conoció en aquel Bar
- ¿Será muy tarde para marcharme? – pensó abrumado, ahora de solo pensar que llegaría otro hombre como si nada a conocerlo para después acostarse con la misma mujer no pareció la mejor de las ideas
La pareja no tardó mucho en aparecerse por la sala de estar, Yunho no tuvo mucho tiempo para seguir analizando todo eso. El que llegó junto a la mujer sin duda era un hombre mayor que él, pero no demasiado, tal vez estaría por llegar a los cuarenta, pero era atractivo y elegante como ella, vestía un simple pantalón color café y una camisa tipo polo de color rojo, a diferencia de ella, tenía un calzado cómodo, simples sandalias. El primer contacto de sus miradas fue extraño, el esposo mostró una atractiva sonrisa al tiempo que estiraba su mano
- Mucho gusto, mi nombre es Minsung – saludó tranquilamente, Yunho se puso de pie para responder el saludo y también se presentó – Me dijo Eunbee que es tu primera vez con un hombre – comentó como si nada, a Yunho no le gustaba mentir, pero lo hizo, así que asintió
- Me gusta experimentar – sonrió confundido, no sabía qué proseguía
- ¿Así nomás? Es extraño, siendo heterosexual creería que piensas que tu participación en un trío de dos hombres y una mujer no tiene nada que ver con lo homosexual, pero no es lo que te propusimos ¿eres consciente? – a su pregunta Yunho asintió – De acuerdo
- Mientras conversan ¿algo de beber?
- Trae el Cabernet sauvignon que compramos el otro día por favor – indicó el hombre – Gracias cariño – agregó con amabilidad cuando ella se apartaba
- Sé lo que acepté – reanudó Yunho sin problema
- Bien – sonrió de nuevo de forma encantadora, el menor no podía dejar de ver su atractivo rostro, no era guapo, pero tenía porte, no lucía amanerado y se expresaba con propiedad, Yunho no dudó ni por un segundo que en la cama fuera completamente diferente, aquello era normal, dentro de cuatro paredes las personas se volvían otras, él incluso estaba ahí, a punto de hacer un trío bisexual sin que los demás salvo Heechul supieran o les pasara por la mente la sola idea
- ¿Dónde…? Tú sabes
- Eso lo vemos ahora, primero los términos – interrumpió casi enseguida
- ¿Términos?
- Así es – asintió tranquilo – Nos evitaremos malos entendidos ¿Cuáles son tus límites? – inquirió con premura, Yunho al principio no entendió muy bien, sin embargo respondió
- Límites – dijo en voz baja – No quiero ser pasivo… ¿a eso te refieres? – a su pregunta el hombre asintió, contento de haberse dado a entender – Ni nada de juegos, en “esa” zona
- De acuerdo, no lengua, no dedos, nada – secundó tan tranquilo que Yunho se comenzó a sentir confundido y hasta cierto punto incómodo – ¿Qué más?
- No te hago sexo oral – estableció también como algo primordial, el otro rio divertido, Yunho era el típico hombre tratando de defender el último gramo de virilidad, aunque a él le parecía algo inútil, pero no comentó nada al respecto
- ¿Es todo? – a su pregunta Yunho asintió – ¿Seguro? – la pregunta lo hizo dudar
- ¿Qué más podríamos acordar? – cuestionó inocente, el hombre sonrió jocosamente e hizo una pequeña pausa, en ese intermedio volvió la mujer con una botella, un descorchador y tres copas, colocándolo sobre la mesita junto al sillón donde estaba sentado Yunho
- Fetiches, Parafilias, BDSM… – comenzó a enumerar, Yunho abrió un poco más los ojos sorprendido, el otro esperaba esa reacción y comenzó a reír
- Mi cielo, no lo asustes – regañó rápido la mujer, poniendo en las manos de su marido la botella y el quita corchos – Tranquilo Yunho, solo está fastidiándote, será sexo normal ¿de acuerdo? – preguntó de forma cariñosa, el mencionado la miró y asintió – Lo importante solo era que dijeras lo que no estás dispuesto a hacer o que te hagan
- ¿Y tú? – preguntó curioso, ella sonrió amplio
- Que lindo – se agachó un poco y le dio un beso en la mejilla, liándolo un poco, luego lo miró de nuevo a los ojos, de pie – Lo tengo a él – miró a su esposo y él le devolvió la mirada – Si haces algo que pueda lastimarme, lo solucionará, te lo aseguro – informó sin dudarlo un poco, Yunho se dio cuenta que en realidad se miraban de forma amorosa
- Eunbee me contó que la trataste bien, así que creo eres de confianza – completó la respuesta, luego la pareja miró hacia Yunho, este asintió en silencio
- ¿Te gusta en la cama? ¿O dónde sea? – preguntó amablemente ella, mientras su esposo destapaba la botella y servía las tres copas
- Donde sea. Es igual – respondió sin tomarle importancia. Recibió su respectiva copa y bebió un trago, el sabor de ese vino era mil veces mejor que cualquiera que hubiese probado en toda su vida
- Entonces vamos, hay un mejor sillón en la sala – propuso ella, indicándole que se pusiera de pie y obedeció. Cada quien caminó con su copa en la mano, el marido llevaba además la botella
Caminaron hacia otra habitación, Yunho vio que en definitiva aquel mueble era más amplio, la mujer solo bebió un trago más y dejó la copa sobre la chimenea que adornaba el sitio, luego se sentó al extremo del sillón, Yunho junto a ella, echó un vistazo a la sala, constaba de tres muebles y una mesa central, no muy grande pero lo suficientemente alejada del sillón más grande de los tres, había también la chimenea eléctrica y un pedestal cerca de la entrada, no más
- Estás un poco tenso ¿no crees? – preguntó Eunbee con amabilidad, pidió a su esposo la botella de vino y llenó la copa de su invitado – Relájate – sonrió amplio, levantando su mano comenzó a acariciarle el pecho tras deshacerse de la botella, sus labios no tardaron en besar su cuello, subiendo hasta detrás de su oreja, causándole un agradable cosquilleo
Yunho dio un trago largo hasta acabarse el contenido de la copa, el otro la quitó de su mano y también se deshizo de lo demás. Mientras ella lo besaba, el marido observaba de pie logrando que nuevamente se sintiera incómodo, se sentía como cometer adulterio aunque consensuado, nunca en su vida se sintió de aquella forma, pero no hubo marcha atrás
Aceptó y ahora no tenía de otra que seguir el ritmo, así que se inclinó al lado y la sujetó del rostro, buscando sus labios, el primer beso fue lento, mientras sus manos comenzaron a explorar el frente de su blusa, deslizando su piel contra la tela, sintiendo bajo sus dedos los pechos firmes, los acarició. Olvidó que a unos pasos de ellos se encontraba el esposo, hasta que un movimiento junto a él se lo advirtió de nuevo, la mano izquierda de Minsung sobre su rodilla, deslizándose por el muslo hasta acariciarle la entrepierna, luego su respiración cerca de la oreja, la boca ajena rodeó su lóbulo y chupeteó un poco
Estaba en medio de los dos, besándola a ella y recibiendo besos de él, la mano izquierda de Yunho comenzó a desabrochar la blusa, colándose por debajo de la tela, tocando mejor, mientras el otro hombre le desabrochaba a él los pantalones, besándole el hombro. Apartó los labios de Eunbee y se giró al otro lado, el marido levantó su cabeza y se miraron a los ojos, dejó de desabrochar el pantalón y subió la mano hasta la nuca de Yunho, atrayéndolo, se dieron un beso profundo que hizo al mayor jadear, sonrió cuando se apartaron, pero el menor volvió a lo suyo con ella, quien tiraba la blusa al piso, desabrochó el sostén y volvió a besarse con él
Resopló cuando sintió la mano cerrarse alrededor de su miembro erecto, miró a su lado izquierdo y besó por segunda vez los expertos labios del otro hombre, al dejarlos agarró su propia camisa y la sacó por el cuello, después de deshacerse de ella, elevó las caderas mientras Minsung lo masturbaba y se quitó el pantalón conjuntamente con la ropa interior, lo besó de nuevo unos instantes, al terminar pronto volteó a su derecha, Eunbee se quitó la falda, quedándose solo con sus pantaletas, se levantó y colocó la rodilla izquierda sobre el sillón, sintiendo las manos de Yunho tocarle el pecho, sustituyéndolas por su boca
Las dudas y reflexiones quedaron atrás, Yunho solo podía concentrarse en lo que estaba sintiendo, no quería pensar más en el bien o el mal, si aquello era un error, en esos momentos no le importaba. Metió dos dedos diestros en su boca y al sacarlos los llevó hacia la ropa interior de ella, introduciéndolos por debajo de la tela, los gemidos no se hicieron esperar, mientras su boca volvió a entretenerse chupeteando sus pezones. En tanto el otro hombre aprovecho ese instante de concentración en su esposa y dejó de tocarle para poder quitarse la ropa, del pantalón extrajo algunos condones y un frasquito de lubricante, dejándolos en un rincón del sillón, volvió a su posición, besando las tetillas de Yunho y masturbándole
La mano izquierda del menor fue sujetada por Minsung que la llevó hasta su miembro, él no dudó en sujetarle también, moviendo de arriba hacia abajo, lento, se tocaban mutuamente y el mayor se sintió cómodo en no haber recibido una negativa. Miró a su mujer y ambos compartieron una mirada de lujuria, se acercaron para besarse en la boca…
Observó hacia abajo, la boca de ella lo engullía con maestría, sintiendo a la vez la mano del otro acariciándole los genitales, chupeteando sus tetillas, la excitación era grande, dos personas ocupándose de su cuerpo, una experiencia que no había vivido antes; cada uno a su lado. Eunbee se detuvo, irguiéndose, acarició la cabeza de su esposo y este la levantó del pecho ajeno, se comunicaron con la mirada, y no tardó el otro en ser quien se agachara, sujetando el miembro de Yunho y metiéndolo a su boca, enseguida sintió la diferencia, la rudeza, la profundidad. Gimió sin pudor por segundos, antes que su voz fuese callada por los labios de la mujer
No querían que la fiesta terminara pronto, era momento de cambiar el rumbo, Yunho colocó uno de los condones sobre su entrepierna y se acostó de espaldas en el sillón, Minsung se acercó a su mujer y la besó en la boca
- Las damas primero – dijo cortésmente, ella río por lo bajo y no se hizo esperar, montándose sobre Yunho, cabalgándolo con habilidad, mientras él la acariciaba
El otro sonrió, le gustaba ver a su mujer disfrutando, ambos habían llevado a sus respectivos amantes a esa casa donde solo vivían ellos, su hijo residía en el extranjero donde estudiaba, así que aquel hogar siempre era de libertinaje. Al igual que Yunho se colocó un condón, pero a diferencia de él puso lubricante, agarrando un extra para colocarlo en sus dedos, expandiéndolo en la zona indicada y penetró a su esposa tras inclinarla al frente, ambos dentro aunque en diferente lugar
El menor enloqueció completamente, podía sentir en su totalidad la actividad del otro dentro de ella y la sensación nunca en su vida la había tenido, temió lastimarla pero todo parecía estar bien, la peculiar pareja lo disfrutaba tanto como él, así que no bajó el ritmo, estaba por llegar, el orgasmo fue inminente, besó a Eunbee con pasión cuando finalizó, luego dejó caer la cabeza sobre el mueble, respirando con dificultad.
Amablemente el otro le quitó el condón y se deshizo de él, habían colocado antes que llegara Yunho un pequeño cesto de basura tras ese sillón, donde desde el inicio habían planeado que se llevaría a cabo el acto
- ¿Te gustó? – preguntó coquetamente Eunbee, acostada sobre Yunho, a quien no permitió levantarse, era obvio que no había terminado aquello, el aludido asintió, aunque aún se sentía como que no se encontraba ahí, todo le resultó extraño
- Nos complace que hayas aceptado – habló el mayor, acercándose por un costado, el menor miró su cuerpo desnudo, la entrepierna que antes acarició, luego levantó la mirada hasta observar los ojos ajenos, no dialogó con él – Eunbee no se equivocó al invitarte
- Estás un poco serio – observó ella, levantando su pecho del de Yunho, este sonrió
- Lo siento – respondió al fin, levantándose un poco, hasta que su espalda se apoyó sobre el brazo del mueble, la mujer sonrió y aún sentada sobre sus piernas le dio un beso en la boca
- Tal vez necesitas, un poco de concentración – mordió ligeramente su labio inferior tras decirlo, agarró ambas manos de su invitado y las llevó a sus senos, él no se negó a sujetarlos con suavidad, comenzando a masajear, usando sus dedos para los pezones
No tardó mucho en comenzar a sentir el conocido cosquilleo. El otro hombre se acercó de pie por el costado y su mujer le sujetó la entrepierna con la mano derecha, usando la izquierda para Yunho, quien miró a Minsung, esta vez él no se lo indicó, tomó la iniciativa de acariciarle los testículos al liberarse de una mano, la otra continuó acariciando el pecho de Eunbee…
La segunda y muy seguramente última ronda comenzó, en esta fue ella quien se acostó sobre el sillón, pero no completamente, recibiendo a su esposo de frente, este le sujetaba las piernas y se abalanzaba hacia delante, deteniéndose solo cuando Yunho estuvo listo, el menor colocó lubricante solo sobre su extensión y entró en él, poco a poco, comenzando a embestirlo lentamente, hasta que por fin su pene pudo entrar por completo; agarró sus caderas para embestir con firmeza, cegándolo de placer
- Sí, así – gimió con goce, comprendiendo por qué su mujer quedó fascinada con el chico, tan vigoroso y ardiente – Más fuerte… – suplicó sin pudor, Yunho supo que tuvo razón en su primera impresión, solo era galante en apariencia, cuando aparecía quien le hiciera gozar así, se volvía un animal en celo
No dudó en complacerlo y arremetió con fuerza, logrando que sus movimientos influyeran en los del otro. Los tres estaban disfrutándolo mejor que la primera vez, sus gemidos los delataban. Yunho se agachó para mordisquear el hombro ajeno, al separarse también soltó una de sus manos la cadera ajena, sujetando en sustitución el hombro que mordió, empujándose más rápido agarrándose de ambos lados, así podía hacerlo más fuerte, más profundo. Minsung gritó en medio de sus gemidos, hace tiempo alguien no lo hacía gozar tanto, Yunho se abalanzó con fuerza al frente cuando terminó e hizo que su cuerpo ejerciera presión hacia abajo, los gimoteos de Eunbee le indicaron que tuvo éxito en lo que buscaba
Unidos por algunos segundos respiraron con dificultad, calmando su agitación. Poco a poco Yunho se retiró, sintiendo un estremecimiento, las rodillas le temblaron por segundos pero se irguió sin problema, quitándose enseguida el condón, tirándolo donde vio la primera vez; hizo su corto cabello hacia atrás y miró a la pareja separarse, miró la escena como si no hubiese participado en ella, desvió la mirada unos momentos
- Eres increíble – expresó el mayor, acercándose a él lo suficiente como para que Yunho sintiera su miembro cerca de la ingle. No tuvo problema con besarlo en la boca – Si algún día quieres repetir…
- Lo pensaré – interrumpió enseguida, sonriendo un poco
- Yo iré a bañarme ¿quieres venir? – preguntó Eunbee hacia Yunho, este negó
- Debo irme – respondió tranquilo – Gracias por todo – expresó sincero, aunque después pensó en esas palabras, sonaban raras
También ella se acercó a Yunho en señal de despedida y lo besó, agarró sus cosas y se retiró, desnuda, dejándolos solos. Minsung se comenzó a vestir ahí mismo, Yunho hizo lo propio, ambos en silencio, de vez en cuando el mayor observaba al otro, admirando su cuerpo, pensando en lo mucho que le gustaba, aunque él prefería ser pasivo, le habría gustado hacerlo suyo, poseerlo y hacerle gritar su nombre. Sonrió con poca discreción
Yunho sintió la mirada sobre él y lo observó de reojo, sin Eunbee presente el ambiente se sintió extraño, apareció de nuevo la incomodidad. Apresuró la última prenda, se aseguró que el celular y la cartera estuvieran en sus bolsillos y se giró hacia su anfitrión de aquella noche
- ¿Sabes? Tienes potencial – habló antes que el menor dijera algo – Casi pienso que me mentiste y sí te habías montado hombres antes – expresó adrede, en definitiva ya no se creía esa historia, aunque no dudaba que era la primera vez que participaba en un trío bisexual. Yunho tragó saliva, no le debía explicaciones, pero saberse descubierto lo avergonzó, era obvio que aquel hombre se dio cuenta
- Como dije antes, me marcharé – cambió la conversación
- No olvides que si deseas podemos vernos de nuevo, con mi mujer o sin ella – dirigió una mirada penetrante al otro, Yunho sonrió nervioso y sin embargo hizo una pequeña reverencia
- Tengo su número, tal vez – contestó tranquilo – Me retiro
- Te acompaño a la puerta – respondió a lo último, sin insistir en lo primero
Yunho salió de prisa de aquel predio, caminó a la avenida más cercana y pidió un taxi. No pensó en nada de lo que hizo momentos atrás, su mente estaba en blanco, llegó al Hotel y apenas estuvo en su habitación, el peso de todo le cayó encima, apoyada la espalda sobre la puerta suspiró profundo y se tapó la cara con ambas manos
- ¿Qué hice? – musitó casi perturbado, quedándose así por algunos segundos, descubrió su rostro y enseguida se desnudó por completo, dirigiéndose al baño, sin cerrar la puerta se metió bajo el chorro de agua tibia, dejando que esta recorriera su cuerpo
Sus músculos se relajaron y sintió alivio, tardó un poco en reaccionar, limpiando su cuerpo centímetro a centímetro con el jabón. Las imágenes en su mente, el recuerdo de las caricias en su piel, hombre y mujer, satisfaciendo su cuerpo, también dejándose penetrar por él, sin duda un momento de inflexión, esa pareja representaba sus dos etapas de sexo sin sentido
La culpa apareció, Heechul tuvo razón, quizás estaba seguro de ese resultado y quería que lo viviera, que se diera cuenta del punto al que llegó su vida sin dirección, cayó bajo, pero no significaba que no podía salir de ese hoyo, solo era cuestión de tomar las riendas de su vida, no huir más, necesitaba volver al pueblo y arreglar sus emociones, tomar las decisiones que le hacían falta y volver a empezar.
Como lo prometió antes, aquella noche Jonghyun se subió a la tarima a cantar, mientras Changmin tocaba la guitarra, pero no lo hizo hasta después del segundo descanso de su novio, los clientes lo animaron alegremente, en aquel pueblo donde las noticias llegaban a todos los rincones, no era secreto que el guitarrista del Bar tuvo un accidente y después de eso no pudo volver a tocar aquel instrumento, además que su voz les gustaba
Habiendo visto la reacción que tuvo entre sus escuchas, los ánimos de Jonghyun se elevaron y Changmin estaba más que contento, le encantaba verlo de buen humor, desde que volvió de Seúl lo percibía triste y sabía que eso se debía al estar alejado de la música. Para Jonghyun el escenario era más que una simple afición del momento, incluso le gustaba componer, antes de llegar a ese pueblo, en su vida anterior, solía tocar en un Bar algunos fines de semana, combinando aquello con la monotonía del trabajo de oficina, por eso el no poder hacerlo lo entristecía, si no fuese porque Changmin estaba a su lado y era su pareja seguramente se habría hundido, pero por fortuna no fue así
- Tomaremos otro descanso, muchas gracias – habló al micrófono antes de apagar el aparato, recibiendo fuertes aplausos, sonrojándolo ligeramente, hace tiempo no se sentía tan agradecido, así que hizo una reverencia final, luego se giró hacia Changmin, parecía algo serio, pero cuando lo vio sonrió amplio
- Estuviste increíble – halagó con emoción – Tengo muchas ganas de darte un beso
- Cuando estemos solos podrás darme los que quieras – respondió aún más alegre, mientras el otro colocaba la guitarra junto a uno de los banquitos – ¿Qué pasa?
- ¿De qué? – cuestionó confundido
- No sé, te siento ¿distante? – examinó preocupado, no imaginaba ni un solo motivo por el que estuviera así. Cuando lo vio hacer una mueca con la boca entendió que algo le disgustaba
- No es nada…
- Changmin, por favor
- Ay está bien – expresó resignado – Hay un tipo por allá que no te quita la mirada de encima y no me agrada – confesó finalmente, sorprendiendo a su novio, quien no se dio cuenta de aquello para nada
- ¿De qué hablas? Nadie me estaba viendo de esa forma, los clientes miran hacia acá todo el tiempo. Además, tal vez te miraba a ti que eres un bombón – respondió guiñándole un ojo, tratando de no sonreír demasiado o seguramente lo haría enojar, Changmin entornó los ojos
- Hablo en serio. Te digo que te miraba a ti – observó de forma discreta hacia el antedicho – Antes que subieras volteaba de vez en cuando hacia acá, pero desde que subiste tú no te quita la mirada ni un segundo. Me desagrada – confesó sintiéndose un poco tímido, hace mucho que no sentía celos por algo tan simple
- Tienes que estar bromeando – negó un par de veces con la cabeza – No puedo creer que te pongas así por algo tan insignificante
- Tú me preguntaste, solo te respondí – encogió los hombros, tratando de minimizar el asunto – Y si no me crees mira tú mismo, es la mesa siete – señaló al tiempo que también movió la cabeza hacia el lugar indicado
Jonghyun lo dudó unos segundos, luego se decidió, discretamente se giró hacia las mesas del Bar, justo en la siete estaba un hombre solo, más o menos de su edad, atractivo, y efectivamente lo estaba observando, cuando sus miradas se cruzaron se sintió extraño y volvió a mirar a su novio, sintiéndose un poco confundido
- ¿Lo viste? – preguntó al ver la reacción de su pareja, pero el otro no respondió, estaba pensativo, Changmin lo llamó un poco más fuerte – Amor, te estoy hablando – insistió
- Perdón es que… siento que lo he visto en algún lado – contestó al fin, instantes después se giró de nuevo con cautela, esta vez el desconocido le sonrió, así que Jonghyun lo observó fijo por unos momentos, después miró a Changmin – Creo que lo conozco – reafirmó
- Sabiendo tus mañas, tal vez un día te acostaste con él y ya ni te acuerdas – comentó con fastidio, cruzándose de brazos, Jonghyun sonrió avergonzado
- De hecho es una posibilidad – admitió intentando no reírse, Changmin le dirigió una mirada fría y no tuvo mayor remedio que guardar su sonrisa o tendría serios problemas con su pareja
- Vamos a beber algo – cambió pronto de tema el mayor, bajándose primero de la tarima, Jonghyun tardó pocos segundos más, echando un último vistazo, el hombre ya no lo veía porque recién empinaba un trago de su copa
- Te felicito, fue genial – expresó Donghae apenas sus amigos se sentaron frente a la barra, en el lugar de siempre, el aludido volvió a sonrojarse y sonrió
- Harás que me avergüence – respondió apenado, pero el barman agitó la mano al frente
- Te extrañábamos y estoy seguro que muy pronto podrás volver a tocar, serán de nuevo el alma de este lugar, los adoran, de verdad – continuó halagando, Jonghyun asintió en señal de reverencia – ¿Qué les preparo? ¿O quieren cerveza?
- Cerveza para mí – respondió Changmin sin dudarlo ni un poco
- Gracias pero sigo tomando medicina – declinó la oferta el otro – Solo agua
A la petición Donghae atendió enseguida, luego los tres conversaron un poco antes que llegaran tanto Junsu como Eunhyuk para solicitar pedido, así que el barman tuvo que atender a sus dos meseros
- Mañana es domingo, deberíamos ir al río ¿Qué te parece? Llevamos algo de comida y pasamos el día allá – propuso de repente Changmin, tratando de animarse y animar de paso a su pareja, Jonghyun asintió con emoción
- Qué buena idea – expresó con honestidad, recordando que incluso hace tiempo no salían así, además de las pocas ocasiones que lo hacían, es porque iban los cuatro, a veces incluso Yunho, pero ahora serían solo ellos dos
- Perfecto – sonrió con ánimo, olvidando por completo al sujeto que no dejó de mirar a su novio en todo el tiempo que estuvo cantando
La pareja comenzó a darse ideas entre ellos sobre lo que podían llevar a su romántico día de campo, mientras que el barman atendiendo los pedidos, de vez en cuando les aportaba ideas, así los tres estaban conversando
- Hola, disculpa… – una voz detrás de ellos les interrumpió, Donghae miró al cliente que se había puesto de pie e hizo a su amigo una indicación con movimiento de cabeza de que voltease, así que lo hizo, pero no solo él, también Changmin – ¿Eres Lee Jonghyun? – cuestionó con voz neutra, haciendo notar que se trataba de alguien de Seúl, un forastero igual que ellos
Apenas vio de quién se trataba, Changmin lo miró con seriedad, observando de reojo a su novio después, Jonghyun miraba fijo y extrañado a aquel desconocido, ahora que estaba cerca le resultaba más familiar
- Sí, lo soy – respondió confundido, el otro sonrió amplio
- Vaya, es que estás casi igual – comentó con satisfacción, había creído por un momento que quizás lo estaba confundiendo
- Perdona pero ¿De dónde te conozco? – examinó no solo su rostro, sino también su voz, su forma de moverse, la personalidad, pero nada encuadraba con sus recuerdos, el otro estiró su mano, notoriamente avergonzado
- Lo siento, mis modales. Soy Jung Yonghwa ¿Me recuerdas? De la escuela media – respondió al fin, al oír eso Jonghyun no tardó en acordarse y devolvió el apretón de manos, sonriendo mucho más amplio, haciendo que aquella reacción no agradara en absoluto a su novio
- Sí, claro que te recuerdo – comentó con emoción – Es solo que no te reconocí Tus ojos… ¿Operaste tu nariz? – preguntó con indiscreción, el otro asintió, sonriendo apenado
- Unos ligeros retoques aquí y allá, solamente – confesó sonriendo nervioso
- Te ves excelente, muy guapo – aduló sin dudarlo un poco, tratando de compensar su anterior error al hacer preguntas importunas
- Gracias – sonrió alegre – ¿Sabes? Cantas muy bien pero recuerdo que lo tuyo era la guitarra ¿ya no tocas? – cambió rápido de tema, tocando uno sensible, Jonghyun suspiró
- Es una larga historia
- Tengo toda la noche – habló enseguida, dirigiéndole una mirada que para Changmin fue la cereza del pastel, entonces aclaró su garganta, el recién llegado lo miró, no le había puesto el mínimo de atención, pero el más alto observaba con recelo
- Es cierto – secundó Jonghyun preocupado, a esas alturas su novio seguro estaba más que enojado, ese carraspeo lo confirmaba – Te presento a mi novio, Changmin – estiró su mano e intentó agarrar la de su pareja, pero este la apartó, no dejaba de mirar al otro
- Mucho gusto – saludó el aludido, dejando a Yonghwa con la mano estirada por unos segundos, luego le dio un apretón fugaz
- Vaya, no tenía idea de que fueras Gay – comentó asombrado, pero Changmin se dio cuenta que no se trataba de un asombro por disgusto, parecía que la noticia le agradaba
- Nunca lo oculté ni negué, incluso en la escuela media – aclaró sin problema
- Tal vez, pero nunca lo dijiste tampoco – sonrió ligeramente – Además siempre estabas rodeado de chicas, lo recuerdo a la perfección – el aludido rio divertido
- Niñas hormonales detrás de un adolescente con guitarra, me parece que no es nada del otro mundo – expuso con elocuencia, luego ambos se rieron
Asombrado por lo que veía, Donghae pasaba la vista de uno a otro, parecían viejos amigos más que simples conocidos, luego miró a Changmin y se dio cuenta que solamente le faltaba tirar humo por la cabeza
- Pero dime ¿Qué haces en un pueblo como este? ¿Estás de paso? – cuestionó Jonghyun
- Algo así – asintió el otro – Tengo apenas un día hospedado aquí y espero quedarme al menos dos semanas más – comunicó enseguida
- ¿Se puede saber a qué?... Perdón, de nuevo estoy siendo indiscreto
- Está bien – sonrió por cortesía – En la ciudad vecina hay una tienda grande de instrumentos y venden unas piezas que no encuentro en otros lados, así que prácticamente vine por negocios, me quedé en este pueblo porque me interesaba contactar a unas personas y es más fácil desde aquí que en la ciudad – detallé sin pausas
- Creo saber a cuál tienda te refieres, alguna vez vi algo ahí que me interesaba comprar pero nunca volví – comentó con tristeza – Entonces te dedicas a la música
- Sí, tengo algunos estudios de grabación y otros negocios relacionados – notificó con orgullo, extrayendo después de su cartera dos tarjetas de presentación, dio una a Changmin y otra a él, ambos la miraron – Tengo un proyecto en puerta como productor, si algún día quieren pasar de ser aficionados, con toda seguridad búsquenme
- Gracias – habló Jonghyun sonriendo, aunque sentía tristeza, si lo hubiese reencontrado antes del accidente su respuesta habría sido muy diferente
- Lo tendré en cuenta – secundó Changmin tratando de ser amable nada más
- No lo digo a la ligera, tienes una voz hermosa – halagó con honestidad – Sobre tu música – volvió a pasar de Changmin para mirar a Jonghyun, haciendo que el otro de nuevo lo mirara con desconfianza, haciendo más que obvias sus intenciones – Me gustaría oír tu historia
- Claro, siéntate – señaló el asiento junto a él
- Tenemos que cantar de nuevo – interrumpió el mayor cuando el invitado no deseado intentaba sentarse al otro lado, ambos miraron a Changmin, quien empinó de a una sola todo el contenido de la cerveza
- Tal vez otro día – dijo Jonghyun mirando a su conocido, quien asintió estando de acuerdo
- O puedes quedarte después que cierre el Bar, no hay problema – intervino Donghae. En seguida Changmin se giró hacia él y le dirigió una mirada tan feroz que el barman se sorprendió un poco, reconociendo luego su error
- Perfecto – contestó Yonghwa con emoción – Muchas gracias, que amable
- Gracias Donghae – habló también alegre Jonghyun, luego miró al otro – Volveremos allá – señaló la tarima y luego miró a Changmin, sonriéndole, pero él lucía tan serio que rápido se giró de nuevo a Yonghwa – Charlamos más tarde
- Sí – levantó su mano como despidiéndose y se alejó a la mesa donde antes estaba sentado, Jonghyun se adelantó primero hacia la tarima, en esos segundos Changmin miró a Donghae
- Estás muerto – amenazó molesto, el barman tragó saliva
- Perdón, no creí que estaba haciendo algo malo – respondió sinceramente, Changmin negó en silencio y se apartó hacia la tarima, segundos después Eunhyuk se acercó a la barra
- ¿Qué le pasa a Changmin? Un poco más y explota, que mirada…
- Ahorita te cuento – respondió el barman casi asustado, había visto a Changmin celoso, pero no a ese grado, resultaba sorprendente.
- ¿Estás molesto? – preguntó por lo bajo a su novio mientras lo observaba colocarse la guitarra, este lo volvió a ver pero no respondió – Éramos amigos en la escuela media, solíamos ser unidos, pero hace años que no lo veía – explicó preocupado
- Es Gay ¿verdad?
- ¿Yonghwa? – cuestionó confundido – Lo dudo, ya viste, se sorprendió que yo lo sea. Fuimos unidos pero no íntimos, no es que lo sepa todo de él
- Cuando supo que eres homo le brilló la mirada, le gustas – concluyó sin problema, Jonghyun negó enseguida, indignado
- Deja de decir tonterías ¿sí? Charlamos luego
- No te das cuenta, pero yo sí – contradijo enojado
- Por favor Changmin, discutimos eso después ¿sí? – el otro asintió, calmándose – Bien, comencemos – sonrió relajado, listo para encender el micrófono y volver a cantar.
Dio varias vueltas sobre la cama antes de darse por vencido, no podía dormir, no después de la práctica que vivió apenas unas horas atrás. Sexualmente fue placentero, no podía negarlo, pero todo eso le hizo percibir un sinsentido a su vida que nunca antes tuvo y la culpa fue inminente, pero no solo por esa experiencia, sino analizando su pasado en introspectiva. Los años persiguiendo el fantasma de Boa que solo le dejó un vacío peor, llenarlo sin duda le costaría mucho esfuerzo, sobre todo ahora que entendió que el sexo no era la forma correcta.
Miró el reloj de su teléfono celular, eran cerca de las tres de la mañana, pero no se contuvo, marcó al móvil de su amigo, sin embargo Heechul no respondió a la primera, Yunho insistió marcando hasta tres veces, al final recibió respuesta, su amigo sonaba adormilado
- ¿Qué diablos quieres? – respondió de mala gana
- Tenías razón – respondió abrumado, sentándose sobre la cama, prendió la lámpara a su lado y cerró los ojos unos instantes debido al brillo
- ¿Sobre qué? ¿Ya aceptaste que amas a Changmin? – inquirió sonriendo divertido, el largo suspiro del otro lado le confirmó que logró su objetivo en molestarlo
- Déjate de bromas, hablo en serio – contradijo rápido, Heechul siempre hacía esa clase de comentarios, o se refería al menor como “tu amorcito”, sacándolo de sus casillas
- Ya no te alteres, cuéntame ¿Sobre qué tengo razón?
- Lo hice… estuve con la pareja – confesó avergonzado, aunque su amigo fue informado de que iría, en esta ocasión le revelaba que aquel encuentro ya se llevó a cabo, Heechul se terminó de despertar
- Puercote ¿Cómo te fue? – inquirió interesado, pero su expresión inicial puso incómodo a Yunho, quedándose callado unos segundos – No seas mojigato, anda
- Todo salió bien
- ¿No intentó sodomizarte?
- No, no, nada de eso – respondió rápido, avergonzado – Puse condiciones
- Entonces fue fantástico ¿cierto? ¿te los cogiste a los dos?
- Heechul por favor – regañó abrumado – No quiero contar detalles, no insistas
- Que aburrido – suspiro antes de decirlo – Entonces dime para qué llamaste
- El otro día antes de aceptar, me dijiste que me arrepentiría, que me daría cuenta que no soy tan libertino como creí. Tenías razón – confesó finalmente, sintiéndose un poco aliviado de habérselo dicho a alguien – Lo sabías ¿cierto? Iba a sentirme así, querías que lo hiciera
- Yunho…
- Te lo agradezco – interrumpió sin demora – He decidido volver al pueblo. Necesito poner orden a toda mi vida, sin arrepentimientos – dijo decidido, sonriendo, no quería huir más, no iba a refugiarse en el sexo de nuevo
- Te felicito, en verdad – habló el otro, orgulloso de la decisión que tomó su amigo. Yunho tuvo razón, él sabía que una vez viviera aquello con la pareja, se daría cuenta que su rumbo estaba mal, pero había una ruta para retornar, volver a sus raíces era el primer paso.
Los últimos clientes abandonaron el Bar, Junsu entregó sus cuentas y finalmente el lugar se cerró para el exterior, mientras Eunhyuk y Donghae cerraban la caja y contaban las ganancias del día, en la tarima, Changmin y Jonghyun desmontaban los instrumentos para dejar todo guardado y acomodado, el menor miró a su novio
- Yo termino, ve – dijo de repente, sintiéndose culpable por su actitud de antes, pero su pareja negó, sonriendo
- Que espere – respondió tranquilo, luego estiró su mano y le acarició el rostro – Te amo ¿de acuerdo? – dijo mirándolo a los ojos fijamente, Changmin asintió.
Mientras la pareja terminaba de hacer lo suyo en la tarima, la otra se encontraba observando desde la barra, sintiéndose aliviados de que Changmin luciera mucho más relajado que hace un rato, luego miraron hacia el chico que permanecía sentado
- ¿Qué opinas? Se ve confiable ¿no? – preguntó Donghae a su novio, este analizó detenidamente, pero no respondió – Activa tu radar y dime ¿Es de los nuestros? – inquirió hacia el mesero, ya que él siempre presumía de su instinto, pero Eunhyuk dudó un poco
- Diría que sí, pero no estoy completamente seguro – habló finalmente, sorprendiendo a su novio, era la primera vez que dudaba en responder algo así, podía llegar a equivocarse, pero nunca dudaba
- Yo solo espero que a Changmin no le termine dando un colapso nervioso – comentó el barman preocupado.
La pareja terminó de hacer las cuentas y cerraron la caja, casi al mismo tiempo Changmin y Jonghyun también terminaron y bajaron de la tarima
- Eunhyuk, les quiero presentar a alguien – hizo una seña con la mano al tiempo que lo decía, así que el aludido y el otro se acercaron al lugar indicado, mientras él también lo hacía, seguido de Changmin, tratando de estar sereno – Él es Jung Yonghwa, fuimos compañeros y amigos en la escuela media – presentó en cuanto el mencionado se puso de pie
- Mucho gusto, me llaman Eunhyuk – saludó primero el mesero
- Lee Donghae, soy dueño del Bar – secundó de buen humor, el otro los saludó a ambos
- Lindo lugar. Recién llegué fui a comer a un restaurante sobre la carretera, me hablaron de este sitio, así que vine, precisamente por la música en vivo – miró hacia la otra pareja y sonrió
- Gracias, te esperamos cuando quieras – respondió el barman – Amor, vámonos para que platiquen cómodamente – se dirigió a su pareja y él asintió, el invitado los miró sorprendido
- Nos retiramos – complementó Eunhyuk, luego se despidieron de sus amigos y se marcharon. Changmin y Jonghyun al igual que Yonghwa se sentaron en aquella mesa
- Ahora sí, soy todo oídos, cuéntame de ti estos años – habló con entusiasmo Yonghwa, dirigiéndose a Jonghyun, él asintió y comenzó a relatar solo lo más importante…
La tercera vez que Changmin cabeceó sintió el brazo de su novio alrededor de sus hombros y se despabiló un poco, durmió algunos segundos sin darse cuenta
- Estás durmiéndote – comentó su pareja preocupado, el mayor apenas si fue partícipe de aquella conversación y ya eran más de las cuatro de la mañana, talló uno de sus ojos
- Perdón, me prepararé un café – respondió avergonzado
- ¿Por qué mejor no vas a dormir? – indicó tranquilamente, pero su sugerencia no fue del agrado del otro, por lo que recibió una mirada recelosa – O no, ve por tu café – se contradijo al instante, antes de causar un problema mayor
- ¿Quieren uno? – preguntó mirando hacia el antiguo compañero de escuela de su novio, este asintió al igual que Jonghyun, al recibir la respuesta de ambos, Changmin se levantó y salió de ahí hacia la cocina, quedándose un silencio incómodo por algunos segundos
- Vaya, tu novio es muy peculiar – glosó sorprendido – ¿Siempre es así de celoso?
- No – contestó rápidamente Jonghyun, luego lo pensó unos segundos – O no lo era – sonrió avergonzado, luego bajó un poco la voz – Su anterior novio lo engañó con uno de sus amigos y eso le ha afectado mucho, de unos meses para acá se ha vuelto celoso, pero es una magnífica persona, te lo aseguro – explicó honestamente
- Debes amarlo mucho, se te ve en la expresión cuando hablas de él – a sus palabras Jonghyun asintió, sonriente – Dime una cosa ¿todos aquí son abiertamente homosexuales? – cuestionó de pronto, cambiando abruptamente el tema, sorprendiéndolo
- ¿Todos aquí? ¿Hablas de esta casa o del pueblo? – inquirió confundido
- Esta casa, o sea, en el pueblo se sabe que ustedes…
- Sí ¿Por qué deberíamos ocultarlo? – cuestionó contrariado, Yonghwa realmente se veía serio hablando de eso, quizás era homofóbico de alguna forma
- No sé… – encogió los hombros, pensativo – Miedo al rechazo – agachó un poco la mirada
- Yonghwa ¿Tú eres Gay? – examinó con tacto, observándolo fijamente, tratando de encontrar su mirada, el otro no respondió, luego de unos segundos alzó la vista y sonrió
- Es tarde, debo irme – evadió sin dudarlo, Jonghyun enarcó una ceja – Dile a Changmin que muchas gracias por el café, será en otra ocasión
- Sí, claro – respondió resignado, luego ambos se pusieron de pie. Yonghwa avanzó a la puerta y se detuvo ahí, al siguiente segundo lo alcanzó Jonghyun quien abrió quitando los candados sobrepuestos
- Me dio gusto volverte a ver, en mi tarjeta está mi celular, llama cuando quieras – indicó antes de salir del Bar, Jonghyun asintió, se despidieron con la mano y Yonghwa fue hasta su vehículo, subió en él y se marchó
- Actuó tan raro – pensó confundido, nunca creyó que su antiguo amigo reaccionara así a su pregunta, cuando esperaba solo un sí o un no, pero no obtuvo respuesta – Tal vez siga en el clóset – razonó un poco, luego le restó importancia y fue por la llave para cerrar
- ¿Y tu amigo? – preguntó Changmin cuando entró con una charola y tres tazas, viendo a su novio cerrando los candados, Jonghyun acabó y fue hacia él
- Dijo que tenía que marcharse, me pidió que te agradeciera por el café – informó a su novio, Changmin enarcó ambas cejas con disgusto
- ¿Vendrá luego?
- Lo llamaré – asintió Jonghyun, convencido de que quería volverlo a ver
- Ya veo…
- Changmin ven, platiquemos – hizo una seña y volvió a la mesa, el aludido dejó la charola sobre la barra y agarró dos de las tres tazas, colocándolas frente a ambos – Creo que fuiste un poco grosero – observó con tacto, queriendo evitar una disputa
- ¿Yo? Él te comía con la mirada – espetó enojado, haciendo que el otro suspirara con fastidio y esa reacción provocó la molestia de Changmin – ¿Qué significa eso?
- Basta por favor, estás siendo ridículo – dijo también molesto, pero no quería alterarse
- ¿Ridículo yo? – preguntó con desgano – “Te ves excelente, muy guapo” – imitó con voz absurda a su novio – También te gusta a ti ¿verdad?
- No es posible – sonrió para no mostrarse molesto – ¿Sabes qué? No quiero discutir – para no desairar el café de su novio, dio un pequeño trago y se puso de pie, alejándose rápido de ahí, no dándole tiempo a que lo detuviera
- Ni siquiera lo niega – musitó enojado, también probó del café y esperó unos minutos antes de marcharse, mientras analizaba todo – Creo que exageré – suspiró cansado, el café no lo ayudó a perder el sueño, así que se puso de pie y apagó las luces, dirigiéndose al interior de la casa, subió con cuidado las escaleras y fue a su habitación
La luz estaba apagada y no la encendió, a tientas llegó hasta la cama y se quitó la ropa, quedándose solo con los calzoncillos, se metió con cuidado en las sábanas. Estuvo quieto algunos segundos, hasta que se decidió a buscar el cuerpo de Jonghyun, estaba a unos centímetros del suyo, sintió la espalda y lo abrazó por detrás, buscando su oreja con la boca
- Lo siento – susurró a pesar de no saber si Jonghyun dormía – ¿Sigues molesto conmigo?
- Un poco – respondió por lo bajo, Changmin no contestó, en cambio le dio un beso en el cuello, suavemente
- ¿Y ahora? – musitó de manera más sensual, a su oído
- Tal vez – dijo sonriendo, mordiéndose después el labio inferior cuando su novio metió la mano por debajo de la ropa interior y le acarició – Ligeramente molesto – jadeó excitado, Changmin estaba logrando su propósito
- Entonces… – apartó la sábana de los dos y cambió de posición, volteando a su pareja para tenerlo boca arriba, descendió directo hasta sus piernas y se colocó en medio, sujetó su miembro ahora despierto y lo introdujo a su boca, succionando enseguida, complacido de oír los gemidos de Jonghyun
- Te perdono – gimió antes de correrse, sujetando con suavidad la cabeza de Changmin con una mano, apretando la sábana con la otra. Terminó por completo y se relajó, sonriendo, el mayor le acomodó la ropa en su lugar
No tardó en subir hasta él y buscar sus labios, se dieron un beso y luego el más alto se abrazó a su novio, cerrando los ojos, Jonghyun le acarició la espalda, luego lo abrazó con la otra mano, besando sobre sus cabellos
- Entiéndeme – comenzó a hablar Changmin con voz baja y cautelosa – Fui confiado, creí ciegamente en dos personas y me traicionaron, tengo miedo de sufrir otra vez, lo que sentí aquella vez fue espantoso, no quiero revivirlo y sé que no es tu culpa – continuó antes que el otro interrumpiera – Por eso tardé tanto en tomar una decisión, en concluir que sí deseaba una relación con alguien, y ese alguien fuiste tú, ahora tengo miedo de perderte
- Changmin – habló finalmente, con suavidad – Claro que te entiendo. Pero lo que viviste no es motivo para tratar a los demás como tus enemigos, o de pensar que te traicionaré con el primero que se me ponga enfrente, compréndeme también
- Sí, te lo prometo – acordó sin problema, levantándose un poco para besar a Jonghyun, luego ambos se abrazaron y no tardaron en quedarse dormidos, de momento aquella discusión había terminado.
Luego de oír ruidos extraños provenientes de la cocina, Donghae caminó con más cuidado, a paso lento, siempre solía ser el primero en levantarse, pero ahora alguien se le adelantó y claro era que no se trataba de su novio porque este aún dormía. Con sorpresa vio que se trataba de Changmin, quien ya se encontraba preparando el desayuno
- Por Dios ¿sigo soñando? – preguntó asombrado, Changmin se giró hacia él y le dirigió una sonrisa adorable, confundiendo al barman – ¿Estás drogado? – cuestionó en broma
- ¿Te gustan los champiñones? Asaré algunos – informó con emoción
- ¿No me digas que incluso fuiste temprano al mercado? ¿Acaso dormiste algo? – inquirió esta vez preocupado, el otro asintió
- Dormí pocas horas, pero descansé bastante – dijo con tranquilidad – Donghae, perdóname – pidió tras una pequeña pausa, el otro entendió ahora el porqué de su comportamiento, así que negó en silencio – Solo estabas siendo cortés, hiciste lo mismo cuando vino Chang Wook, yo te dije algo feo, lo lamento
- Olvídalo, ya fue – encogió los hombros y se acercó más a él – ¿Te ayudo en algo?
- No, puedo solo, muchas gracias – sonrió contento, agradecido de que su actitud de la anterior noche no tuviera repercusiones en su amistad – Mejor despierta a nuestros novios
- ¿Desayuno especial?
- Algo así – asintió – Tengo el presentimiento de que hoy será un buen día
- De acuerdo –obedeciendo a la petición, se marchó de ahí para hacer lo encomendado.
Aquella mañana desayunaron un poco más temprano de lo normal, pues el resto del día Changmin y Jonghyun lo planearon para pasarla en las cercanías del río, mientras que la otra pareja decidió que se quedaría en el hogar, en realidad ellos no solían salir mucho. Después de limpiar y recoger la cocina y el comedor, la pareja que saldría llamó por teléfono para pedir comida a domicilio y poder llevarla, Changmin por su parte partió algo de fruta y la guardó en recipientes para acompañar
- Mucha suerte y nos vemos más tarde – se despidió Donghae
- Descansen para que puedan trabajar con ganas por la noche – secundó Eunhyuk en su despedida, recibiendo de su novio un codazo – Es broma – aclaró enseguida
- Trataremos de descansar – respondió Changmin sonriente, acercándose a su novio por un costado le dio un beso en la mejilla y rodeó su cuello con ambos brazos, mirando a sus amigos
- Que amoroso – expresó con burla Eunhyuk
- El chiste es que la pasen bien – habló Donghae
- Seguro lo haremos – secundó Jonghyun. Se despidieron por último con la mano y los otros dos se marcharon, Changmin se giró hacia su novio y lo besó en la boca
- Esperemos acá nuestra comida – lo sujetó de la mano y se sentaron en la mesa más cercana a la puerta para poder observar cuando llegara el pedido
- Te veo de muy buen humor hoy – observó relajado, Changmin asintió varias veces, sujetándole la mano izquierda por encima de la mesa
- Anoche me volví un poco loquito, trataré de controlar mis celos
- Eso espero – sonrió en respuesta – Y si es verdad lo que dices, si él intenta algo, le pondré un alto, no dudes de mí por favor. Te amo, eso no va a cambiar
- Lo sé – contestó tranquilo – Confío en ti, es solo que la charla con Minho… dejé que envenenara mi mente, no volverá a pasar
- Está bien – asintió, levantando su mano derecha acarició el rostro contrario – Ya no pensemos en nada negativo hoy, solo seremos tú y yo
- Sí – con entusiasmo agarró la mano de Jonghyun que le acariciaba y la besó, luego se miraron en silencio por algunos segundos.
Rechazó la ayuda de Heechul para volver al pueblo, ya que no quería levantar sospechas sobre sus actividades nocturnas, así que tomó el primer camión con rumbo al sitio donde vivía y llegó alrededor de las diez de la mañana, de la central de autobuses decidió caminar, ya que solo se encontraba a menos de veinte minutos de su casa
El aire fresco lejos de contaminación se sintió bien, además de sus amigos, quizás fue lo que más extrañó. Encontrándose a pocas cuadras de la casa de Donghae comenzó a pensar en él, en que quizás antes de llegar a casa debía pasar a saludarlo, decirle que estaba bien y pedirle perdón por haberlo ignorado de tantas formas
- Tal vez me grite o esté muy molesto – meditó preocupado, conocía el carácter de su amigo, sobre todo cuando cometía imprudencias y este tomaba el papel de su padre, reprendiéndolo. Ya podía oír dentro de su cabeza todo el discurso
Mientras meditaba si debía ir o no, llegó hasta la cuadra donde se ubicaba el Bar, por el cristal vio a dos personas sentadas cerca de la puerta, pero no les distinguió en ese momento, caminó en línea recta, sin acercarse a ese lugar, pero pasó de frente, entonces pudo distinguir claramente a Changmin y Jonghyun, los veía de forma nítida
Se detuvo sin analizar, Donghae y su dilema desaparecieron, en su lugar apareció el recuerdo de aquella noche cuando fue rechazado por Changmin, recordó que no fue él a quien eligió, sino a Jonghyun, ellos seguían juntos y los vio felices, esas sonrisas no se podían fingir, las miradas tampoco, entonces lo entendió, no tenía cabida en la vida amorosa de Changmin. Sonrió discretamente y agachó la mirada unos instantes, al levantarla los otros dos se besaban, con las manos entrelazadas sobre la mesa
- Me encanta verte feliz, aunque no sea conmigo – admitió sin problemas, decidiendo que no quería perder la amistad, al principio fue distante con él debido al rechazo, ahora aceptaba que la decisión que tomó el menor no era la equivocada
Yunho se dio la vuelta y caminó hacia su casa, sin que los otros percibieran su presencia, quizás esa noche iría al Bar, a enfrentarse a sus amigos, a escuchar los seguros regaños que recibiría, o quizás esperaría hasta el lunes, aún tenía todo el día para decidirlo, entró a su hogar mientras aquella imagen continuaba en su cabeza, Changmin y Jonghyun juntos, sin que él fuese apenas una sombra.
Continuará...
Notas de Autor: ¡Hola de nuevo! PERDÓN LA DEMORA, pero no podía dejar de escribir, me salieron 44 páginas pero finalmente llegué al punto que deseaba tocar, espero les haya gustado ^^
¿Qué puedo decir de este capítulo? La verdad es que muchas cosas, hay un par de detalles aquí que son importantes para el futuro de algunos personajes, seguro se dieron cuenta de cuales, no les diré para no echarles a perder el final :D Espero sus comentarios, dudas, teorías, opiniones, etc, todo es bienvenido, aprecio siempre todo lo que me dicen, por cierto sus mensajes del capítulo anterior están respondidos
Nos leemos en el capítulo 34!
PD. Quiero decir que sí, la escena del trío era importante xD quizás no era necesario ser detallada, pero no pude evitarlo jajaja
Estaba ansiosa por leer lo siguiente! Ahora.. Rayos no sé qué decir, Siwon ya sabe de lo ocurrido con Yunho y Changmin ¡AHH Dx!
ResponderEliminarMe relaja que esto no termino mal, estoy orgullosa de Min por enfrentar a Minho y darle un golpe bien merecido!
Ese Yunho anda de caliente pero por lo que leí ya fue lo último o quizá eso creo xDD aún que admito que me gusta verlo así, descubriendo poco a poco su bisexualidad Jaja Ya espero que hable con Donghae sobre eso, no quiero que se entere por alguien más :'( aún que posiblemente así sea xc
El nuevo chico Yonghwa!!! ¿Será ese chico que se mencionó que Jonghyun conocería? No? Dx ya me emocione ahahah~
¡Gracias por actualizar! Me encanto! Espero leerte pronto! lml
Gracias :D me alegra que de nuevo te gustara. Yo también amé escribir la escena donde le rompe la cara a Minho xD jajaja
EliminarSobre Yunho, pues sí, ya es lo último, tiene que poner en paz a eso que tiene en medio de las piernas xDDD. En cuanto a Donghae pues... ¿qué te digo? si, probablemente se entere por alguien más :p
Así es, Yonghwa es de quien hablé antes, aunque sobre si se quedarán juntos, eso si está por verse *modo malvado activado* quizás Jonghyun igual se quede solo, ups!
Gracias a ti por leer y dejarme tu comentario ♥ seguimos leyéndonos
Hola! Gracias por actualizar
ResponderEliminarCon que Yonghwa y Jonghyun, ummm! Me gusta, por alguna razón nunca he podido visualizar a Jonghyun con Changmin.
De los otros no voy a comentar nada, ya me rendí, que pase lo que tenga que pasar, a ver si todos aprenden de sus errores de una vez por todas.
Nos vemos!
XD como son del mismo grupo creo que es fácil imaginarlos juntos :p aunque de eso a que se quede con él aún tengo tiempo para pensarlo jejeje
EliminarJajaja aprenderán, supongo XD
Gracias por dejarme tu comentario, hasta pronto!
¡Hola! Gracias por actualizar!
ResponderEliminarLeí hace días el capitulo, pero sigo sin saber que comentar. Realmente no sé que pasará con YH y CM.
Saludos, nos leemos pronto!
~Andy
Jejeje no te preocupes, igual creo que no eres la única XD
EliminarGracias por dejar tu comentario y seguir la historia :D hasta luego
Te extrañé, pasaban los días y no dabas señales, ya me estaba preocupando jeje.
ResponderEliminarMe alegra que Changmin haya superado su miedo a Minho y con esto todo lo que le afectaba de su pasado. Me pregunto si aún habrá un encuentro con Kyu, sería interesante.
Por otro lado mantengo la esperanza de que Yunho y Min terminen juntos, pero ya no veo cómo sucederá esto, Changmin parece cada vez más feliz de estar con Jonghyun :( A ver qué pasa.
Gracias por la actualización :)
Gracias! Se me complicaron algunos asuntos y tardé más del mes, perdón!!!
EliminarBueno, aun le falta superar lo más importante, la confianza en sí mismo, pero lo hará :D sobre Kyu la respuesta es sí, saldrá de nuevo y se encontrarán ^^
Respecto a lo último la incógnita sigue, de hecho estoy pensando seriamente en escribir dos finales XD pero todo puede pasar :D
Gracias por leer y dejarme tus comentarios ♥