Fijación
Capítulo 2. Seducción
Los días pasan y las cosas seguían su curso, Hilde y Duo seguían sin
hablarse y la chica aún tenía que trabajar doble turno para pagar los discman
de su amiga, que aunque ella le había dicho que no era necesario eso ya que
ella estaba al tanto de cómo era Duo y le creía a Hilde, pero aun así ella
quería pagar a su amiga el aparato que se había roto; Duo y Quatre ya
comenzaban a ser amigos, el trenzado ya no se le insinuaba a Heero, quería
dejar pasar un tiempo antes de comenzar a atacar, no le convenía hacer las
cosas tan precipitadamente... después de clases por primera vez Duo visitaría
la casa de Heero, el novio del chico estoico tenía que hacer un proyecto por lo
que no podía ir con ellos a casa del de ojos cobalto, al estar frente a la
puerta Duo se admira de la estructura de la casa, no era muy grande pero estaba
de muy buen ver, y por dentro estaba mucho mejor, la familia Peacecraft Yuy no
era millonaria pero si tenía dinero suficiente como para vivir bien
Duo. ¡Qué casota!
Heero. No es para tanto
Duo. Lo dices porque vives aquí, yo tengo que compartir cuarto con la
tarada de mi prima, la cocina está demasiado pegada a la sala y ni si quiera
hay un pequeñito jardín, es una porquería de casa
Heero. No digas eso Duo, debes estar agradecido con lo que tienes, hay
gente que ni siquiera tiene un hogar
Duo. Ya lo sé pero es que me choca vivir ahí
Heero. Mnh
Duo. ¿Estás enojado?
Heero. No Duo, pero a veces me parece que eres muy superficial
Duo. No es eso, es que tú no sabes lo que es vivir en la pobreza... a
veces sin tener para comer, no poder darte ni un pequeño lujo
Heero. Duo, tienes celular, asistes a una buena escuela, y por Dios,
mira cómo te vistes
Duo. ¡Pero no es suficiente!
Heero. Mnh... ¿por qué me molesto?
Duo. Ya no hablemos de eso ¿sí?
Heero. Está bien
En ese momento unos pasos se escuchan muy cerca y después se escucha
como alguien baja las escaleras con prisa, se trataba de Reelena quien había
oído voces y enseguida se había puesto los zapatos para bajar y saludar, muchas
veces Heero llevaba a sus amigos y ella se encargaba de darles el visto bueno,
con algunos había logrado salir y con otros no, la chica llega a donde están
los chicos y observa a Duo de pies a cabeza con los ojos muy abiertos por la
sorpresa
Reelena. ¿Quién es tú amigo?
Heero. Duo, ella es mi hermana menor... Reelena, él es Duo, un amigo
Duo. Encantado señorita
Reelena. Nada de eso, yo estoy encantada Duo
Duo. Gracias
Heero. ¿Por qué no te vas Relela? Déjanos solos
Reelena. Deja de jugar con mi nombre... un momento, ¿y Quatre? No me
digas que ya lo botaste por éste bombón
Heero. No digas tonterías Reboba, solo somos amigos
Reelena. Si como no, basta verlos para darse cuenta de la tensión
sexual entre ambos
Heero se enoja por el comentario de su hermana pero en cambio Duo
sonreía ampliamente, esa chica se veía lo suficientemente loca y aventada como
para serle de utilidad, ya vería después como hacerla su aliada
Reelena. Ya me voy porque me tengo que arreglar, Wufei vendrá por mí
en una hora
Heero. ¿Y qué te arreglas? Si tú no tienes arreglo
Reelena. Que graciosito ¿eh?... Duo, nos vemos luego, mucho gusto, y
no le hagas travesuras a mi hermano, ni dejes que te las haga, es un pervertido
jijiji
Heero. ¡Ya lárgate!
Heero hace como que va a perseguir a Reelena pero ésta sacándole la
lengua se va corriendo muy feliz, Duo comienza a reírse y Heero lo observa
extrañado
Heero. ¿Qué te da risa?
Duo. Tu hermana es muy simpática
Heero. Es una fastidiosa
Duo. En fin, dijiste que tenías un hermano mayor ¿dónde está?
Heero. Déjame ver... hoy es viernes, seguramente está trabajando
Duo. Ni modo, lo conoceré luego
Heero. Sí, ven, te mostraré la casa
Heero comienza a caminar en dirección al jardín cuando la puerta
comienza a abrirse, los dos voltean a ver quién es y es Trowa quien entra por
la puerta, al cerrarla se percata de la presencia de su hermano y otro chico,
los ojos verdes se quedan sorprendidos por aquello que ve frente a él, un
muchacho muy atractivo que estaba en compañía de su hermano ¿un nuevo amigo?
¿su nuevo novio? No estaba seguro de ello, pero de lo que sí estaba seguro es
que ese chico era bastante atractivo, Duo también observa a Trowa y se
sorprende de lo guapo que está aunque en definitiva Heero lo estaba más, el
chico de ojos cobalto mira a ambos chicos que se inspeccionaban y frunce el
ceño, por alguna razón se sentía molesto de que Trowa mirara así a Duo así que
se acerca a ambos para presentarlos y sacarlos de su trance
Heero. Duo, él es Trowa, hermano, él es Duo Maxwell, un amigo
Trowa. Mucho... gusto
El ojiverde extiende su mano y Duo enseguida se la da, ambos se
miraban fijamente y Heero se molesta por lo que agarra a Duo del brazo haciendo
que los chicos se suelten, Trowa cobra la compostura y mete sus manos a sus
bolsillos observado a Heero duramente
Trowa. ¿Y Quatre?
Heero. Tiene cosas que hacer
Trowa. Espero que no le estés jugando chueco
Heero. No seas idiota
Duo. A mí también me dio gusto conocerte Trowa
Trowa. Con permiso
Trowa les pasa de lado a los dos chicos y sube hasta su habitación,
Heero no dejaba de fruncir el ceño y Duo sonreía divertido, se había dado
cuenta de los celos de Heero
Duo. ¿Estás enojado?
Heero. No Duo, no estoy enojado
Duo. Tu hermano está guapísimo ¿tiene novia? ¿o novio?
Heero. No que yo sepa ¿por qué?
Duo. ¿No es obvio? Me gustó
Heero. ¡No te le acerques!
Duo. ¿Por qué?
Heero. Pues yo... no, perdóname, si quieres hablo con él para que
tengan una cita o algo
Duo. Me gustaría mucho
El trenzado estaba más que divertido con las reacciones de Heero, era
cierto que Trowa le había gustado pero no le interesaba en lo más mínimo, solo
deseaba darle celos a Heero y lo estaba consiguiendo... el ojiverde antes de
entrar a su cuarto llama a la puerta del cuarto de su hermana, la chica abre la
puerta, ya se encontraba bañada pero aún permanecía en bata de baño mientras se
pintaba y se ponía sus alhajas, Trowa entra a la habitación y se sienta en la
cama mientras su hermana vuelve a sentarse frente al espejo para continuar
pintándose
Trowa. ¿Vas a salir?
Reelena. Sip hermanito
Trowa. ¿Con el mismo de la otra vez o ya encontraste otro?
Reelena. Hay que malo, es el mismo
Trowa. Con eso de que cada día sales con uno distinto
Reelena. Ya no, al rato me dirán Rezorra y no me conviene jijiji
Trowa. No digas eso tonta, mato a quien te diga esas cosas
Reelena. Ay como me cuidan mis hermanos
Trowa. Yo le prometí a mamá que te cuidaría
Reelena. Heero, papá y tú son todo para mí, gracias
Trowa. ... Hablando de Heero ¿viste a su nuevo amigo?
Reelena. Que hombre ¿verdad? para mí que le está pintando el cuerno a
Quatre
Trowa. ¿Tú crees?
Reelena. Soy una experta en relaciones sentimentales, si no le está
poniendo el cuerno en éste momento no tardará en hacerlo, se nota que hay
tensión sexual entre los dos
Trowa. Mnh
Reelena. Te preocupa ¿verdad?
Trowa. ¿Qué cosa?
Reelena. Quatre
Trowa. Claro, es mi amigo
Reelena. No como amigo, lo quieres ¿verdad?
Trowa. No digas tonterías
Reelena. No iré a decírselo a Heero, como te dije, soy experta en
relaciones y se nota mucho cuanto te gusta, no lo puedes negar
Trowa. Está bien, si me gusta ¿contenta?
Reelena. Te admiro, yo no podría resistirme por mucho que sea el novio
de mi hermano
Trowa. ¿Tanto así?
Reelena. Sí, de que me agarra la calentura...
Trowa. ¡Reelena Peacecraft Yuy!
Reelena. Jajajaja, que bobo eres
Trowa sonríe mientras mueve la cabeza hacia los lados y se pone de pie
para salir de la habitación de su hermana y al caminar hacia su habitación ve a
Heero y a Duo dirigirse hacia la habitación de Heero y entonces frunce el ceño,
pasados unos minutos decide entrar de sorpresa a la habitación de su hermano,
Heero estaba sentado sobre la cama y Duo viendo unos libros en el librero,
Heero tenía una gran colección, ambos chicos miran hacia la puerta cuando ésta
se abre de golpe, Trowa los observa seriamente
Heero. ¡¿Por qué no llamas antes?!
Trowa. Perdón
Heero. ¿Creíste que entrarías y nos verías teniendo sexo o algo así?
Trowa. No
Heero. Vete de aquí
Trowa. Mnh
Heero. ¿No deberías estar trabajando?
Trowa. La oficina va estar cerrada unos días por inventario
Heero. Mnh, da igual, déjanos solos
Trowa. Sí, que humor te cargas
Trowa cierra por fin la puerta y Heero dirige su mirada hacia Duo
quien sonreía muy ampliamente mientras hojeaba uno de los libros de Heero
Heero. Perdónalo, a veces no nos llevamos bien
Duo. Le gusta
Heero. ¿Eh? ¿quién?
Duo. Tu novio
Heero. ¿Qué demonios dices?
Duo. Date cuenta tonto, está molesto de que tú y yo podamos tener algo
porque está interesado en tu güerito
Heero. Idioteces
Duo. Piénsalo ¿por qué más actuaría de ese modo? Teme que lastimes a
Quatre
Heero. Ahora que lo pienso...
Heero se queda pensativo mientras recordaba ciertos sucesos como
cuando él y Quatre llegaban a la casa del ojiazul y enseguida Trowa se iba a su
habitación o como es que nunca había aceptado que salieran en parejas y como
siempre se evitaba estar cerca de los dos, además si lo pensaba bien Trowa
conocía hace mucho más tiempo a Quatre que él y antes hablaba mucho de él pero
como Heero no estaba interesado en Quatre en aquel entonces no le había tomado
importancia a esa situación, ahora que Duo se lo decía se convencía de ello
Heero. Ese idiota
Duo. ¿Celoso?
Heero. Sí, de pensar que pone sobre su cuerpo sus lujuriosos ojos
Duo. Nunca antes te vi así por algo que tuviera que ver con Quatre
Heero. Es mi novio, no suyo, solo yo puedo verlo así
Duo. Bien dicho, defiende lo que es tuyo, además yo saldré con Trowa
¿se te olvida?
Heero. ¿Eh?... ¡No!
Duo. ¿Qué?
Heero. No quiero que salgas con Trowa, no quiero que sobre ti también
ponga sus ojos lujuriosos
Duo. ¿Celoso también de mí?
Heero. No digas tonterías
Duo. Jijiji, que lindo eres Heero
El trenzado observa fijamente a Heero poniéndolo enseguida totalmente
rojo
Heero. ¿Sabes? tengo cosas que hacer ¿te molesta si te pido que te
vayas?
Duo. Está bien, me voy
Duo agarra sus cosas y se acerca a Heero dándole un beso en la
mejilla, Heero sin pensarlo agarra el brazo de Duo y lo vuelve hacia él con la intención
de besarlo en los labios pero se contiene tan solo dando también un beso en su
mejilla, Duo sonríe y se aparta caminando hacia la puerta y sale de la
habitación de Heero dejándolo totalmente sonrojado y sintiéndose muy confundido
Heero. ¿Pero que estoy haciendo? ¿qué me sucede?... tuve unos deseos
enormes de besarlo
Heero se agacha tomando su rostro entre sus manos, se sentía muy
confundido y entonces una imagen de Quatre le llega a la mente y enseguida se
acerca al teléfono para marcarle a su casa, el rubio le contesta sorprendido de
tal atención, era raro en Heero pero le gustaba que lo hubiese llamado por
teléfono... Duo aún seguía en la casa de Heero y antes de llegar a la salida se
topa con Trowa, ambos chicos se miran hasta que Duo se acerca a Trowa
Duo. Hola Trowa
Trowa. Hola ¿ya te vas?
Duo. Sí, ¿cómo ves?
Trowa. Mal, tu presencia no pasa desapercibida por mis ojos
Duo. Jajaja, que galán
Trowa. ¿Tienes pareja?
Duo. Estoy libre y totalmente disponible
Trowa. ¿Te gustaría ir a tomar un café?
Duo. Me encantaría pero debo ir a casa
Trowa. Te llevo
Duo. Gracias pero iré en autobús, los pobres usamos el transporte
público
Trowa. Te llevaré y no me discutas
Duo. Está bien
Duo sonríe y Trowa comienza a caminar hacia la puerta abriéndole ésta
a Duo y dándole el paso, Duo sonríe más ampliamente y salen los dos de ahí,
Trowa abre la puerta a Duo y después sube él, el auto arranca, durante el
trayecto apenas si salen de las bocas de ambos un par de palabras, Trowa ya
estaba convencido de que no había algo entre él y su hermano así que iba a
aprovechar para él llegarle a Duo, después de todo Quatre amaba a Heero así que
no había esperanza de que se fijara en él... al llegar a la casa de Duo ambos
permanecen dentro del auto
Trowa. Bonita casa
Duo. Mientes, es fea y pequeña
Trowa. No es verdad, se ve acogedora
Duo. No hablemos de eso
El trenzado se muerde el labio inferior mientras ve a Trowa fijamente
y éste a su vez mira al trenzado, y sin pensarlo dos veces Trowa acerca su
rostro al de Duo y cerrando sus ojos intenta besarlo pero Duo coloca dos dedos
sobre los labios de Trowa y lo evita
Duo. Eres rápido
Trowa. Me gustas Duo, me gustas mucho
Duo. Me acabas de conocer
Trowa. Si pero eres hermoso, me encantas, eres sensual
Duo. ¿Entonces es solo mi físico?
Trowa. Tal vez
Duo. ¿No te importa que sea mala persona o algo así solo porque tengo
buen cuerpo y buen rostro? Y dicen que yo soy superficial
Trowa. Pero tú no eres mala persona ¿o sí?
Duo. ¿Quieres descubrirlo?
Trowa. Duo...
Duo. ¿Descubrir todo de mí? Explorarme... encontrar lo más secreto en
mí
Trowa. Sí, si quiero
Duo. Jijiji, eres perverso, los Universitarios sí que son perversos
El trenzado agarra el rostro de Trowa con ambas manos y lo acerca al
suyo a una distancia muy corta, el ojoverde cierra sus ojos en la espera de que
Duo lo bese pero él solo atrasa la acción sonriendo malévolamente y solo
rozando los labios de Trowa con su lengua, el ojiverde no soporta más y besa
salvajemente a Duo quien enseguida corresponde al beso, sus lenguas se rozaban
de vez en cuando fuera de sus bocas mientras agarraban aire entre cada
apasionado beso, una de las manos de Duo baja hasta entrar al pantalón de Trowa
y tomar su miembro excitado con tan solo un beso, el ojiverde jadea al sentir
la tibia mano y entonces Duo comienza a moverla por el miembro de Trowa
masturbándolo, el ojiverde gemía en la boca de Duo mientras se besaban dentro
de aquel automóvil y entonces Trowa siente como su líquido sale por fin bañando
la mano de Duo, Trowa abre los ojos con la respiración acelerada y estira su
mano hasta una caja de pañuelos que tenía cerca, toma uno y se la da a Duo para
que se limpie la mano, el trenzado se limpia la mano a excepción de su dedo
pulgar el cual pasa por los labios de Trowa, y éste le miraba embobado, Duo
sonríe y abre la puerta del auto
Duo. Gracias por traerme, te veo luego
Como si no hubiera pasado nada Duo abre la puerta del auto y se sale,
la cierra y entra enseguida a su casa, Trowa aún permanecía en trance, no podía
aún creer lo que había sucedido, pero ese chico poseía una fuerza de atracción
enorme y no se había podido detener, se había dejado seducir, había caído en un
erótico juego y tal vez ya estaba muy dentro de él como para poder salirse,
estaba embrujado por el hechizo de amor que Duo había dejado en él aunque sus
sentimientos por Quatre no habían cambiado...
Al día siguiente después de clases Quatre tenía junta con el comité de
estudiantes ya que él tenía un cargo en dicho comité por lo que no se puede ir
con Heero y Duo quienes caminan rumbo al auto de Heero ya que éste casi todos
los días al salir de clases lo llevaba hasta su casa aunque nunca había
entrado, Duo no se lo permitía porque le daba vergüenza, al llegar a casa de
Duo los chicos permanecen en el auto
Duo. Has estado muy callado
Heero. No dejo de pensar en mi hermano y su gusto por Quatre ¿cómo
puede hacerme esto?
Duo. Así somos los hombres, malévolos
Heero. ¿Por qué dices eso?
Duo. Hice algo malo
Heero observa a Duo con desconfianza, a veces la forma de hablar del
trenzado era tan frívola y despreocupada que le hacía sentir una sensación
extraña, pareciera que en el cuerpo de Duo existieran dos personas, en cambio
Duo sonreía pícaramente
Heero. ¿Qué hiciste?
Duo. Besé a tu hermano ayer
Heero. ¡¿QUÉ?!
Duo. Jijiji... tranquilo amigo
Heero. ¡No quiero que te le acerques!
Duo. ¿Por qué? Trowa es lindo y no tiene pareja, yo estoy en las
mismas condiciones, ambos nos gustamos y además de esa forma se aleja de tu
rubio bonito
Heero. Mnh... ¿te dijo que le gustas?
Duo. Sí, quiere conmigo
Heero. No sé... esto es extraño
Duo. Vamos bonito... sonríe
El trenzado estira su mano derecha hasta el rostro de Heero y lo
acaricia suavemente, el chico de ojos cobalto se queda totalmente paralizado
recibiendo la caricia mientras un gran sonrojo se le marca en el rostro, Duo lo
miraba profundamente comenzando a acariciar sus labios con el dedo pulgar,
Heero cierra sus ojos sintiendo los dedos de Duo en sus labios e
involuntariamente abre la boca mordiendo ligeramente el dedo de Duo, en ese
momento el trenzado se percata de la presencia de su prima quien iba llegando
de la tienda con el mandado y entonces deja de acariciar a Heero quien abre los
ojos rápidamente sintiéndose confundido, no se explicaba cómo se había dejado
llevar de esa forma, Duo frunce el ceño y retira su mano, Hilde sonríe a Heero
quien no responde de ninguna forma y entonces la chica entra a la casa, en el
auto los dos chicos quedan en silencio, el corazón de Heero latía con fuerza y
en cambio Duo estaba tranquilo
Duo. Creo que mejor entro
Heero. Duo...
Duo. ¿Qué pasó?
Heero. ¿Qué fue eso?
Duo. ¿Qué fue qué?
Duo sonríe despreocupadamente y abre la puerta del auto, se acerca a
Heero y le da un beso en la mejilla, se aleja de él y sale del auto cerrando la
puerta después y despidiéndose de su amigo con la mano, Heero lo veía muy
confundido, algo había pasado entre ellos y Duo actuaba normalmente, el
trenzado entra a su casa mientras que Heero se queda en el auto totalmente
quieto, estaba confundido, nervioso y se sentía mal, entonces toma su celular y
marca al de Quatre, el rubio contesta rápidamente
Quatre. ¿Qué pasa mi amor?
Heero. ¿Ya terminaste tus asuntos?
Quatre. Si
Heero. ¿Estás en tú casa?
Quatre. Sí
Heero. Nos vemos en "Gundam´s café" en media hora
Quatre. Pero...
El chico de ojos cobalto cuelga el teléfono sin darle tiempo a Quatre
de agregar algo más a su plática... ya dentro de la casa Duo estaba a punto de
subir a su habitación cuando la voz de su prima lo detiene al subir media
escalera
Hilde. Pero que buenos gustos tienes
Duo. Metiche, arruinaste un buen momento
Hilde. Perdóneme su majestad
Duo. Déjame en paz
Hilde. Pero ese chico sí que es atractivo ¿tiene novia?
Duo mira con odio a su prima y baja las escaleras lentamente, Hilde se
queda callada mientras ve que su primo camina hacia ella y por alguna extraña
razón se siente nerviosa, Duo estando ya muy cerca de ella la agarra del cuello
con una mano y con un movimiento rápido y brusco la estrella contra la pared,
Hilde agarra el brazo de Duo y trata de que le suelte el cuello pero el chico
no cede
Hilde. Duo... ghg
Duo. Aleja tus pensamientos perversos de él... ¡soy capaz de matarte!
Hilde. Arghh... Duo
La chica le da una fuerte patada a Duo en el lomo de su pierna
haciendo que éste se doble un poco por el dolor y la suelte, Hilde se agarra el
cuello tratando de agarrar aire mientras que Duo se sobaba su pierna, el
trenzado se levanta nuevamente y quita de su rostro ese semblante de odio con
que había mirado a su prima para verle preocupado
Duo. Perdóname prima, no quería hacerte daño
Hilde. A mí no me engañas como a mamá... cof cof cof
Duo. Es que ese chico me gusta
Hilde. ¿Y por eso ibas a matarme?
Duo. No iba a matarte, no seas tonta
Hilde. Estás loco Duo
Duo. Piensa lo que quieras... me voy a mi habitación
Duo sube las escaleras muy despreocupado y sonriendo, Hilde lo veía
asustada, nunca antes había visto en Duo una mirada tan llena de odio y nunca
antes éste había intentado lastimarla... en la cafetería donde Heero había
citado a Quatre ambos chicos ya se encontraban ahí, Heero se sentía culpable
por lo que había dejado que pasara con Duo y por eso había invitado a Quatre a
ese lugar, al rubio la forma de actuar de Heero le preocupaba un poco
Quatre. Tu llamada fue extraña
Heero. ¿Qué no puedo citar a mi novio para verlo?
Quatre. Si puedes pero nunca lo haces ¿pasa algo?
Heero. Nada, todo bien
Quatre. Si pasara algo malo me lo dirías ¿verdad?
Heero. Mnh... sí
El chico de ojos cobalto sonríe a Quatre y éste se sorprende de
aquella sonrisa, era raro que Heero sonriera de la nada, ahora estaba
convencido de que a Heero algo le pasaba pero ya no iba a indagar en el asunto,
el rubio coloca ambos brazos en el cuello de Heero y lo atrae hacia él para
besarlo, las manos de Heero se posan en la cintura de Quatre y los chicos se
besan tiernamente no importándoles que estuvieran en un lugar público, una de
las manos de Heero baja hasta la pierna de Quatre la cual acaricia suavemente,
el rubio aparta ligeramente a Heero de él y sonríe después de acabar con el
beso
Quatre. Aquí no Heero
Heero. Perdón
Quatre. ... Pediré postre
Heero. Sí, mientras yo voy al baño
Quatre. Okay
Heero se pone de pie y se dirige al baño, entra y éste está vacío, el
chico directamente se acerca al espejo y abriendo la llave del agua se echa un
poco en el rostro observándose después en dicho espejo, su mirada parecía un
poco distante
Heero. Duo... Dios ¿qué me sucede? Quatre es mi pareja, yo lo elegí como
mi pareja, es a él a quien quiero, con quien he estado un par de meses, lo
quiero, quiero a Quatre, quiero a Quatre
Entre más dijera Heero que quería a Quatre menos convencido estaba de
ello, había algo en su amigo trenzado que le hacía pensar en él y ni siquiera
se había dado cuenta de cuando Duo comenzaba a monopolizar sus pensamientos, de
repente la imagen del chico tocándole los labios llega a su mente y rápidamente
se sonroja, nuevamente Heero se echa agua pero aun así el calor en sus mejillas
no desaparece, entonces nota que sin darse cuenta había conseguido una erección
Heero. No puede ser ¿qué hago?... deja de pensar cochinadas Heero
El chico estoico se reprendía por aquello que le había sucedido y
mirando a varios lados se convence de que no estaría mal darle solución a su
problema de la manera más normal, después de todo se encontraba en un baño y
además éste estaba desértico, el chico entra al cubículo que está atrás de él,
se para frente al retrete y desabrocha su pantalón, baja el cierre del mismo y
toma su miembro con ambas manos – no llevaba ropa interior – y entonces
comienza a deslizar su mano derecha por su miembro, acariciándolo y sobándolo
lentamente
Heero cierra los ojos suavemente mientras jadea despacito, no quería
que se escuchara lo que estaba haciendo, de repente la imagen de Duo le llega a
la mente y abre sus ojos un poco, imaginándose a Duo hincado frente a él
haciéndole sexo oral y entonces aumenta la velocidad de su mano comenzando a
gemir sin importarle si se escucha o no fuera del baño, la ilusión de Duo
haciéndole sexo oral no desaparece hasta que Heero por fin culmina depositando
su esencia dentro del retrete mientras cierra sus ojos con fuerza y muerde su
labio inferior tratando de que su gemido se ahogue en su garganta, Heero abre
los ojos ya habiéndose calmado su respiración y mira su mano bañada con parte
del líquido que había derramado observándola durante varios segundos
Heero. Que idiota soy
El chico de ojos cobalto agarra papel de baño y se limpia la mano para
después abrocharse bien los pantalones y subirse el cierre, sale del cubículo y
se acerca a los espejos para lavarse las manos, se limpia el sudor con algo de
papel y sale del baño como si nada, Quatre estaba sentado muy serio, ya se
había acabado el postre que había pedido, al ver llegar a Heero a la mesa le
mira preocupado
Quatre. Te tardaste mucho ¿estás enfermo?
Heero. No
Quatre. ¿No estabas haciendo algo...?
Heero. Mnh
Quatre. ¿Qué te estabas haciendo?
Heero. ¡Quatre!
Quatre. Tranquilo, yo también lo hago de vez en cuando, bueno, casi
diario
Heero. ¿Qué?
Quatre. Sí, la vanidad es cruel, a veces paso horas en el espejo
arreglándome el cabello o tratando de que mi rostro se vea bien
Heero. ¡Ah!
Quatre. ¿Qué pasa?
Heero. Nada
Quatre. Te veo extraño últimamente ¿seguro que no me ocultas nada?
Heero. Seguro Quatre
Heero toma la mano derecha de Quatre y la besa observando al rubio con
ternura, Quatre sonríe pero ahora más que nunca estaba convencido de que su
novio no estaba tan bien como aseguraba... en casa de Duo por la noche éste se
encontraba en la pequeña habitación que compartía con su prima la cual ya se
encontraba dormida, en cambio él observaba una foto que sostenía entre sus
manos la cual miraba con cariño mientras acariciaba ligeramente con sus dedos
una de las personas que en ella estaba retratada
Duo. Como verás te he reemplazado, tengo un nuevo amigo a quien amar,
pero él no será tonto como tú... él tiene que ser mío, él no me va abandonar
por alguien más como tú lo hiciste, porque a él no puedo hacerle daño, él va a
amarme, ya verás que sí, ya verás
El trenzado besa tiernamente la imagen a la cual acariciaba con sus
dedos y después guarda la fotografía en una pequeña caja que guardaba en el
lugar más alto del ropero que también compartía con su prima, pero de ella solo
eran los dos últimos cajones del lado derecho y todo lo demás de Duo ya que él
tenía muchas más pertenencias producto no solo de lo que había comprado con lo
que ganaba en su empleo de fines de semana sino también por todos aquellos
regalos que anteriormente había recibido de sus pretendientes
Al siguiente día en la escuela a la hora del receso Heero, Duo y
Quatre como siempre se reunían atrás de los salones para conversar y comer el
almuerzo, Quatre se encontraba sentado entre las piernas de Heero mientras éste
se encontraba recargado en un árbol mientras que Duo estaba sentado frente a
los dos
Duo. Quatre, Heero me contó que tú y Trowa son muy buenos amigos
Quatre. Sí, somos muy amigos ¿ya conociste a Trowa? ¿verdad que es
mono?
Duo. Sí, lo conocí el otro día que fui a casa de Heero, de hecho hasta
nos besamos
Heero. Mnh...
Quatre. ¿Ah... sí?
Duo. Sí, y confieso que me encantaría ser su novio
Quatre. Pero se acaban de conocer
Duo. ¿Y? ¿no se puede? ¿En qué mundo de princesitas vives? Hoy en día
si te quieres acostar con alguien el mismo día que lo conociste está bien, me
parece perfecto
Tanto Quatre como Heero miran a Duo no creyendo que estuvieran
escuchando aquello, sobre todo porque Duo parecía totalmente tranquilo y seguro
de sus palabras, el rubio sobre todo lo veía con extrañeza, a veces Duo podía
parecer demasiado frívolo y eso era algo que a él no le agradaba
Quatre. Si eso piensas...
Duo. Si ¿tiene algo de malo?
Quatre. No, cada quien sabe lo que hace
Duo. Ay, no me vayas a salir con que eres virgen, que aburrido
Heero. Creo que mejor dejamos de hablar de esto
Duo. Ya salió el peine... no se han acostado aún
Heero. ¡Duo!
Los comentarios de Duo hacen sentir mal a Quatre quien enseguida baja
su mirada, Heero estaba enojado por los comentarios de su amigo y en cambio él
sonreía hipócritamente, el rubio se separa de Heero y se pone de pie aún con la
mirada baja y dándoles la espalda a ambos chicos, los mechones de cabello de su
frente le alcanzaban a cubrir el rostro, se había deprimido con los comentarios
de Duo pero aun así sonreía
Quatre. ¿Saben?... recordé que tengo cosas que hacer, nos vemos
El rubio se va corriendo no dándole tiempo a Heero de detenerlo, el
chico de ojos cobalto se queda sentado donde mismo con una expresión de
preocupación en el rostro y en cambio Duo sonreía más ampliamente, enseguida
Heero voltea con Duo y lo mira muy fríamente
Heero. ¿Por qué dices esas cosas?
Duo. Que sensible resultó Quatre jijiji
Heero. Piensa antes de hablar
Duo. ¿Estás enojado conmigo?
Heero. Sí, no tenías por qué decir todas esas cosas
Duo. Deberían hacerlo y ya... el sexo es maravilloso
Heero. ... ¿Quién eres en realidad?
Heero muy enojado intenta ponerse de pie pero enseguida es detenido
por Duo, el trenzado se había lanzado a los brazos de Heero antes de que éste
se pusiera de pie y de esa forma lo hace acostarse y él subiéndose sobre su
cuerpo, Heero estaba con los ojos totalmente abiertos por la sorpresa, con el
cuerpo de Duo sobre el suyo, la cabeza del trenzado estaba situada a la altura
del oído del chico de ojos cobalto
Duo. Hazlo tuyo... lo deseas
Le susurra a su oído haciendo que Heero abra los ojos aún más de ser
posible y enseguida se baja de él volviendo a sentarse donde estaba antes,
Heero permanece en la misma posición durante varios segundos hasta que recobra
los sentidos y se sienta también observando fijamente a Duo quien aún sonreía
Duo. No me mires así
Heero. ¿Por qué me dijiste eso?
Duo. Él se muere por hacerlo, se le nota en los ojos, así que si no
eres tú puede ser alguien más, alguien como... Trowa
Totalmente molesto Heero se pone de pie y observa a Duo muy enfadado
Heero. ¡Cállate!
Duo. Sabes que es cierto... él también lo desea, solo se hace tonto
Heero. No es verdad
Duo. Claro que sí, Quatre desea a Trowa tanto como tu hermano lo desea
a él
Heero. ¿Por qué me dices esas cosas? ¿no se supone que eres mi amigo?
Duo borra un poco su sonrisa y poniéndose de pie se coloca frente a
frente con Heero y lo mira directamente a los ojos mientras se acerca
peligrosamente a él
Duo. Porque lo soy te lo digo ¿dejarás que se vaya con él? Quatre es
tuyo, solo tuyo
Heero. Pero...
Duo. Sht, basta, reconoce la realidad
El trenzado exhala un poco de aire en los labios de Heero y
acariciándolos después se aleja de él recuperando totalmente su sonrisa, en
cambio miles de dudas surgían en la cabeza de Heero, estaba confundido no solo
por lo que le había dicho su amigo sino también por la forma en la que había
actuado... por la tarde Duo llama a Quatre a su celular para que le diese la
dirección de su casa ya que quería ir a visitarlo y hablar con él, el rubio aún
no olvidaba lo que había dicho el trenzado a la hora del receso pero no estaba
enojado con él así que sin pensarlo le da la dirección de su casa, Duo llega en
veinte minutos siendo recibido enseguida por el rubio quien lo hace pasar hasta
su cuarto
Duo. Tu casa está preciosa ¿eres rico?
Quatre. Algo así, mi padre tiene una cadena de restaurantes que se
dedica a la comida de origen Árabe así que nos va bien económicamente
Duo. ¿Y por qué comida árabe?
Quatre. Mi abuelo era árabe, sus demás descendientes somos de aquí
Duo. Interesante
El trenzado se paseaba de un lado a otro por la habitación de Quatre,
era amplia y muy bonita, tenía pequeños detalles que eran dignos de admirarse,
además tenía una terraza muy agradable que contaba con una amplia mesa y sillas
para cuando se quisiera salir a comer un refrigerio, además en el baño había un
amplio y bonito jacuzzi y al fondo de la habitación había un vestidor con
varios roperos llenos de ropa de marca y zapatos de buenas colecciones, Duo
estaba encantado con la habitación de Quatre y más con el enorme guardarropa
del chico
Duo. Que precioso está este abrigo
Quatre. Es de Casimir, si te gusta tanto te lo puedes llevar
Duo. ¡¿En serio?!
Quatre. Claro, tengo varios
Duo. Gracias
El chico de ojos violetas estaba más que encantando, nunca antes había
tenido algo tan caro y se sentía más que feliz, el rubio lo veía y sonreía, le
gustaba hacer feliz a las personas, pero enseguida recuerda lo que Duo había
dicho durante el receso y enseguida se enseria, Duo lo mira de reojo y se
voltea hacia él
Duo. ¿Qué tienes? Si no querías no me lo hubieras dado
Quatre. No es eso, es que...
Duo. No me vas a salir con que es por lo que dije en la mañana ¿o sí?
Quatre. La verdad sí
Duo. A ver, siéntate
Duo toma a Quatre de las manos y lo lleva hasta la cama haciendo que
tome asiento mientras él se sienta en la silla que se encontraba frente al
enorme tocador que Quatre tenía en su cuarto mientras lo observa fijamente, en
cambio Quatre lo veía con dificultad y con el rostro totalmente sonrojado
Quatre. Es que tú eres muy liberal pero yo no soy así
Duo. No es verdad, es que eres demasiado tímido ¿por qué no lo quieres
hacer?
Quatre. Me da miedo
Duo. ¿Miedo de qué?... dime una cosa ¿te has masturbado?
Quatre. ¿Por qué me preguntas algo tan sucio?
Duo. No es sucio, contéstame
Quatre. ... Sí (a punto de hervir)
Duo. Pues imagina que es así pero diez veces más placentero
Quatre. Pero no se trata solo de placer
Duo. ¿No? claro que sí ¿o a poco crees que Heero lo va a hacer solo
"porque te quiere"?
Quatre. ¿Por qué lo dices así?
Duo. No seas tonto, es obvio que solo será sexo, eso de hacer el amor
no existe
El rubio estaba muy confundido por las cosas que Duo le decía, pero él
teniendo tanta experiencia como la que parecía algo tenía que ser cierto
Quatre. ¿Entonces debo tener sexo con Heero solo por placer?
Duo. No digo que no lo ames pero el sexo es eso, solo sexo, no hay más
Quatre. No me gusta lo que dices, dos personas pueden hacer el amor,
no todo tiene que ver con el placer y el morbo
Duo. Que infantil eres, pero allá tú
Quatre. ... ¿Entonces qué hago?
Duo. Haz lo que quieras, ya no me molestaré en aconsejarte, pero si no
quieres tener simple sexo no lo tengas, aunque con Heero es todo lo que
hallarás
Quatre. ¿Pero por qué?
Duo. Porque así es él y la mayoría de los hombres, y cuando por fin
tengan sexo muy posiblemente te botará hasta que encuentre juguete nuevo
Quatre sentía ganas de llorar con las palabras de Duo, eran dichas con
frialdad pero parecían ciertas, tan ciertas que le dolía el saber que Heero
solo lo quería por sexo, pero si lo pensaba bien hasta ese momento el único que
había hablado de los dos sobre querer tener sexo ese era Heero, además ya tenía
la experiencia de lo que había sucedido en la habitación del chico estoico el
día que se había quedado a ver películas en su casa... Duo ante la confusión y
tristeza de Quatre sonreía ampliamente, era muy divertido jugar con sus
pensamientos, debía convencer a Quatre inconscientemente de nunca querer tener
sexo con Heero, por eso le decía tantas mentiras sobre el chico estoico
Dos días después en casa de Heero, éste se encontraba en uno de sus
partidos de fútbol en el cual se iba a dar a conocer si el equipo de la escuela
de Heero pasaría o no a la competencia ínter escolar que se hacía cada año, en
dicho partido se encontraban Quatre y Reelena apoyando a Heero, en cambio Trowa
se había quedado en casa ya que a él no le gustaba el fútbol, a él le gustaba
el baloncesto el cual jugaba cuando era estudiante de Preparatoria... Duo no
había asistido a dicho partido porque en cambio va a casa de los Peacecraft Yuy
a visitar a Trowa, él le abre y sorprendiéndose de su visita muy amablemente lo
hace pasar a su habitación, estando ambos de pie frente a frente, Trowa no se
veía muy contento
Trowa. Te olvidaste de mí, hace días que no sé de ti
Duo. Perdona, estaba ocupado, tengo otros asuntos ¿sabes?
Trowa. Te he extrañado
Duo. Y yo a ti
Trowa. Lo del otro día fue... genial
Duo. ¿Te gustó?
Trowa. Como no tienes idea
Duo. No, ni idea tienes tú de lo que soy capaz de hacer, soy
extremadamente bueno en aspectos sexuales, eso te lo puedo demostrar
Trowa estaba fascinado con lo que Duo decía, jamás se había sentido
tan poseído por alguien, pero Duo tenía lo suficiente y más para alimentar la
pasión de cualquier persona, incluso la de Trowa quien era muy pacífico y
sereno, pero todo tenía un límite y Duo era alguien que podía hacer que
cualquiera sobrepasara los límites... el ojiverde se acerca salvajemente y
besando a Duo con pasión lo abraza mientras lo dirige hacia la cama, Duo lo
besaba también con pasión mientras sonreía maliciosamente, tenía a Trowa bajo
su poder, el chico de ojos verdes intenta desabrochar el pantalón a Duo pero él
rápidamente lo detiene, ambos se miran a los ojos, sus respiraciones totalmente
agitadas y Trowa ya excitado
Duo. Aún no... aún no puedes poseerme
Trowa. ¿Por qué?
Duo. Hasta que lo saques de tu mente
Trowa. ¿A quién?
Duo. A Quatre
Trowa queda helado ante las palabras de Duo y enseguida se levanta de
él sentándose sobre la cama, Duo también se levanta pero quedando hincado atrás
de Trowa mientras sonríe a más no poder, le gustaba mucho jugar con las mentes
de las personas y retorcerlas de ser posible, de esa forma distorsionaba
totalmente sus formas de pensar
Trowa. ¿Cómo lo sabes?
Duo. Heero me lo contó
Trowa. ¿Qué? ¿él lo sabe?
Duo. Claro que sí, desde que comenzó a salir con él, por eso está con
Quatre, porque no quiere que tú lo tengas, solo es para hacerte daño
Trowa. No es verdad, Heero sería incapaz
Duo. Claro que no, es muy capaz
Trowa se queda pensando mientras que Duo se acerca más al ojiverde y
recarga su pecho contra la espalda del mayor de los hermanos Peacecraft Yuy y a
la vez apoya su cabeza en el hueco entre el cuello y el hombro derecho de
Trowa, con su boca a la altura de la oreja del ojiverde comienza a susurrarle
sensualmente
Duo. Y pronto lo hará suyo, lo poseerá, serán uno solo y entonces...
entonces Quatre jamás será para ti porque él será de Heero completamente... no
habrá lugar para ti
Trowa. Pero...
Duo. Sht sht, calma... siempre hay una solución, Quatre debe ser tuyo,
tú si lo amas, no como Heero que solo quiere que se acueste con él
Trowa. Es... verdad
Totalmente complacido Duo se separa del chico y se baja de la cama mientras
observa fijamente a Trowa quien veía hacia el suelo con la mirada perdida,
Quatre estaba en las garras de su hermano y él debía hacer algo, Heero lo había
desilusionado, había comenzado a andar con Quatre solo para darle en la torre a
él, jamás lo hubiera creído de su propio hermano ¿pero cómo no se había dado
cuenta antes? Si todo parecía encajar perfectamente, como el hecho de que Heero
insistiera en que salieran en parejas cuando Trowa tenía pareja, claro, ahora
que sabía la verdad sabía que eso era porque deseaba que los viera juntos y se
sintiera triste, o como Heero se enojaba porque él se retiraba a su habitación
cuando llevaba a Quatre a la casa, era porque quería que estuviera ahí y se
diera cuenta que Quatre nunca sería para él porque estaba enamorado de Heero,
su hermano sí que era perverso y él nunca se había dado cuenta, pero no iba a
dejar que las cosas siguieran así, haría a un lado a Heero y él se quedaría con
Quatre para cuidarlo y protegerlo como se debía, y no le iba a importar que métodos
usar
Continuará...
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