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Capítulo 46. The Way We Were

Condujo sobre el límite de velocidad permitido, con la cabeza llena de ideas confusas, una parte de él trataba de entender y justificar, pero la otra simplemente no podía, imaginaba una y mil cosas, teorías que ninguna terminaba bien. Maldijo el momento en que decidió ver esas fotos y se culpaba a sí mismo por haberse permitido volver a confiar ciegamente en el ser amado, desde la última traición de Boa que no se sentía de aquel modo.

Llegó a casa de su novia, el automóvil de ella estaba estacionado afuera, sin embargo, desde fuera podía ver que dentro de la casa estaba oscuro, como si no hubiese alguien, pero también pensó en la posibilidad de que algo malo pudo haberle pasado. Yunho pensó ideas absurdas, como que cayó por las escaleras y ahora estaba inconsciente, o que quizás mientras se bañaba resbaló y resultó muy herida.

Bajó del automóvil y timbró un par de veces, pero no recibió ningún tipo de respuesta, rodeó la casa y asomó por las ventanas, pero la oscuridad y las cortinas frente a ellas no le permitieron ver nada, así que regresó a la puerta y tocó, esta vez dando un par de golpes en la madera.

- ¡Dana! ¿Estás en casa? – alzó un poco la voz, mientras miraba hacia la ventana del segundo piso, donde sabía que estaba la habitación de la chica.

No obtuvo la respuesta que deseaba, así que sacó su teléfono celular y la llamó, escuchando un sonido dentro de la casa, reconoció el timbre, la última vez que la llamó el teléfono estaba apagado.

- ¿Qué diablos está pasando? – pensó abrumado, nada tenía sentido.

El sonido de un motor acercándose y las luces frontales de un auto haciendo reflejo en la ventana junto a la puerta de entrada, hicieron voltear a Yunho, pero no alcanzó a ver quién estaba dentro, intentó amortiguar la luz sobre su rostro usando la mano, hasta que las luces se apagaron y el motor se detuvo. La iluminación no era buena, así que aguzó la mirada para distinguir.

- ¿Dana?

Las dos puertas delanteras se abrieron al mismo tiempo, del copiloto descendió su novia, mientras que del conductor un hombre joven a quien no conocía. Si el humor de Yunho estaba por los suelos, la escena frente a él no fue de ayuda.

- Yunho – murmuró la chica al ver a su novio ahí, bastante sorprendida.

El compañero de trabajo de ella y Yunho cruzaron miradas, nada amistosas.

- Hola, tú debes ser…

- Su novio – interrumpió al instante

- Iba a decir Yunho, pero sí, su novio – sonrió con sarcasmo, gesto que a Yunho le molestó, sin embargo, trató de controlarse.

- No te esperaba aquí

- Ya lo creo – miró unos segundos de nuevo al chico – Estabas muy bien acompañada – la miró de nuevo, sus ojos apagados no fueron buena señal.

- Yunho, tenemos que hablar, vamos adentro – se acercó a él y lo agarró sutilmente de un brazo, pero él se quitó bruscamente, Dana pudo notar la rigidez y se alejó unos pasos – Nos vemos mañana en el trabajo – dijo al chico a modo de pedirle que se marchara

Al oír aquello Yunho ató cabos, ese hombre seguramente era aquel del que alguna vez le dijo que estaba enamorada, cuando aún solo eran amigos y confidentes.

La mirada dura de Yunho hizo que el otro sintiera desconfianza, por lo que miró a la chica.

- No te dejaré sola – expresó preocupado

- No te preocupes – sonrió para tranquilizarlo – Yunho no es esa clase de persona

Tras eso, un silencio incómodo se suscitó entre los tres, el compañero de Dana se negaba a irse, mientras que Yunho se contuvo las ganas de correrlo él mismo, estaba muy enojado y a la vez confundido, pero no quería causar una pelea.

- Por favor – insistió ella, así que no tuvo más remedio que ceder.

- Llámame si necesitas ayuda – pidió por último, ella solo asintió

El chico regresó a su auto tras despedirse y se marchó tan pronto echó andar el auto. Pasaron unos segundos antes que volvieran a mirarse Yunho y Dana

- Así que él piensa que voy a golpearte ¿Qué le has dicho de mí? – preguntó enojado

- Ay por favor Yunho, hablemos y ya, no le he dicho nada malo de ti – contestó indignada, pasando de lado a su novio abrió la puerta y entró en la casa, encendiendo las luces

- Te llamé toda la maldita tarde y nunca me contestaste, hasta que finalmente lo apagaste ¿Por qué te escondes de mí? ¿Dónde estabas con ese imbécil? – cuestionó intentando no gritar

- No me escondo de ti, bueno… no estaba lista para verte. Y él no es ningún imbécil – aclaró, tratando también de ser paciente

- Respóndeme ¿Dónde estabas?

- Fuimos a cenar y charlamos, estábamos en el restaurante de la carretera, pregunta si quieres – respondió sin rodeos

- ¿Y el resto de la tarde?

- Estuve todo el día con él – confesó, preocupada de que Yunho hiciera más preguntas, pero pudo verlo en su mirada, no estaría satisfecho hasta saberlo todo

- ¿Por qué apagaste tu teléfono?

- No lo apagué, se acabó la batería, lo conecté antes que saliéramos a cenar y seguro se prendió cuando cargó por completo – explicó – Yunho por favor, hablemos de lo importante

- ¿Te acostaste con él?

- ¿Qué? – preguntó con asombro

- Solo responde ¿tuvieron sexo? – inquirió, tratando de no alterarse, pero la sola idea lo ponía furioso, si Dana le fue infiel de aquella manera sin duda sería la cereza del pastel y terminaría explotando

- ¿Crees que haría eso?

- Responde y ya, o creeré que sí – instó, mirándola con frialdad

- No Yunho, nada de eso pasó, no hicimos nada sexual ¿Por qué lo crees? – cuestionó, sintiéndose herida, pero al mismo tiempo entendía el nudo de emociones que debía estar teniendo su novio

Yunho sonrió divertido y negó con la cabeza, acercándose dos pasos a Dana

- No hicimos nada sexual – repitió en tono pausado – Entonces ¿Qué cosas no sexuales sí hicieron? ¿se abrazaron? ¿se besaron?

- Yunho…

- ¿Te crees que soy idiota? – esta vez alzó la voz, retirándose de nuevo – Usando frases redundantes ¿es así como evadirás contarme lo que pasó entre ustedes?

- Es verdad – apretó los dientes unos segundos – Nos besamos – confesó al no tener alternativa

Yunho se alejó otros pasos más, mirándola con decepción, negó un par de veces y le dio la espalda, intentando no reírse por la ironía, pensó en ella cuando vio las fotos de Changmin con Kyuhyun, pensó que no valía la pena luchar por el chico si después de todo aún la tenía a ella, pero en realidad estaba solo.

- Perdóname – suplicó acercándose lentamente hasta él – No te lo mereces – lo abrazó por la cintura al llegar

- ¿Tienes idea de lo difícil que fue tenerlo tan cerca y no poder hacerlo mío? De querer hacer lo correcto antes que seguir mis deseos… ¿lo sabes? – agarró las manos de Dana alrededor de su cintura y las alejó de él, dando media vuelta, la vio a los ojos

- Lo siento tanto… pero Yunho ¿a quién engañábamos? Debimos terminar cuando regresamos de Jeju, o quizás es que esto siempre fue un error, no debimos empezar – habló dolida, sobre todo después de la extensa charla con su compañero de trabajo, aquel noviazgo le hizo perder tiempo valioso y muy seguramente su novio pensaba lo mismo

- Ya no importa, nada, estoy cansado – volvió a sentir que se alteraba

- A ti no te molesta ni te duele que me haya besado con él, dime que te pasa ¿te peleaste con Changmin y te desquitas conmigo?

Aunque no quería admitirlo, era verdad, odiaba que le vieran la cara, pero si Dana se besó o no con ese sujeto le importaba mucho menos que saber que Changmin también se besó con su ex

- Yunho

- ¿Sabes qué? Ahorita no quiero ni verte, luego hablamos – fastidiado de todo, ni siquiera dio tiempo a que ella dijera algo más, salió de la casa lo más deprisa que pudo.

Yunho subió en su auto y observó como Dana salió corriendo tras él, pero no cambió de opinión, se marchó manejando lo más deprisa que pudo. No quería saber nada de nadie, solo supo que necesitaba un buen trago de licor, pero no podía ir a casa de Donghae, no mientras Changmin estuviera ahí, a quien tampoco quería ver.

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Después de haber dado un par de vueltas en la cama, a Changmin le resultó imposible poder dormir, incluso sintió que la cena le cayó mal, todo por culpa del mal trago que su ex le hizo pasar debido a sus amenazas. Salió de su habitación y fue directo al baño, sin cerrar la puerta se acercó al excusado y vomitó lo más que pudo, enjuagándose la boca al instante

- Imbécil Kyuhyun – musitó mirándose al espejo, viéndose un poco amarillo, luego sintió de nuevo náuseas y vomitó otra vez.

Desde su habitación, Jonghyun escuchó lo que le pareció alguien vomitando, desconocía que Donghae se fue con Siwon, así que pensó que podría ser él, aunque también estaba Changmin en casa. De cualquier modo, salió enseguida de su alcoba, la puerta del baño abierta y la luz encendida, pudo ver una silueta, caminó deprisa y se asomó, mirando a su ex lavándose afanosamente los dientes, mientras con su mano izquierda se tocaba el vientre, sintiéndose mal

- ¿Estás bien? – preguntó preocupado. El aludido se giró un poco hacia él y negó en silencio, terminando de enjuagarse

- Me acostaré – habló al fin, apagando la luz se abrió paso, Jonghyun lo sostuvo del brazo cuando lo vio tambalearse – Puedo solo

- Deja que te ayude – objetó, sin recibir una negativa.

Llegaron a la habitación del mayor, éste se tumbó en la cama, cerrando los ojos y cubriéndose parte de la cara con un brazo, instantes después sintió la mano de Jonghyun sobre su frente, solo unos instantes, entonces lo miró, este observaba preocupado

- Tu temperatura parece normal, no creo que sea infección – comentó como si fuese experto en el tema – ¿Qué comiste?

- Créeme, no sé si vomité comida o mi hígado – respondió en broma, Jonghyun no entendió, pero Changmin no quiso explicarle lo enojado que se puso cuando su ex lo amenazó

- Será mejor que vayamos con el doctor – sugirió con premura, mirando el mal estado en que estaba Changmin, pero este negó

- Ya me siento mejor – sonrió un poco, pero no fue convincente

- Está bien – concedió – Dejaré abierta la puerta de mi habitación, si se te ofrece algo, solo llámame

A sus palabras Changmin asintió, Jonghyun lo observó unos instantes en silencio, luego dio media vuelta y caminó hacia la puerta, antes de salir escuchó a su ex llorar, así que se giró hacia él, preocupado de que le doliese algo

- Perdóname – pidió el más alto, tratando de dejar de llorar, a Jonghyun se le hizo un nudo en la garganta, pero se quedó ahí

- ¿Por qué? – cuestionó confundido

- Por todo – dijo mientras intentaba al menos sentarse – Por joder nuestra amistad, por dejar que te ilusionaras, por destruir tus sueños

- Changmin yo…

- No sé cómo pagarte, tu amor y tu bondad… No te merezco, nunca te merecí – cubrió su rostro con ambas manos, el dolor en su estómago dejó de priorizarse en sus emociones de ese instante

Jonghyun lo miró tan vulnerable unos segundos, luego se acercó a él y se sentó en la cama, cerca, estiró su mano y le acarició el cabello, consolándolo

- Ya no llores – pidió conmovido, ni siquiera sabía qué decir

- Perdóname por ser un error en tu vida

- No digas eso – contradijo serio – No eres un error, un hermoso accidente quizás – bromeó un poco, Changmin no dejó de llorar, pero quiso reír un instante – Tienes que descansar – sutilmente lo empujó hacia abajo para que se acostara, él permaneció donde mismo, sentado

- Sé que nunca… seremos amigos de nuevo – habló mientras se limpiaba las lágrimas – Pero no quiero que te vayas sin que podamos darnos un abrazo de despedida, al menos, no nos despidamos como dos extraños – suplicó angustiado, faltaba menos de una semana para que su ex amigo se marchara

- Te lo prometo – consintió, acariciándole la cabeza una última vez antes de levantarse de la cama

Changmin sonrió, conmovido de la amabilidad de Jonghyun, luego cerró los ojos, sintiéndose agotado, el haber vomitado y después el llanto lo dejaron sin energías, no tardó en quedarse dormido, el menor lo miró unos momentos más, hasta que sus ojos se enrojecieron un poco, pero no lloró, solo aspiró profundo y luego salió de ahí, yendo hacia su propia habitación.

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Finalmente llegaron a un destino, un poblado que Donghae no distinguió, a las afueras del mismo, una cabaña de estilo rústico donde el auto se estacionó, bajaron del coche y el barman miró con asombro, aunque no era demasiado grande, se notaba que al igual que todo lo que tenía la familia Choi, no era en absoluto modesto.

- Gracias, puedes venir mañana por nosotros, después de las cuatro de la tarde – pidió a su chófer luego que este sacara una pequeña maleta de la cajuela y se la entregara

- Como indique señor – respondió serio

- Encuentra un Hotel y hospédate, es tarde para regresar al pueblo, los gastos que hagas te los reembolsaré – indicó con amabilidad, dejando a su empleado sorprendido, sonrió al instante

- Gracias señor – expresó con una leve reverencia y se alejó, marchándose enseguida del sitio, quedando los dos solos

Donghae continuaba mirando con asombro la cabaña, era muy bonita. Instantes después sintió a Siwon por detrás muy cerca de él y se sobresaltó

- Te gustará más por dentro – dijo con voz suave, sujetándolo después de la mano y llevándolo al interior.

Al encender las luces el barman confirmó que efectivamente por dentro era mejor, no solo era elegante, sino que además acogedor, con chimenea y demás, Donghae solo las había visto en televisión, lanzó un suspiro de asombro, olvidándose de su mal humor

- ¿Te gusta? – preguntó aun sabiendo la respuesta, Donghae se giró hacia él

- ¿Tratas de impresionarme? Ya me acosté contigo de cualquier forma – bromeó, aunque asombrado y un poco confundido, no sabiendo por qué estaban ahí

- Ven – sin responder a sus palabras lo sujetó de nuevo de la mano y lo llevó hacia el segundo piso

Solo había una habitación, pero era muy amplia, dentro tenía un baño también amplio, con jacuzzi. Los acabados de cada pieza eran únicos y todo en su conjunto era hermoso, pero Donghae se sintió fuera de lugar, así que borró su sonrisa

- ¿Por qué me has traído? – preguntó con seriedad

- Quita esa cara – sonrió tranquilo y se acercó, mirándolo a los ojos – No voy a proponerte matrimonio, no te ilusiones

- Tonto – respondió dándole un pequeño empujón – Mejor dime ¿Por qué no fuiste al Bar en días? – cuestionó desviando la mirada

Siwon no respondió, solo acortó la distancia y lo sujetó por los brazos, besándolo, Donghae percibió algo extraño en la acción y lo confirmó cuando correspondió el beso, muy distinto a cualquiera que se hubiesen dado antes. Al separarse buscó la mirada de su amigo, pero este solo le dio la espalda

- Iré por algo de vino, ponte cómodo – dijo mientras se marchaba

- Algo le pasa – musitó preocupado, no es como si lo conociese demasiado, pero podía intuirlo.

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Después de algunas copas y de mucho pensar en toda su situación, Yunho decidió que era momento de marcharse, aunque no salió del pueblo, pero aquel sitio era de los más alejados del centro, prácticamente no encontró ningún conocido, lo cual le vino bien. Pidió la cuenta y mientras la esperaba, una chica se acercó a su mesa, abordándolo

- Hola – saludó alegre, pero Yunho apenas si la vio – Te ves tan solo ¿tu chica te dejó? – cuestionó en un intento por sonar linda, esta vez él volteó y la observó fijamente, era muy bonita

- ¿Acaso vas a consolarme? – preguntó en respuesta, ella sonrió contenta y asintió, acercándose más estiró su mano y le acarició la pierna, pero Yunho volvió a ignorarla, girando su cabeza de nuevo al frente

- Si tú quieres…

- Mi chica no me dejó, pero mi chico sí – respondió a la pregunta inicial, ella enseguida se apartó, mirándolo con indignación

- Tú no eres Gay, mientes – refutó molesta y con el orgullo herido

- No hay nada aquí para ti, vete – rechazó en tono poco amable, pero no hizo falta decir más

- Idiota – insultó antes de darle la espalda y marcharse

Yunho suspiró, recordándose en otras épocas, sin duda la habría llevado a la cama, sin preguntarle siquiera su nombre u olvidándolo si acaso lo escuchaba. El mesero le llevó su cuenta y pagó el importe exacto, saliendo enseguida del sitio, tambaleándose un poco, pues al estar sentado tanto tiempo no sintió el efecto del alcohol consumido

Subió a su auto, pero no se atrevió a encenderlo, sabía que no podía conducir así, por lo que sacó su teléfono celular y llamó a Donghae, pero éste no atendió su llamado, así que llamó directo a la casa, pero el aparato sonó y sonó durante un tiempo, sin resultado

- Dormiré aquí – cerró los ojos y cruzó los brazos, pero unos golpes en la ventana lo hicieron reaccionar, afuera estaba un tipo que no conocía, aun así bajó el cristal

- No puede quedarse ahí, nos multarán – dijo el hombre, Yunho supuso trabajaba en ese bar

- Espera – sacó de nuevo el móvil e hizo un último intento.

Debido a que durmió con la puerta abierta, Jonghyun logró escuchar un sonido que le pareció era de teléfono, no solía sonar, nadie llamaba usualmente, por lo que supuso sería importante, así que talló sus ojos, miró la hora y bufó, eran casi las dos de la mañana. Salió de su habitación y fue hasta la de Donghae, ahí estaba el aparato, aunque le pareció extraño no verlo ahí durmiendo, no pensó mucho en ese asunto y respondió

- Diga – habló somnoliento

- Donghae, ven por mí – pidió casi ordenándolo, ni siquiera distinguió que no era su amigo

- ¿Quién habla? – inquirió confundido, la voz le resultó muy parecida a la de Yunho, pero no estaba seguro de eso

- Yunho ¿Quién más? – contestó como si fuese lo más obvio del mundo

A Jonghyun le pareció que sonaba ebrio y no le pareció descabellado

- No soy Donghae – explicó molesto, rascándose la cabeza, ni siquiera tenía auto

- ¿Eunhyuk? – preguntó extrañado – No, Jonghyun ¿verdad? – se corrigió sin esperar respuesta

- ¿Dónde estás? Iré por ti – dijo resignado

- Te mando localización, no sé cómo diablos se llama este sitio – miró hacia la fachada, pero vio un poco borroso y dejó de insistir – Estoy dentro de mi auto

- Espérame ahí – habló frustrado, colgando enseguida – Maldita sea Yunho, debería dejar que te las arreglaras solo – pensó por un segundo, pero no podía simplemente dejarlo ahí o permitir que condujera en ese estado

No tenía muchas opciones, así que definitivamente debió también pedir ayuda, por lo que regresó a su habitación y cogiendo el celular llamó a Yonghwa, este tardó un poco en atender, mientras se despertaba. Luego que Jonghyun le explicara la situación, indicó que lo esperara afuera del bar, aunque la idea lo molestaba un poco

- Ni hablar – pensó Jonghyun cuando se disponía a marcharse, mirando hacia la habitación de Changmin – Espero no se despierte mientras no estoy – preocupado por su ex se marchó

Afuera solo esperó unos segundos a su amigo, por fortuna no era una noche fría. Subió al auto y juntos fueron por Yunho, pese a que ninguno de los dos realmente quería ir

- Eres demasiado condescendiente ¿lo sabías? – cuestionó Yonghwa, no obtuvo respuesta – Te quita al hombre que amas y vas en su auxilio

- Él no me quitó nada, Changmin simplemente lo eligió a él – respondió con seriedad – Además no puedo negarle la ayuda a alguien que me la pide – explicó sincero, pero su amigo no pensaba igual.

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Después de haber estado juntos una vez en la habitación, Siwon y Donghae se metieron al jacuzzi, llevando hacia allá el vino y dos copas, la botella consumida hasta la mitad. Siwon se aseguró que el ambiente fuese relajante, con la luz tenue y algunas velas alrededor, pero al barman la situación simplemente le parecía inusual, el comportamiento de su anfitrión también

- Estás muy callado – observó Siwon, mientras echaba sobre Donghae un poco de agua con su mano, en el hombro, luego le dio un beso sobre éste

- No estoy acostumbrado a estas cosas – admitió, girando un poco la cabeza hacia atrás, recibiendo de Siwon un beso en la mejilla – Además estás raro hoy – completó, volviendo la vista al frente

- ¿Por qué raro?

- No sé – encogió los hombros – ¿Romántico? – meditó un poco, en voz alta – Hace rato en la cama fuiste tierno, eso no es normal en ti

- ¿Te gusta que sea rudo? – preguntó en tono burlón, esta vez no dando un beso, si no una ligera mordida sobre el hombro de Donghae

- Oye – reprendió, echando agua hacia atrás con la intención de darle en la cara, sin lograrlo

- ¿Quién te entiende? – se quejó al instante de esquivar el ataque, luego lo abrazó con fuerza, depositándole un beso en el cuello, acariciando después el lóbulo de la oreja con sus labios

- Siwon… – susurró entrecerrando los ojos, sintiendo las manos contrarias acariciándole el pecho

- De verdad me gustas mucho – susurró cerca de su oído – Quería regalarte una hermosa noche, es todo – confesó, continuando los besos por su cuello, sin dejar de acariciar su piel

Donghae no aguantó más y se giró en su eje, abrazándose a Siwon por el cuello, se dieron un beso profundo, mientras el agua no dejaba de agitarse levemente, se besaron hasta saciar todas sus ansias, luego se miraron a los ojos

- Gracias – respondió el barman sinceramente – Odio admitirlo, pero estos días contigo me han ayudado mucho a no atormentarme – desvió un poco la mirada – Cuando dejaste de ir al bar sin decir una palabra yo… de verdad te extrañé – expresó, completamente avergonzado, Siwon sonrió

- Lo sé – acarició su rostro y lo hizo verlo de nuevo

- Dime ¿Por qué no ibas? ¿dónde estuviste? – preguntó tranquilo, pero en tono de reproche

Siwon no respondió, se limitó a sonreír, sujetando el rostro del barman lo besó en los labios. Donghae no insistió, sabía que algo más estaba detrás y temía que el grado de intimidad que se había formado entre los dos fuese irreversible, en poco tiempo, aunque no quisiera admitirlo, sus sentimientos por Siwon lo estaban confundiendo.

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Cuando Jonghyun y Yonghwa llegaron al sitio indicado por Yunho, éste dormía profundamente dentro de su automóvil, pese a los inútiles intentos por parte del trabajador del Bar, quien dejó de insistir luego de que le fue imposible despertarlo. El par de amigos miró el desastre que era Yunho, aunque ninguno lo conocía de manera íntima, no fue difícil notar que no era él mismo, lucía acabado

- Despierta – llamó Jonghyun, sacudiendo a Yunho por el hombro – Anda – sacudió un poco más fuerte, hasta que el aludido comenzó a reaccionar

- ¿Qué pasa? – cuestionó adormilado, intentando abrir los ojos, pero la luz de la lámpara de la calle le lastimó los ojos – ¿Jonghyun?

- Sí, vine por ti como me pediste

- Gracias – sonrió cansado, cerrando los ojos, pero Jonghyun lo sacudió de nuevo – Perdón – como pudo abrió la portezuela del auto y salió, tambaleándose, pero el par de amigos lo ayudó a no caer

- Conduce su auto, yo me regreso solo al Hotel, no te preocupes – indicó Yonghwa a su amigo, este asintió, luego le sonrió

- Muchas gracias

- Ve con cuidado – Jonghyun volvió a responder con un movimiento de cabeza, luego Yonghwa se retiró hacia su vehículo, así él ordenó a Yunho sentarse en el asiento del copiloto, éste obedeció sin respingar un poco

Echó andar el auto, conduciendo muy lentamente, su incómodo acompañante no volvió a dormirse, pero parecía estar pensando, aunque igual podía ser que no pensara en nada y solo estuviese en una especie de trance, la verdad es que a Jonghyun no le importaba mucho

- Era muy linda… – dijo de pronto Yunho, sin una conversación previa, así que el otro no supo de qué estaba hablando, tampoco preguntó – La chica del Bar – explicó sin que se lo pidieran, Jonghyun lo miró de soslayo un instante, sin perder atención al frente

- ¿Volviste a las andadas? – preguntó, preocupado de que aquello afectara a Changmin

La risa poco discreta de Yunho lo confundió, sin embargo, esperó paciente una respuesta

- No – respondió en un tono casi triste – Yo solo quiero estar con él – dijo con tristeza

- Entonces deja a Dana – comentó de forma directa, sin rodeos, esta vez Yunho no rio, pero bufó con molestia

- Creo que ella ya me dejó a mí – confesó en un tono que Jonghyun no supo descifrar, incluso podría decir que sonaba aliviado

- No te entiendo Yunho ¿por qué diablos no estás con Changmin? – reclamó, sintiéndose molesto, pero también se sintió tonto, él ya no debía meterse, lo sabía, pero se desesperaba sin siquiera proponérselo, deseaba verlo feliz

- Él no quiere estar conmigo – afirmó, de nuevo en tono triste – Se besuquea con su ex, después de lo que le hizo – comentó esta vez, volviendo a sentirse molesto, como lo estuvo horas atrás

- ¿Qué dices? – inquirió perplejo, si aún conocía bien a Changmin, estaba seguro que eso era imposible, pero por un momento lo dudó, después de todo su ex amigo cambió mucho en las últimas semanas

- Yo los vi – aseguró convencido – Estaban besándose – reconfirmó ante Jonghyun, pero éste continuaba incrédulo – ¿Por qué es así? – cuestionó para sí, pero en voz muy alta

- Lo más sano es que hables con él – aconsejó tranquilamente, tratando de no entrometerse

Sin hablar más del tema, llegaron hasta la casa de Yunho, Jonghyun se estacionó donde el auto se encontraba siempre, miró al lado y vio a su acompañante completamente dormido, suspiró con pesadez, salió del auto y bordeó hasta el asiento del copiloto, abriendo la puerta

- Sal, anda – instó de mala gana, jalándolo del brazo, Yunho despertó asustado

- ¿Dónde estoy? – preguntó confundido

- En tu casa – respondió enojado, jalando más fuerte hasta que el otro salió del auto, chocando contra él, agarrándose a sus brazos, Yunho levantó el rostro y lo miró muy de cerca

- No me di cuenta antes – habló mientras lo observaba – Eres guapo – aseveró con seriedad

- No digas tonterías – reprendió avergonzado, empujándolo hacia el pórtico, Yunho casi cae al suelo, pero lejos de enojarse comenzó a reír – Entra ya – ordenó, sintiendo las orejas calientes

- Changmin me rechazó tres veces – comentó, tratando de incorporarse – Le pedí que fuera mi novio, pero él te eligió a ti – confesó poniéndose completamente de pie

- ¿Qué dices? – cuestionó confundido, acercándose un poco más – ¿Qué dijiste?

- Cuando lo saqué del Bar aquella noche – aclaró, sintiendo de nuevo el dolor del rechazo de aquella vez – Fuimos al río, se lo pedí, pero no quiso estar conmigo

Jonghyun se sorprendió sobremanera, jamás se imaginó que Changmin en algún momento de su vida lo eligió sobre Yunho, aunque sabía que estuvo con él por temor a perderlo después de la aparición de Minho, el mismo Changmin se lo dijo, pero aquello lo omitió, una parte de su ego se restauró, aunque ya no tenía importancia

- Ve a dormir Yunho – pidió esta vez con amabilidad, no esperó siquiera a que entrara, solo dejó las llaves sobre el cofre del auto y le dio la espalda, marchándose a casa.

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Al día siguiente muy temprano, Changmin despertó tras haber pasado una terrible noche, en la madrugada se despertó con dolor al menos un par de veces después de la ayuda de Jonghyun, pero no volvió a vomitar, tampoco le pidió auxilio, lo dejó dormir tranquilamente. Ahora se sentía mucho mejor, pero con mucha hambre

Miró la hora en su teléfono móvil y corroboró que era demasiado temprano, comparándolo con el tiempo en que solía despertar diario. Al salir de su habitación vio la puerta abierta de la alcoba de enfrente, lo cual no era extraño

- Supongo estará abajo – musitó, luego se dirigió hacia la planta baja, como lo supuso, el otro chico se encontraba ahí, pero se sorprendió de verlo preparando el desayuno – Donghae no durmió acá, supongo – pensó – Buenos días

- Hola, buenos días – respondió Jonghyun – ¿Cómo te sientes? – cuestionó sin mirarlo, mientras cortaba en trozos un par de manzanas

- Bien, muchas gracias por preocuparte – dijo avergonzado

Jonghyun no respondió, simplemente se giró hacia él un momento y le sonrió, después volvió a lo suyo, Changmin se dio cuenta que cortaba la fruta para los dos

- Te ayudo – ofreció con amabilidad

- Preparé té de manzanilla, toma un poco antes de comer algo, te sentará bien – sugirió sin dejar que le ayudase

- No tienes que hacer nada por mí, de verdad – explicó completamente apenado

- Lo sé, será la última vez, porque estabas enfermo – contestó tranquilo – Ve al comedor – indicó sin mirarlo, pero Changmin no dejaba de observarlo, sintiéndose triste, recordando todo lo que le dijo a su ex la noche anterior.

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Los rayos del sol entraron en la habitación directamente en dirección hacia la cama, cayendo exactamente sobre su rostro, por lo que comenzó a despertar poco a poco, intentando con dificultad abrir los ojos, lográndolo después de varios intentos. Donghae se movió un poco y miró dormido a Siwon justo a su lado, sonrió mientras estiraba los músculos, luego se giró un poco hasta recostarse sobre su costado, mirándolo fijamente

- ¿Quién lo hubiera imaginado? Tú y yo… – pensó mientras admiraba el rostro tranquilo

Tras unos segundos de observarlo se movió un poco, estiró su mano y agarró la sábana sobre el cuerpo del otro, la levantó y miró hacia dentro, prestando atención en su desnudez, sonrió traviesamente y quitó por completo la tela de un movimiento, el otro continuó durmiendo tranquilo, así que Donghae aprovechó para comenzar a acariciarlo, iniciando por el pecho, rozando apenas sus pezones, lo vio haciendo un gesto

- Buenos días – susurró en su oído, luego besó tras la oreja, levantándose se encimó sobre su cuerpo, sin apoyar el suyo en el otro

Siwon se removió un poco, sin despertar, mientras Donghae continuó besando, dejando un sutil rastro de saliva con su lengua, descendiendo lento hasta el abdomen, posicionándose ahí entre las piernas de Siwon, pasando sus brazos por debajo las sujetó y comenzó a besarle el miembro, tan dormido como lo estaba él

Esta vez su amante lanzó un quejido, mientras sus párpados temblaron un poco en un intento por abrir los ojos, sin estar del todo despierto, contrario a su miembro, que empezaba a reaccionar ante las acciones del barman. El cuerpo de Siwon se estremeció antes de reaccionar, al abrir los ojos tardó unos segundos en entender qué estaba pasando, pero un agradable cosquilleo en la parte inferior de su cuerpo lo hizo despertar por completo

Sonrió al ver a Donghae entre sus piernas, lamiendo y besando su despierto miembro, bajó la mano derecha y acarició los ya revueltos cabellos, logrando que el otro voltease a verlo, se sonrieron

- Hola – saludó con voz adormilada, el otro no respondió, volvió a agachar la cabeza y esta vez introdujo el miembro a su boca, Siwon se relamió los labios y cerró los ojos

Se detuvo cuando algunas gotas seminales comenzaron a salir, tras dar un par de lengüetazos para limpiarlas se incorporó hasta la altura del otro, buscando los labios de Siwon

- Hola – respondió al fin el saludo tras el beso

- ¿Fue todo? – preguntó en broma

- ¿Querías más? – respondió con otra pregunta, a lo que Siwon asintió

Donghae no rebatió en absoluto, se irguió un poco solo para acomodarse sobre la cadera contraria, agarró el miembro erecto y lo llevó hacia su entrada

- Espera – detuvo Siwon antes que se introdujera, el barman obedeció y lo vio estirar la mano hacia el buró junto a la cama, sobre el cual dejó algunos condones, agarró uno y se lo dio, pero Donghae solo lo miró

- Póntelo tú – dijo avergonzado al notar la intención, para el otro no fue difícil entender que no sabía colocarlos – No te burles – pidió al ver la sonrisa de Siwon, pese a que no comentó nada

Luego de que se colocara el preservativo, Donghae continuó, una vez que lo tuvo dentro esperó unos segundos, luego estiró las manos hacia atrás y se sujetó de las rodillas, comenzando a moverse lentamente, mientras se acostumbraba a la invasión. Después de eso se incorporó para poder hacer movimientos más rápidos y duros, estirando esta vez las manos hacia el frente, agarrándose de la cabecera de la cama, cerrando con fuerza los ojos

Aunque sus amigos solían hacer bromas sobre la intensidad de sus gemidos, para Siwon aquello no importaba, le gustaba ver el rostro de Donghae, entregado a la pasión, y esos gemidos que le indicaban cuanto lo disfrutaba. Sonrió con un dejo de nostalgia antes de agarrarse a la cadera contraria, ayudando en el ritmo de los movimientos, mientras miraba atento su cara, estudiando todos sus gestos, grabándoselos en la memoria

- Donghae… – llamó en medio del éxtasis, el aludido se agachó y besó los labios que le hablaban, bajando en ese instante el ritmo, recuperándolo cuando se irguió de nuevo, buscando conseguir el clímax

Siwon sujetó con fuerza la cadera contraria, hundiendo sus dedos por completo en la carne, mientras llegaba al final. En el instante que los demás sentidos se pierden, se corrió dentro del condón tras exhalar el último gemido, acompañado de los agitados jadeos de Donghae, cuyos movimientos se hicieron cada vez más lentos, hasta detenerse por completo, luego se empujó en un último movimiento, levantándose después, el miembro invasor lo abandonó

- Vaya forma de despertarme – exclamó Siwon satisfecho, quitándose el preservativo lo tiró en un bote de basura junto a la cama

Donghae se acurrucó en su pecho, exhausto y con más hambre de la que tenía cuando despertó, hubo unos momentos de silencio

- Te enseñaré a poner un condón – habló de pronto Siwon, logrando que Donghae se sonrojara

- Eunhyuk y yo nunca usamos, ni una sola vez – confesó apenado

- Lo supuse, pero debes cuidarte – regañó en tono amable, acariciándole la espalda – No sabes con quién estarás en el futuro

- Tienes razón, pero ahora no quiero pensar en eso, dudo que vuelva a estar con alguien

- No digas eso, encontrarás a una persona, o varias, no hables como un viejo, no tienes ni siquiera treinta años – observó a punto de reír, Donghae se incorporó un poco y lo miró a los ojos

- Siwon ¿qué somos? ¿amantes? ¿amigos con una relación libre? – preguntó serio, desde la noche anterior no podía sacar esa duda de su mente

- Amigos que la pasan bien y tienen buen sexo – respondió sin siquiera pensarlo mucho

- Amigos… – repitió por lo bajo – Amigos – volvió a decirlo, esta vez con voz normal, sonrió y se abrazó a la cintura de Siwon, aunque de momento se sintió un poco contrariado, no quiso pensar mucho en el asunto, solo cerró los ojos y apretó el abrazo, comenzando a sentirse relajado, hasta quedarse completamente dormido

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Hacía bastante tiempo que Yunho no despertaba con una resaca que lo hiciera sentirse que deseaba mejor la muerte, apenas abrió los ojos el dolor de cabeza se incrementó al triple, un sonido distante le atravesó de oído a oído, o esa sensación le dio, así que se agarró fuerte la cabeza con ambas manos, por si fuese poco un malestar estomacal lo aquejó, pero fue incapaz de moverse siquiera

Un torbellino de recuerdos acudió a él, y por si el dolor físico no era suficiente, el daño moral que sintió en ese momento fue mil veces peor. Su chica lo engañó con otro, el hombre que amaba se besó con su ex, él rechazó a una bella mujer en un Bar y acudió a su rival de amores para poder llegar a casa, nunca en toda su vida se sintió tan patético como en aquel momento

- Me iré lejos, de todo, de todos, estoy harto – renegó infantilmente, abrazándose a la almohada cerró los ojos – Huir no sirve de nada, el pasado vuelve, siempre – analizó en voz alta – Por eso Changmin volverá con Kyuhyun a Seúl, serán felices por la eternidad – concluyó trágicamente

Desmoralizado por completo salió de la cama, necesitaba un baño de agua fría urgentemente, no quería dejar las cosas inconclusas, hablaría con Dana por la tarde, cuando hubiese salido del trabajo, con la mente más tranquila, no deseaba que las cosas entre ambos se volvieran imposibles, después de todo antes que cualquier cosa, ella era su amiga

Sin embargo, con Changmin no se sentía preparado para hablar, no tenía idea de cómo reaccionaría al verlo de frente, pedirle una explicación a las fotos que le fueron enviadas

- ¿Quién diablos las envió? – analizó por primera vez, la noche anterior estuvo tan concentrado en su indignación que no pensó en aquello – Kyuhyun, no pudo ser otro, entonces ¿Changmin le dio mi número? – intentó explicarse a sí mismo lo que sucedió, pero aquello sonaba tan terrible que le resultaba imposible, Changmin no sería capaz ¿oh sí?

Totalmente confundido decidió dejar de pensar en ello, así que fue directo hacia el baño, quitándose la ropa al entrar, sin cerrar la puerta se metió bajo el agua de la regadera, necesitaba aclarar su mente, mientras el dolor de cabeza comenzaba a mitigar lento.

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Luego de comer el desayuno que tan amablemente Jonghyun preparó para él, Changmin volvió a su habitación, pues su ex no le permitió ayudar con la limpieza. Recuperado por completo se tiró sobre la cama, pensó en Yunho, recordando que éste le dijo que terminaría con Dana, por lo que se preguntó si aquello ya sucedió, así que estuvo tentado a llamarlo, agarró su teléfono móvil que se encontraba sobre el buró y lo desbloqueó

- ¿Estará despierto? – se preguntó mirando la hora, eran casi las once, ni siquiera supo en qué momento se hizo tan tarde – Seguro lo está

No dudó más y llamó, mientras su sonrisa se ensanchaba, esperó con ilusión que el otro respondiera, pero ese momento no llegó, solo sonó y sonó, sin respuesta

- No puedo creer que siga dormido – bufó indignado – Debería ir a buscarlo – pensó por un momento – No, pareceré muy desesperado – concluyó nervioso, pero sus ganas de ver a Yunho eran demasiadas, contaba los segundos para estar junto a él por fin, como éste le prometió.

Mientras secaba su cabello miró detenidamente el teléfono sobre su cama, con el nombre de Changmin en la pantalla, pero no quiso responder, un nudo en la boca del estómago lo tuvo parado ahí, sin saber qué hacer, una parte de él deseó contestar, la otra se contuvo, sabiendo que no lo haría de buena gana

- ¿A qué estás jugando conmigo? – susurró con tristeza, hacía mucho tiempo que no se sentía tan confundido.

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Después de una comida improvisada preparada por Donghae con lo poco que hubo en la nevera, Siwon le indicó que salieran a caminar antes que el chófer llegara por ellos. En las inmediaciones de la cabaña se encontraba un pequeño lago y hacia allá se dirigieron

- Tu ropa me queda un poco grande – dijo molesto el barman, después que tropezó por segunda vez – Regresando me pondré lo que traía anoche – indicó indignado

El aludido no respondió, se detuvo cerca de un conjunto de piedras grandes y se sentó en una de ellas, Donghae lo imitó, sentándose a su lado, en otra piedra

- Solía venir con mis padres cada verano cuando era un niño – comenzó hablar mientras miraba el agua moverse ligeramente debido al viento, luego se agachó y juntó un par de piedritas

- ¿Es esta otra historia de un niño abandonado afectivamente? – cuestionó en un tono de ligera broma, aunque sabía que era cierto, en alguna medida

- Mis padres nunca me desatendieron si es que tenías esa idea – aclaró un poco – Pero sin duda después del divorcio nada fue lo mismo, irme al extranjero fue idea mía – explicó, usando luego una de las piedras para tirarla a la laguna, pero no logró hacer que rebotara sobre la superficie

- ¿Te sientes solo? ¿Nostálgico? ¿Por qué me cuentas eso? – inquirió, no porque le aburriera que Siwon platicara de sus cosas, pero le resultaba extraño

- Estos días he pensado mucho sobre mi vida, lo que he hecho y lo que quiero hacer, pensé mucho en Heechul – confesó, girándose un poco hacia el barman, éste lo miró atento – También en ti

- ¿Lo buscarás? – preguntó con un poco de tristeza, pero Siwon negó

- Lo extraño demasiado – admitió sin problemas – Su existencia fue para mí muy valiosa, pero no puedo seguir atándolo a mí

- ¿Entonces?

- Debo confesar que en el pasado creí haberme enamorado de ti – suspiró un poco, estiró su mano y le acarició la mejilla un instante – Incluso estar a tu lado me llevó a preguntarme si esta vez sería diferente, pero no fue así

Aunque para Donghae era un alivio oír eso, debía admitir que una parte de él se sintió dolida por ello, sin embargo sonrió

- ¿Será que Choi Siwon no sabe amar?

- Es probable – esta vez sonrió él, pero Donghae notó algo distinto

Siwon se levantó de la roca y aventó una por una las piedras que aún tenía en las manos

- Me iré del pueblo – informó sin más, con una voz tan neutra que a Donghae le dio escalofríos

El barman no supo cómo reaccionar, la noticia no la esperó en absoluto, pero ahora tenía un poco de sentido el por qué lo llevó ahí, por qué le contaba cosas tan íntimas, aquello era una despedida

- ¿Qué dices? – cuestionó como si no le hubiese escuchado, de pronto sintió que le temblaban las piernas, no entendía lo que estaba pasando ni por qué le afectaba tanto

- Antes me preguntaste dónde estuve los días que no fui al Bar… estuve en Seúl – se giró hacia Donghae y sonrió con resignación – Mi padre me ha legado oficialmente la dirección del conglomerado, me iré a vivir a Seúl

- Pero…

- Dentro de una semana me reuniré con mi madre y su amiga, conoceré a su hija, posiblemente nos arreglen un matrimonio – informó de nuevo con una voz neutra, como si leyese por primera vez un libreto, para Donghae aquello sonaba demasiado absurdo para creerlo

- Estás bromeando ¿cierto? ¿Desde cuándo eres fanático de las telenovelas? – inquirió abrumado, levantándose de la piedra y avanzando hacia él, Siwon rio un poco por primera vez en mucho rato

- Soy hijo único de una familia adinerada, resulta más normal de lo que crees, es lógico que necesite alguien a quien heredar también en un futuro – explicó, sintiendo un poco de dolor, odiaba que aquello fuera real

- ¿Y lo que tú quieres? ¿No importa? – preguntó molesto – Podrías renunciar a tu fortuna si quisieras

- No es tan fácil como crees – respondió, avanzando un paso hacia él le sujetó el rostro por ambas mejillas – Además, es la vida a la que estoy acostumbrado y siempre supe que tarde o temprano este momento llegaría, por eso no me importó ser un libertino durante tantos años – confesó con descaro, luego soltó al barman

- ¿Por eso me trajiste? ¿Para “pasarla bien” por última vez? – reclamó indignado, cruzándose de brazos sin dejar de mirarlo acusadoramente

- Es más que eso, porque me importas, y porque estos últimos días han sido de los mejores que he tenido, contigo, quería agradecerte de alguna forma, perdóname si te ofendí – explicó cabizbajo – Regresemos

Un poco decepcionado pasó por un lado de Donghae, rozando ligeramente su hombro, el barman se quedó quieto un instante, sintiéndose culpable, luego se giró en su eje y caminó hacia Siwon, deteniéndolo al abrazarlo por la espalda, rodeándole la cintura

- Gracias por todo – dijo en voz baja, pero lo suficientemente audible – Hiciste mi tristeza menos dolorosa, no tengo nada que reclamarte, perdón – expresó sincero, su interlocutor sonrió, agarró las manos del barman y las separó de él, girándose

Siwon lo besó en los labios y asintió

- Entonces, despidámonos como es debido – propuso, Donghae enseguida asintió

Se agarraron de la mano y regresaron a la cabaña, aún quedaba un poco más de una hora para que el chófer llegara por ellos, lo que les daría tiempo para una última vez, dando paso a una despedida de aquel affaire de soledad que compartieron durante las últimas semanas.

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A pesar que por la mañana no desayunó prácticamente más que un vaso de leche, no sintió hambre en absoluto, la situación lo tuvo más estresado de lo que habría imaginado. Para sorpresa de Yunho, recibió un mensaje de Dana, indicándole que salió temprano del trabajo y que se dirigía hacia su casa para hablar con él

- Calma Yunho, no pierdas los estribos – se dijo a sí mismo, aunque ya se había mentalizado en que hablaría con ella, no imaginaba que fuese tan pronto.

Mientras esperaba a la chica, se paseó nervioso de la habitación a la sala, de ésta hacia el comedor, hasta que finalmente se sentó en el sillón, a esperar los últimos minutos. Llamaron a la puerta y no fue sorpresa que se trataría de ella, aun así, Yunho inhaló y exhaló aire, armándose de valor abrió la puerta, al verla recordó toda la charla de la noche anterior y frunció el entrecejo

- Pasa – indicó en la mejor forma que pudo

Dana entró en la pequeña casa, sintiéndose como si fuese la primera vez que lo hiciera, así que permaneció cerca de la puerta, Yunho se dio cuenta, intuyó que no pasaría más adentro, así que desde ahí hablarían, no se molestó siquiera en ofrecer un vaso de agua

- Espero estés más tranquilo que anoche – comenzó a hablar ella – Sé que no estuvo bien lo que hice, pero tú ya estabas molesto por otra cosa – observó con seriedad

Yunho se quedó callado un instante, mirándola, luego suspiró, sintiéndose contrariado, estaba molesto con ella, pero no tanto como lo estaba con Changmin

- Pudiste decirme que no estabas lista para hablar – dijo finalmente – Todo el día creí que algo malo te pasó ¿tienes idea de lo que sentí al verte llegar con un sujeto? Así tan campante… – explicó intentando no alterarse, pero recordarlo le molestaba mucho

- Lo sé, no actué bien, pero estaba confundida y necesitaba aclarar mis sentimientos, te pido perdón ¿Qué más quieres que haga? – inquirió, esperando a que el otro tuviese una respuesta, pero no la había

- Nada – contestó serio – Terminemos y punto, no se puede cambiar nada de lo que pasó

- Entiendo – asintió, mirando un instante hacia el suelo – ¿Qué te hizo enojar realmente? – preguntó con real curiosidad – Es por Changmin, lo presiento

Esta vez fue Yunho quién se sintió tímido, dolía admitir que exageró la noche anterior, cuando el motivo real de su enojo no fue ella ni lo que hizo con aquel tipo, todo eso le importaba mucho menos que lo visto en las fotos, pero Dana lo conocía bien, lo suficiente pasa saber eso

- Changmin se vio con su ex, ni siquiera me dijo que estaba en el pueblo, fueron a cenar, luego… no sé qué pensar – explicó un poco, aun estando confundido, no podía concluir que Changmin regresaría con Kyuhyun, pero sin duda algo pasaba entre ellos

- Y en lugar de confrontarlo a él me haces una escena de celos terrible, cuando ni siquiera te importa realmente si me voy con otro o no – analizó en voz alta, mirándolo a los ojos, Yunho se quedó callado un momento

- ¿Crees que no me importas? Te quiero y eso nunca fue una mentira – contradijo él, convencido

- Como amiga, siempre me consideraste solo tu amiga ¿Por qué nos metiste en esto? – reclamó molesta, alzando un poco la voz

- Tu aceptaste, no te obligué – rebatió rápidamente – Esto no nos llevará a nada – concluyó con fatiga – Solo lidiemos con nuestros errores

- Después de todo él tuvo razón, esto no terminaría bien

- ¿Él? – inquirió confundido, sin entender de quién hablaba Dana, entonces ella se dio cuenta que habló de más, así que apretó los labios – ¿De quién hablas? Dímelo

- Jonghyun – confesó sin esperar que le preguntara de nuevo – Un día me llamó y hablamos, me dijo que terminara contigo

- ¿Jonghyun? – repitió confundido. De pronto oír ese nombre lo llevó a acordarse de lo sucedido en la madrugada, cuando lo ayudó, Yunho recordó todo lo que le dijo

- Da lo mismo, eres libre ahora, no nos veamos más – finalizó la charla, dándole la espalda y avanzando hacia la puerta, pero Yunho se apresuró a detenerla

- Por favor espera – pidió con tranquilidad, totalmente distinto al Yunho ansioso de minutos atrás

- ¿Qué?

- No quiero que las cosas terminen así, somos amigos desde hace muchos años – habló con pesadez, odiaba terminar mal

- Démonos un tiempo – requirió con tranquilidad – La amistad también necesita un respiro

Sin voltear a verle siquiera, abrió la puerta de la casa y salió, Yunho la vio marcharse, de pie bajo el arco de la puerta, Dana subió a su automóvil y se fue, sin dar marcha atrás, él se quedó ahí un rato más, pese a que pasó casi un minuto, suspiró y entró en casa.

Desde el interior del Bar, Changmin vio cuando el auto de Dana pasó por la calle de enfrente, lo distinguió sin problemas, una sonrisa se ensanchó en su rostro, seguramente ellos ya habían terminado, por lo que no pudo esperar más, dejó la franela con la que limpiaba una mesa, sacudió sus manos y se dirigió a la puerta, saliendo del Bar

Yunho ya había cerrado la puerta cuando él se dirigió hacia su casa, con paso decidido, pero no tan rápido, no quería verse tan desesperado. Se detuvo al subir las pequeñas escaleras del pórtico hasta la puerta, dio tres golpecitos con el puño derecho y esperó

- ¿Dana? – se preguntó al oír que llamaban a la entrada, creyendo que tal vez olvidó decir algo. Regresó sobre sus pasos y abrió

Frente a él estaba Changmin, con su mirada brillante y sonrisa nerviosa, observándolo directo a los ojos, Yunho se quedó pasmado, por segundos no supo reaccionar

- ¿Terminaron? – inquirió con ilusión, Yunho no respondió – ¿Qué pasó? ¿tan mal estuvo? – indagó un poco más, pero las facciones duras del mayor lo hicieron titubear – Yunho…

- Vete – ordenó con voz seca, la mirada dura y fija en él

- ¿Eh? – expresó confundido, sin saber por qué lo trataba así. Changmin tragó saliva, inquieto

- No te quiero ver, vete – reafirmó, esta vez de manera más imponente, luego simplemente cerró la puerta, dejando al otro confundido y absorto

- ¿Qué le sucede? – murmuró perplejo – ¡Yunho! – llamó alzando la voz, sin gritar, pero no obtuvo la más mínima respuesta

Sin estar dispuesto a insistir, Changmin apretó los labios con fuerza, miró la puerta cerrada unos segundos más y se dio media vuelta, regresando al Bar. Intentó explicarse lo que pasó, pero no encontró ninguna respuesta, solo sintió que su estómago se revolvió de nuevo, pero no era enojo como la noche anterior, una extraña sensación de angustia lo invadió, tal vez realmente él y Yunho no estaban destinados a estar juntos.

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Donghae regresó al pueblo cerca de las seis de la tarde, justo para preparar la apertura del Bar de ese día, fue Siwon quien lo dejó hasta su casa, ambos bajaron del automóvil y caminaron hasta la puerta, deteniéndose ahí

- ¿Cuándo te vas? – preguntó en tono triste el barman

- En unos días, debo preparar todo antes, así que no creo que volvamos a vernos, no pronto – respondió casi en el mismo tono, pero aparentando estar más serio

- No te perderás de vista ¿verdad? – el otro negó – ¿Y la mansión?

- Aún será de la familia, no pienso venderla, pero es probable que se convierta solo en casa de verano – explicó, aunque no lo había pensado mucho

- Será extraño saber que no vivirás más acá, que ya no habrá un millonario arrogante y pervertido en el pueblo – bromeó un poco, pero comenzando a sentirse más triste

- Las cosas cambian Donghae, no hay remedio – contestó con poco optimismo, el aludido asintió, sin agregar nada más – Entonces, hasta luego – se despidió, estirando la mano acarició un poco el rostro de su amigo, luego sonrió

- Cuídate – expresó en respuesta

Siwon giró sobre su eje y avanzó hacia el auto, pero antes de abrir la puerta volteó de nuevo, justo para ver a Donghae acercarse a él, al llegar no tardó en colgarse de su cuello y Siwon le correspondió con un fuerte abrazo, mientras se despedían con un beso profundo y extenso. Cuando se separaron Donghae tenía los ojos llorosos y no tardó en secarlos

- Voy a extrañar que rompas mis platos tratando de lavarlos – admitió, sollozando un poco

Por primera vez a Siwon se le hizo un nudo en la garganta, pero solo rio un instante, asintiendo

- Llamaré, lo prometo – levantó su mano en despedida, Donghae hizo lo mismo y retrocedió dos pasos. Sin más, Siwon entró en el auto, cerró la puerta y el barman no pudo ver hacia el interior, él tampoco bajó el cristal – Vámonos – indicó a su chófer, éste obedeció, solo entonces pudo desahogarse y llorar un poco, de regreso a casa, en la que no viviría más.

Incluso después que el auto se alejó por completo, Donghae continuó de pie ahí, mirando el camino por el que desapareció el coche, suspiró resignado, de nuevo estaba solo

- Solo me quedas tú – miró hacia la fachada de su negocio, no tenía más remedio que continuar su vida, sin Eunhyuk y sin Siwon.

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Desde que Changmin se marchó por causa de su comportamiento, Yunho no pudo dejar de pensar en él, en lo que le dijo y cómo lo trató, sintiéndose culpable, pero aun estando muy enojado, dentro de él sabía que al menos debía confrontarlo, decirle la razón de su enojo, pero no quería discutir y empeorar todo, era mejor si simplemente se alejaba de él, aunque resultaría muy difícil viviendo éste en casa  de su mejor amigo, sobre todo si trabajaba en el Bar

- ¿Por qué tuvo que volver el tipo ese? ¿por qué Changmin no lo ha olvidado? – analizó en silencio, para Yunho, esas fotos eran suficiente prueba de que aún había sentimientos hacia Kyuhyun

Luego de pensar todo eso, volvió a tener la duda ¿Quién envió esas fotos y con qué intención? Una respuesta posible claramente era Kyuhyun, pero entonces Yunho pensó en otra posibilidad ¿y si fue el tal Minho? Después de todo ¿Cómo supo el ex de Changmin de ese pueblo? Entonces analizó, seguramente los dos estaban ahí

- No puedo creer que Changmin se preste al juego de esos dos – musitó, indignado por completo, entre más lo pensaba más se molestaba, por mucho que no quisiera pensar en esas cosas, acudían a su mente cada vez que intentaba apartarlas.

El Bar abrió sus puertas, ningún cliente acudía aún, así que solo estaban Donghae y sus meseros, el barman aún se encontraba cabizbajo debido a la despedida con Siwon, pero trataría de distraerse con el trabajo. Le contó a Changmin todo, aunque éste no le platicó sobre Yunho

- Será una noche larga – pensó mientras secaba un tarro

Instantes después se apareció Jonghyun, no lucía aspecto de tener mucho rato desde que salió de la ducha y vestía bastante bien, así que Donghae supuso que se vería con Yonghwa, quienes ya parecían pareja, salían muy seguido y no solo por sexo

- Que guapo, mírate – aduló el barman, mirándolo de pies a cabeza, el aludido sonrió complacido

- Yo siempre luzco guapo – bromeó al instante, Donghae lo confirmó, asintiendo

- Vas con tu novio, supongo

- Novio – repitió indignado – Amante, mejor

- ¿Es mi imaginación o luces algo indiferente ¿se pelearon?

- No, pero hay cosas que quiero hablar con él, luego te cuento – respondió un poco serio, despertando la curiosidad del otro – De hecho, no vendré a dormir – informó

- Se pondrá intenso entonces – concluyó, un poco divertido, Jonghyun sonrió mientras negaba

- Por cierto, no he querido entrometerme, pero Yunho me dijo algo y no supe como contárselo a Changmin, ya sabes, nosotros ya no somos esa clase de amigos, pero creo que es importante que esté enterado – comentó antes que se marchara y lo olvidara

- Ah caray – expresó con preocupación – ¿Qué pasó?

- Yunho dice que vio a Changmin y Kyuhyun besándose, lo asegura

- ¿Qué? Imposible ¿o crees que sí? – preguntó contrariado, de hecho recordó que aún no conversaba con Changmin sobre cómo le fue con su “cita”

- Ni idea – encogió los hombros – ¿Se lo puedes comentar tú?

- Claro – consintió, sin problema alguno – Tú de verdad, te preocupas demasiado por él

- No tengo remedio, supongo – sonrió con timidez – Pero pronto me iré, no volveré a saber nada de él, eso me hará bien, eventualmente

- Odio las despedidas – musitó con tristeza, no solo Siwon se fue, Jonghyun también lo haría

- No me perderé por completo, te llamaré de vez en cuando – sonrió de nuevo, acercándose a la barra agarró la mano de Donghae un instante – Y me abstendré de preguntar por Changmin – completó, antes que su amigo dijera algo, pues con esa intención lo vio – Lo prometo

- Más te vale, mira que te di alojamiento cuando eras un completo desconocido

- Créeme que jamás lo olvidaré – se apartó de la barra – Nos vemos mañana

- Diviértete – guiñó un ojo hacia él, Jonghyun se despidió con una seña y se fue del Bar – Será una noche larga – repitió aquella frase, completamente resignado.

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Aunque no debía trabajar aquella noche, Changmin tomó un baño y después de ponerse algo de ropa modesta bajó hacia el Bar, como un cliente más, fue directo a la barra, donde solía sentarse a tomar su descanso cuando laboraba. Eran casi las diez de la noche, aún no había muchos clientes, apenas tres mesas ocupadas y una persona solitaria al otro extremo de dónde él se sentó.

Pidió al barman que le sirviese solamente una cerveza, la cual bebió lentamente, sin hablar hasta que pidió una más, Donghae lo notó algo triste

- ¿Qué te sucede? ¿Estás triste por Siwon? – cuestionó mientras lo miraba atentamente, Changmin se irguió ya que se encontraba encorvado hacia la barra

- No somos tan amigos – respondió haciendo una mueca de extrañeza – No te proyectes – bromeó

- Grosero – hizo un pequeño puchero – Entonces ¿Qué te pasa?

- Fui hablar con Yunho, vi a Dana irse de su casa, me sentí emocionado – sonrió un poco – No pude esperar a que él me confirmara si ellos terminaron en ese momento, así que fui a su casa – suspiró pesadamente al recordarlo – Me dijo que me fuera, sin explicarme nada, mirándome muy duro, como si le hubiese hecho algo terrible, estoy confundido

Donghae escuchó con atención, entonces recordó lo que le dijo Jonghyun antes de irse, sin duda alguna aquello debía tener relación

- Respecto a eso…

- ¿Tú sabes qué le pasa? – cuestionó rápidamente, con interés

- No sé mucho, pero Jonghyun me dijo que Yunho asegura que te vio besándote con Kyuhyun, no tengo idea de nada más – explicó, tras hacerlo encogió los hombros

- ¿Qué? – expresó con indignación, alzando un poco la voz, algunos clientes lo miraron, pese al volumen de las bocinas que transmitían la música

- Tendrás que preguntarle, yo no sé siquiera si Yunho los siguió, o porqué se lo dijo precisamente a Jonghyun, si ellos no es que sean muy unidos siquiera, no sé nada – terminó de explicar todo cuánto podía

- Lo llamaré – determinó sin pensar mucho, sacó su teléfono celular de la bolsa del pantalón

Changmin marcó, pero su llamada no fue respondida, supuso que Yunho estaba ignorándolo, así que redactó un mensaje, indicándole que sabía sobre sus suposiciones y explicándole que nunca se besó con Kyuhyun, pero necesitaban hablar sobre ello. Suspiró tras dejar su móvil sobre la barra, junto a su botella de cerveza

- Estoy cansado Donghae, de las mentiras, de los secretos, nunca debí ocultarle que Kyuhyun estaba en el pueblo – mencionó, sintiéndose de nuevo mal, arrepintiéndose de haberse tomado dos cervezas – De nuevo eché todo a perder, soy un fracasado

- No digas eso – contradijo rápido – Coincido en que hiciste mal en no decirle lo que estaba pasando, pero son errores

- El problema es que solo cometo error tras error – continuó culpándose, luego inclinó su cuerpo al frente hasta topar la cara sobre la barra

- Ay Changmin – expresó apenado, sin saber qué decirle.

La puerta del Bar se abrió, Donghae volteó pensando que sería un cliente, pero no fue así

- Para terminar de joder – musitó incómodo, luego palmeó el brazo de Changmin – Voltea 

El aludido se irguió, volteando a la entrada, observando, para su desagradable sorpresa, como llegaba Kyuhyun con un ramo de rosas y un globo con la palabra “Perdóname”

- No puede ser – dijo con fastidio, sonrojándose, los cuchicheos pese a ser pocos clientes, podían llegar hasta sus oídos, en ese momento quiso meter la cabeza en un pozo

- Mi vida, me hincaré de ser necesario, pero por favor vuelve conmigo – suplicó, en un tono tan deplorable que Changmin no pudo sentir otra cosa que lástima

- Basta, por favor – respondió apenado, mirando discretamente a su alrededor – Hablemos afuera

- No, quiero que todos escuchen – se giró sobre sus talones – Amo a este hombre

- Por el amor del cielo – dijo con fastidio, más avergonzado que nunca, a Donghae le dieron ganas de reír, pero se aguantó por respeto a su amigo

- Solo quiero que me de otra oportunidad – continuó su supuesto discurso, pero pronto dejaron de prestarle atención, así que se giró de nuevo hacia Changmin, estirando los regalos en su dirección

- No te daré ninguna oportunidad, ya déjame tranquilo – estiró su mano derecha y con el dorso de esta empujó el globo, siendo de helio cuando Kyuhyun lo soltó se fue al techo

- Mi amor

- No me digas así, basta – alzó un poco más la voz, completamente fastidiado – No te amo más, no me interesas ni siquiera como amigo, no te tengo el mínimo de confianza, estoy harto de ti, sal de mi vida – expresó intentando sonar lo más despreciativo que podía

- Changmin… no quise chantajearte, no tengo esos videos sexuales de nosotros, no sé dónde quedaron – expresó con angustia, creyendo que solo estaba enojado por eso

- Cállate – respondió inquieto, aquello sin duda llamó de nuevo la atención de los clientes, sonrió nervioso y avergonzado al verlos

- Changmin, es mejor que hablen en otro lado – sugirió el barman, el aludido volteó a verlo, su amigo estaba completamente sonrojado, nunca imaginó que hubiera esa clase de videos de ellos

- Luego te explico – dijo sin poder verlo mucho rato a los ojos, luego se giró de nuevo hacia su ex – Vamos afuera – señaló la puerta – Ahora – ordenó, comenzando a incomodarse más

- Lo que tú digas – comentó esta vez, dócil

El primero en ponerse en marcha fue Kyuhyun, aún sosteniendo el ramo de rosas, Changmin suspiró profundo antes de seguirlo. Ambos salieron del Bar, permaneciendo en la acera frente a éste, ante las miradas de algunos curiosos

- ¿Qué tengo que decir o hacer para que dejes de hostigarme? – cuestionó molesto, su ex cada vez se volvía más acosador y más extraño

- Perdonarme, volver conmigo – respondió sin pensarlo

- Ya te dije que te perdoné hace tiempo, también que NO VOLVERÉ CONTIGO – expresó determinante, casi gritando – Estás cansándome

- ¿Y crees que rogarte no me agota? – defendió esta vez, en papel de víctima – Si lo hago es porque te amo y porque creo en lo nuestro

- “Lo nuestro” ya no existe, entiende de una vez – miró el ramo de flores – No gastes tu poco dinero en algo que no quiero, no me quedaré con eso

- Changmin por favor – suplicó, hincándose frente a él, con el ramo de rosas extendido

- Levántate – pidió con tono tranquilo – Terminaré golpeándote si no entiendes, estoy harto

- Aprendí mi lección, te lo juro, vuelve conmigo – suplicó animadamente, estirando un poco más las flores hacia él

- Que hermosa escena – expresó una voz a un par de metros de distancia, era Yunho que avanzaba hacia ellos dos

Después de leer el mensaje que le envió Changmin, decidió que era justo hablar del tema, por eso se arregló para ir al Bar, pero no esperaba ver aquello, tampoco supo cómo reaccionar en realidad

- Yunho – susurró Changmin, por la expresión del mencionado supo que aquello no acabaría bien

- ¿Qué haces aquí? Esto no te incumbe – reaccionó Kyuhyun, apretando con fuerza el ramo

- Ya me di cuenta, salgo sobrando – concluyó cabizbajo

Changmin entornó los ojos y suspiró ligeramente, con Kyuhyun y ahora Yunho en papel de víctima estaba realmente agotándose, pero miró hacia Yunho, ignorando al otro

- No tengo idea de dónde sacaste que me besé con él – señaló al susodicho – Y lamento mucho haberte ocultado la verdad, solo quería evitar una escena como la que estás haciendo ahora

- Fuiste a cenar con tu ex – habló como si este no estuviera presente – Y vi unas fotos, son claras, yo no “saqué” nada, lo vi

- ¿Fotos? – inquirió, extrañado. Yunho sacó su teléfono y se las mostró

Al ver lo poco claras que eran las susodichas pruebas de Yunho, Changmin sonrió sarcásticamente, devolviendo de mala gana el móvil

- ¿Te parece que nos estamos besando? – reclamó indignado, incluso si él no fuera uno de los protagonistas de las fotos y no supiera lo que pasó en ese momento, aún así no se atrevería a decir que eran pruebas claras, como aseguraba el otro

Yunho se quedó callado, reflexionando un poco sobre aquella pregunta

- Intentó besarme y yo lo rechacé – explicó, aunque lucía poco motivado – Díselo – habló esta vez hacia su ex, pero Kyuhyun se quedó callado – ¿Sabes que me duele Yunho? – aunque le preguntó directamente, él no respondió – Confiaste en esas fotos poco nítidas mucho más que en mí. Al grado de despreciarme y no darme la cara, si te importa tanto ¿no era mejor confrontarme antes que dudar completamente de mí?

Aunque intentó no hacerlo, un par de lágrimas se formaron en las orillas de sus ojos, pero se mantuvo firme, no lloraría ahí, enfrente de ellos dos

- Te amo, ha sido muy difícil aceptarlo, luchar contra mí mismo, mis inseguridades, mis malas decisiones, mis miedos, pero finalmente sucedió, me enamoré y fue de ti…  cuando nos conocimos ni siquiera te hubieras imaginado amarme también ¿Por qué estropearlo por tonterías? – reclamó sintiendo que perdería la batalla contra no llorar

- Él no vale la pena, mira cómo te pones – intervino Kyuhyun, completamente sorprendido de ver al amor de su vida diciendo todas aquellas cosas a alguien que no fuera él

- Tú cállate, no tienes vergüenza – demandó molesto – Desaparece de mi vida, ya no sé qué más decirte o hacer

- Ya oíste, vete, lo has lastimado mucho – habló esta vez Yunho, como si lo anterior que Changmin dijo no hubiese existido

- ¿Saben qué? Me retiro – hizo una seña de fastidio con ambas manos

- Pero Changmin – intentó detenerlo Yunho

- Hablamos luego – respondió, aunque sí quería arreglar las cosas con él, en ese momento estaba fastidiado y muy incómodo

- Espera mi amor…

- Tú sí te puedes ir para siempre, vete – interrumpió a su ex, sin mirarlo

Changmin entró en el Bar, se despidió de Donghae sin palabras y siguió su camino al interior de la casa, dejando a los otros dos afuera, compartiendo un incómodo silencio, hasta que Kyuhyun lo confrontó, señalándolo

- ¿Cómo te atreves? ¿No sabes lo que yo daría porque Changmin me amara de nuevo? Y tú te das el lujo de hacerlo sufrir – reclamó enojado

- Nadie lo ha hecho sufrir como tú, bien lo dijo él, no tienes vergüenza – se defendió Yunho – Y a todo esto ¿Por qué diablos me enviaste esas fotos? Querías que esto pasara ¿verdad?

- No te envié nada

- No finjas – contradijo irritado

- Déjame ver el número – estiró la mano con la que no sostenía las flores, Yunho lo dudó un momento, luego aceptó, enseñando el mensaje sin cederle el aparato

Ya que el contacto no estaba guardado, la aplicación de mensajes no mostró ningún nombre, pero sí el número del teléfono desde el que fue enviado, Kyuhyun lo miró y al instante reconoció

- Es el teléfono de Minho – indicó al otro

- Ustedes dos lo planearon ¿verdad? Lo llevas a cenar y Minho toma las pruebas

- Yo no planee nada y deja de jugar al detective, tu capacidad de deducción apesta – reprochó como si le conociera más allá de las dos veces que se habían visto en toda su vida

- Ya no importa, el daño está hecho ¿Por qué no se van de este pueblo? Ya oíste a Changmin, no te quiere en su vida, desaparece

- No te dejaré el camino fácil ¡Él es mío! – insistió, aunque ya sabía que no, que su ex no lo amaba más, que cada vez lo toleraba menos, pero él se quería seguir aferrando

- Si tanto lo amas, desiste de verlo como un objeto al cuál poseer y déjalo ser feliz con el hombre que ama, conmigo – dijo esta vez con seriedad, sin ánimos de pelear – Acéptalo de una vez

- ¡Jamás! – gritó con toda la fuerza que pudo, estrellando el ramo de flores contra el suelo, lanzó a Yunho una fiera mirada y se alejó de prisa, no estaba dispuesto a tirar la toalla tan fácilmente

Mientras lo miraba marcharse, Yunho se relajó un poco

- Soy un idiota, un grandísimo idiota – pensó abrumado – Necesito un trago

No lo analizó mucho y entró al Bar, ahí lo esperaba Donghae con una mueca de desaprobación, aunque no escuchó lo que pasó afuera, por los ojos llorosos de Changmin pudo imaginar que las cosas no salieron del todo bien y que gran parte era culpa de su mejor amigo, el gesto de resignación de éste se lo confirmó.

Continuará... 

Notas de Autor: Definitivamente ustedes son las mejores, siempre me esperan aunque mis actus se tarden, aun recuerdo cuando actualizaba cada 15 días al inicio del fanfic, perdón!! Pero ustedes me han seguido apoyando ♥ millones de gracias. En estos días las cosas han sido muy difíciles para muchas personas, pero tratemos de salir adelante con siempre lo mejor, cuídense mucho y si pueden quédense en casa, laven siempre bien sus manos y al salir usen cubre bocas y guarden su sana distancia :3 un abrazo fuerte a todas

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