miércoles, 21 de octubre de 2015

Fijación

Capítulo 6. Corazón negro (segunda parte)



En cuanto la noticia había llegado a sus oídos Trowa había corrido a los brazos de Duo para consolarle, había conocido a Hilde y le había parecido una chica muy simpática, seguramente su novio debía de estarla pasando muy mal, era justo que él siendo su novio fuera a visitarle y consolarle pero para su sorpresa Duo aunque tenía varias faltas en la escuela en su casa estaba como si nada, alivianado, como si la muerte de la chica hubiera sido hace mucho tiempo, aquello tenía a Trowa con una gran duda pero mejor era no mover el asunto, mejor era dejar que Duo afrontara la muerte de su prima como mejor le pareciera, pero eso no iba a impedir que pasara todo el día a su lado, cosa que a Duo no agradaba porque Heero había quedado de ir a visitarle pero al enterarse que Trowa estaría ahí metido en su casa todo el día le había avisado al chico ojiazul para que no hiciera acto de presencia, mejor era aceptar que iba a estar toda la larga tarde con Trowa puesto que tía Noin tampoco se encontraba...

Trowa. ¿Quieres que te traiga otro té?

Duo. No mi amor, estoy bien

Trowa. ¿Alguna otra cosa de la cocina?

Duo. No, gracias

Trowa. Yo sí quiero té, ahora regreso

Trowa sonríe a Duo y viceversa, el ojiverde se para y antes de irse a la cocina se agacha ligeramente para besar los labios de Duo, el trenzado le pide que no tarde porque lo extrañara y entonces Trowa se retira a la cocina con una sonrisa mientras que Duo tuerce los ojos en señal de fastidio, Trowa llevaba ahí más de 6 horas y ya estaba harto de su presencia, de por sí estar con él como su pareja estando lejos de Heero era un martirio y ahora tenerlo ahí en casa a su lado tanto tiempo resultaba de verdad aberrante, pero si quería que su plan saliera a la perfección debía de seguir fingiendo...

A los pocos minutos llega Trowa con su té en la mano y se sienta en el sillón junto a Duo, se encontraban viendo un programa de televisión, a Trowa le resultaba un programa muy tonto y para Duo era el pretexto perfecto para mantener a Trowa callado y no sentir tanto su presencia, la verdad era que ese programa tampoco le agradaba, lamentablemente éste se termina y su pretexto había terminado por lo que Trowa aprovecha esos espacios breves de silencio y abraza tiernamente a Duo después de dejar su tasa de té sobre la mesa de centro, el trenzado finge una sonrisa y también abraza a Trowa

El ojiverde se recarga en el respaldo del sillón soltando a Duo solo de un brazo para que su novio pudiera recargar su cabeza sobre su pecho y entonces nuevamente lo abraza con ambos brazos, Trowa sube sus pies al otro extremo del sillón quedando Duo acostado sobre él, el ojiverde apaga la televisión y besa la cabeza de Duo quien se sentía asfixiado por ese abrazo, ni modo, lo que tenía que hacer para obtener lo que deseaba, al menos Trowa tenía toda la tarde sin besarlo, apenas si le daba ligeros besos en los labios pero ninguno como esos besos apasionados que ambos acostumbraban, la verdad era que Trowa no planeaba estar con Duo mucho tiempo ya que Quatre esperaba por él, pero según el mayor de los hermanos Peacecraft Yuy su novio debía tener mucho confort por aquella resiente muerte

Trowa. Duo ¿seguro que estas bien?

Duo. Ya te dije que sí, lo de Hilde fue algo duro pero hay que seguir viviendo

Trowa. Eso es verdad, cuando mamá murió...

Duo. Trowa, no hablemos de eso ¿sí? No es agradable

Trowa se sorprende por aquella respuesta, creía que a Duo le iba a interesar que compartieran ese tipo de sentimientos, después de todo era su pareja pero debía de tener más tacto, Hilde acababa de morir y él quería hablarle de muerte al trenzado, seguro era algo muy imprudente de su parte y había hecho sentir mal a Duo, pero la verdad era que al chico no le interesaba para nada ese tema, los sentimientos de Trowa eran algo aburridos y a él no le importaban, mejor tema iba a ser Quatre, si, debía de hacer que Trowa olvidara al chico y se enamorara de él, seguramente iba a ser muy divertido cuando el ojiverde se enterara que Duo y Heero se amaban y él no era más que cero a la izquierda porque iba a estar profundamente enamorado del trenzado y él de su hermano, si Quatre lo hiciera feliz aquel juego no iba a tener sentido, debía hacer que Trowa y Quatre se odiaran, y que además Quatre se enamorara perdidamente de Heero y Trowa de Duo, sí, eso seguramente iba a tener resultados muy divertidos así que no se hace esperar y pregunta a su novio por Quatre, el ojiverde se sobresalta un poco al escuchar el nombre del rubio y se queda sin habla unos momentos

Duo. ¿Te comieron la lengua los ratones o qué?

Trowa. No, es que... no, no sé nada de él

Duo. No ha venido a visitarme, es mal amigo

Trowa. No digas eso, seguro vendrá pronto

Duo. No lo creo, Quatre ha cambiado mucho

Aquellas palabras hacen que Trowa se extrañe, Quatre le parecía el mismo chico lindo de siempre ¿por qué Duo decía esas cosas? Seguro Quatre le había contado algo que a él no y por eso el trenzado decía esas cosas así que no se hace esperar y le pregunta a Duo el porqué de aquel comentario, Duo guarda silencio unos momentos con él fin de darle más dramatismo a la explicación y entonces se gira ligeramente para ver a Trowa a los ojos al contarle, Trowa mira atento a Duo en la espera de su explicación

Duo. Es que no sé, siento como que ha cambiado desde que... ya sabes, tuvo relaciones con tu hermano

Trowa. ¿En qué sentido?

Duo. Tu sabes que él siempre ha sido tímido y esas cosas pero desde que lo hizo con Heero se ha comportado diferente

Trowa. No te entiendo

El ojiverde miraba más atento a Duo poniendo detalle de todas las expresiones del chico y también de todas las palabras pero no lograba entenderlo del todo, el trenzado se levanta del cuerpo de Trowa y se sienta en el sillón mientras que el ojiverde seguía sin perder detalle

Duo. Primero me contó todo lo que hicieron, como lo hicieron, ya sabes, hasta el más mínimo detalle, yo jamás pensé que el hiciera esas cosas

Trowa. ¿Todo?

Duo. Paso por paso, pero eso no es lo extraño, lo raro es esa mirada suya, como si el sexo fuera tan importante y...

Trowa. Espera...

La explicación de Duo no convence a Trowa y antes de que el trenzado continúe decide frenar esa situación, por primera vez dudaba de las palabras de Duo, y es que conocía mucho a Quatre y también lo amaba demasiado como para creerlo, seguro estaba exagerando las cosas

Duo. ¿Qué pasa?

Trowa. Perdóname pero no te creo

Duo. ¿No? ¿crees que soy mentiroso y además tonto?

Trowa. Yo no dije eso

Duo. Trowa, mírame a los ojos, no miento

Trowa. No no, yo no...

Enojado porque no le cree Duo se pone de pie y mira a Trowa duramente a los ojos mientras que el ojiverde tenía los ojos más desorbitados que nada, estaba confundido

Duo. Trowa, mírame... yo sé lo que sientes y entiendo que no me creas pero es la verdad, no hay peor ciego que aquel que no quiere ver y además, yo he notado como te mira

Las últimas palabras de Duo desconciertan a Trowa y lo voltea a ver a los ojos, el trenzado se hinca frente a él y apoya sus manos sobre las rodillas de Trowa sin despegarle los ojos de encima, el ojiverde mira atento a Duo y se queda callado unos segundos

Duo. Trowa, tú me quieres ¿verdad?

Trowa. Claro que sí

Duo. Y lo amas a él pero jamás me harías daño ¿verdad?

Trowa. No ¿por qué?

Duo. Yo sé que para ti resultaría muy hermoso que él te mirara con amor y no con lujuria como lo hace pero jamás me engañarías ¿verdad?... no lo soportaría

La mirada de Duo conmueve mucho a Trowa y se queda completamente callado ante la pregunta respondiendo tan solo con una negación de cabeza logrando la sonrisa de Duo que se levanta para sentarse nuevamente al lado de Trowa a quien abraza con ternura mientras sonríe cínicamente, le encantaba esa cara llena de preocupación que ponía Trowa, seguramente el chico ya le había puesto el cuerno y por eso no le había contestado con palabras pero esa conversación le serviría muy bien para que Trowa comenzara a dudar del rubio y comenzara a pensar en él, aunque sea por culpa, al menos ya era ganancia

Trowa. Duo, creo que debo irme

Duo. ¿Tan pronto?

Trowa. Sí, debo estar temprano en casa

Duo. Trowa, antes de que te vayas quiero que sepas que te quiero mucho

Trowa. ¿Eh?

Duo. Estos días he descubierto lo importante que eres para mí, ya no tienes por qué seguir sintiéndote amenazado por Heero, después de todo él quiere tanto a Quatre y él también que... ya podemos ser felices

No soportando más las palabras de Duo el ojiverde se da media vuelta sin siquiera voltear atrás o despedirse de su novio, sentía una fuerte opresión en el pecho, el trenzado tenía razón en muchas cosas aunque jamás se hubiera imaginado que Duo ya comenzaba a quererlo y que se había olvidado de Heero, eso le daba un giro tremendo a sus pensamientos, necesitaba estar solo y pensar...

Cuando Trowa se va Duo se ríe a carcajadas como nunca, ahora sí que su plan daba grandes avances, era muy pronto para cantar victoria y decir que ya había destruido lo que el ojiverde sentía por el rubio pero al menos ya había logrado que la espinita de la duda entrara por la cabeza dura de Trowa así que muy contento sube a su habitación, abre la puerta pero antes de prender la luz ve como una sombra que pasa rápido y se asusta prendiendo la luz enseguida sintiendo al entrar de lleno al cuarto un pequeño escalofrío pero sin tomarle mucha importancia cierra la puerta y al mirar el espejo ve claramente como Hilde lo mira fijamente a través del reflejo como si estuviera atrás de él, la imagen estaba completamente cubierta de sangre y rápidamente Duo grita volteando hacia atrás pero no había nada y entonces nuevamente voltea hacia el espejo encontrándose nuevamente con esa imagen haciendo que todo su cuerpo comience a temblar y gritando se quita un zapato para arrojarlo contra el espejo haciéndolo romperse una gran parte mientras él se agacha quedando de rodillas comenzando a llorar

Duo. Déjame, déjame en paz

La atormentada mente de Duo escucha la risa de Hilde, como si se estuviera burlando de su patético miedo y él se tapa con fuerza las orejas con tal de no escucharle pero aquella risa en su mente no se calla haciéndose cada vez más fuerte e insoportable haciendo que Duo desesperado se ponga de pie y se dirija al mueble con espejo comenzando a tirar todo al suelo sin dejar de llorar con notable nerviosismo

Duo. ¡Vete de aquí!... ¡estas muerta, estas muerta, estas muerta!

Por más que Duo gritara o tirara cosas aquella risa no se borra de su mente, Noin que iba llegando a la casa escucha gritos y sube apresurada a la habitación de su sobrino entrando enseguida viendo como todo estaba tirado y como Duo caminaba por toda la habitación con los ojos cerrados murmurando cosas ininteligibles, la mujer se asusta y se acerca a Duo tratando de detenerlo pero le resulta imposible por lo que comienza a hablarle con el tono de voz más alto pero Duo continúa ensimismado a pesar de eso, Noin desesperada se aleja hacia el baño y con la tapadera del shampoo agarra agua fría y nuevamente entra en la habitación aventándole el agua a Duo en el rostro haciéndolo que se detenga y abra los ojos viendo a su tía frente a él, ambos se miran unos segundos y Duo se avienta a los brazos de su tía llorando nuevamente

Duo. Esta aquí tía, ella está aquí

Noin. No mi amor, Hilde está muerta

Duo. No, yo la vi, estaba aquí... yo la vi

Noin. Ya, tranquilo... ven

Noin encamina a su sobrino hacia la salida del cuarto y apaga la luz de la habitación llevándose a Duo al suyo acostándolo enseguida en la cama

Duo. Te juro que la vi

Noin. Mañana hablamos Duo, descansa

Duo. Pero...

Noin. Tranquilo, no te alteres

Aún con lágrimas en el rostro y sudando Duo se acuesta completamente y cierra los ojos quedándose casi enseguida dormido mientras Noin lo mira unos segundos antes de comenzar a llorar, había perdido a su marido hace años, su única hija acababa de morir y ahora su sobrino atravesaba una severa crisis, nunca lo había visto así de alterado, cuando era niño solía llorar mucho por sus padres, después de la muerte de Zechs siempre despertaba con horribles pesadillas, después lo de Trant le había traído cambios drásticos de personalidad y ahora después de tantos años tenía pesadillas nuevamente y ahora hasta alucinaciones tenía, por fin se daba cuenta de que su sobrino no estaba muy bien del todo, y eso que ignoraba que Duo nunca había dejado de tener pesadillas porque Hilde siempre lo había mantenido en secreto...

A la mañana siguiente Noin tenía preparado el desayuno desde temprano y para cuando Duo se despierta todo estaba hecho, tampoco iría a la escuela, se sentía sin ánimos aunque ya se le veía un poco mejor, los dos habitantes de la casa desayunan tranquilamente pero cuando terminan Noin decide tomar un tema que a Duo desagrada al instante

Duo. Debes estar bromeando

Noin. No es broma, necesitas ayuda Duo

Duo. No voy a ir a un loquero

Noin. No es loquero, es Psicólogo, esto de Hilde te ha afectado

Duo. Tía, yo la vi

Noin. Crees que la viste

Duo. No, yo la vi, estaba ahí, se reía de mí... ella no se ha ido tía

Noin. No discutiré contigo esto Duo, irás desde mañana por la tarde, mañana reanudas también tus clases

Duo. Yo no...

Noin. Duo, debes superarlo

El trenzado deja de discutir y agacha su cabeza, Noin lo toma de las manos y le sonríe pero Duo la ignora completamente quitando sus manos y levantándose del asiento para retirarse a su habitación la cual seguía igual que como la había dejado anoche y ahí se encierra, la mujer suspira pesadamente y también se levanta para retirar los platos, convencer a Duo iba a estar casi en Chino, conocía a su sobrino y sabía que era por demás terco...

Al terminar las clases Quatre decide que ya es hora de visitar a Duo, quería que el chico tuviera su espacio pero ya habían pasado muchos días y seguro que ya estaba mucho mejor pero antes de eso debía cancelar su cita con Heero por lo que decide antes pasarse a casa de su novio, el ojiazul había tenido práctica de fútbol y había salido temprano, por eso no se habían visto en la escuela así que el rubio va a casa de Heero y estando los dos en la habitación del chico Quatre le avisa invitándolo a ir con él pero se niega, estando cerca de Duo iba a ser difícil ocultar sus miradas y aún era pronto para que Quatre supiera que él se había enamorado de otro

Quatre. Entonces iré yo solo

Heero. Me lo saludas

Quatre. Sí

La pareja se acerca a la puerta y Heero la abre para dejar pasar a Quatre quien sonriendo se acerca a él y le rodea el rostro con ambas manos acercándose a él para besarlo siendo correspondido besándose los dos al marco de la puerta, Trowa en ese momento sale de su habitación y los ve frunciendo enseguida el ceño, los celos le hacían sentir una fuerte punzada en el estómago y entonces entra nuevamente a su habitación olvidándose por completo de que iba a bajar a la cocina por agua, Quatre sonríe sobre los labios de Heero cuando dejan de besarse y al mismo tiempo abren sus ojos separándose casi enseguida

Quatre. Bien, nos vemos mañana

Heero. Sí

Quatre. Heero... te quiero

Heero. Yo también

Quatre sonríe ampliamente ante la respuesta mientras que Heero permanece serio, era verdad que quería a su novio pero a quien realmente amaba era a Duo, el rubio también quería mucho a Heero pero en esos momentos se sentía muy confundido ya que también quería mucho a Trowa, aún era pronto para decidirse a pesar de que había dudado acerca de sus sentimientos por Heero pero tenía tiempo para pensar en eso...

Heero cierra la puerta de su habitación y Quatre antes de irse decide pasar a la habitación de Trowa para saludarlo y como la puerta está abierta entra sin tocar dirigiéndose enseguida hacia Trowa que está revisando el periódico porque buscaba trabajo ya que había decidido no terminar ese semestre y estudiarlo nuevamente, el rubio le da un beso en la mejilla pero Trowa continúa viendo el periódico sin prestarle atención, Quatre se da cuenta de la hostilidad y pone su mano sobre el periódico haciendo voltear a Trowa

Trowa. ¿Qué quieres?

Quatre. Dime porque me tratas así

Trowa. Fácil, me di cuenta que tú no me quieres

Quatre. ¿Cómo dices eso? ¿ya olvidaste lo de la regadera?

Trowa. Quien lo olvidó fuiste tú

Quatre. No es verdad

Trowa. Te vi besándote con Heero

Quatre. ¿Por qué es mi novio?

Trowa. Que tonto soy

Quatre. No eres tonto, eres idiota

El comentario de Quatre hace enfadar a Trowa quien avienta el periódico enojado, Quatre lo mira y sonríe burlonamente

Quatre. Que infantil eres

Trowa. Ayer en todo el día no bese a Duo ¿y sabes porque? Porque te amo

Quatre. Es diferente

Trowa. ¿Por qué?

Quatre. Tú no quieres a Duo y yo sí quiero a Heero

Trowa. ¿Cómo sabes que no lo quiero? Por algo le pedí que fuera mi novio

Quatre mira a Trowa con un gesto de tristeza en su rostro y se aleja de él saliendo enseguida de la habitación, Trowa golpea enojado la cama y maldice, Quatre se estaba comportando muy egoísta, quería tener a ambos y que los dos lo quisieran, seguramente sus sentimientos no estaban en orden dentro de su cabeza, pero debía pronto tomar una decisión porque él no podía hacerle daño a Duo y si el chico comenzaba a sentir algo verdadero por él entonces debía de corresponderle, después de todo el trenzado necesitaba mucho apoyo y amor...

El rubio un poco enojado va nuevamente a la habitación de Heero quien se sorprende cuando lo ve ya que se habían despedido no hace muchos instantes, Quatre disimulaba muy bien que estaba enojado y hasta sonreía a su novio quien lo miraba extrañado, no entendía a que había regresado

Heero. ¿Qué pasa?

Quatre. Es que de pronto me entraron una ganas enormes de estar contigo

Heero. ¿No ibas a visitar a Duo?

Quatre. Si voy a ir pero quiero otros momentos a solas con mi novio

Heero levanta una ceja ante las palabras, había un cierto tono de picardía en ellas, Quatre sonríe ampliamente y se acerca a la puerta colocándole el seguro acercándose enseguida a Heero quien le mira atento mientras que el rubio cierra los ojos y colocando ambas manos sobre el cuello de Heero comienza a besarle la oreja, bajando por el cuello y dirigiéndose a su pecho, el ojiazul se muerde el labio inferior por sentir esos cálidos labios pero recuerda que decidió tener el más mínimo contacto físico con Quatre, después de todo lo que quería era alejarlo poco a poco hasta que por fin lo dejara para estar con Duo pero esos besos eran completamente irresistibles, aun así Heero sujeta a Quatre de los hombros y lo aleja, el rubio abre sus ojos y mira fijamente a su novio

Quatre. ¿Qué pasa?

Heero. ¿Por qué de pronto actúas así?

Quatre. Eres mi novio ¿no?

Heero. Sí pero generalmente tú...

Quatre. Heero es que... ya pasaron varios días desde que tú... me hiciste el amor

Heero. Quatre, no te sientas obligado porque...

Quatre. ¿Y quién se siente obligado?

Heero. Quatre...

Quatre. Hay que hacerlo, estoy excitado

Heero. No hagas esto

Quatre. No me deseas ¿verdad? lo hicimos una vez y te decepcioné ¿cierto?

Heero. No digas eso...

Quatre. No tienes que explicarlo, soy malo en el sexo

Completamente indignado Quatre se da media vuelta y comienza a caminar hacia la puerta pero Heero se acerca a él sujetándolo del hombro para que no se vaya a ir y lo abraza fuertemente por la espalda

Quatre. Por compromiso no lo hagas

Heero. No es eso

Quatre. ¿Entonces?

Heero. Tengo que terminar mi tarea

Quatre. Será un rapidín ¿sí?

Heero. ¿Eh?

Quatre. No tenemos si quiera que quitarnos la ropa

El ojiazul se sonroja completamente, nunca había escuchado a Quatre hablar así, además era la primera vez que le pedía algo como eso, al principio él era quien insistía en lo del sexo y ahora los papeles se invertían, pero nadie llora cuando se le regala pan y Heero no es la excepción así que suelta a Quatre y le agarra la mano para dirigirlo a la cama, Quatre se sienta en ella recargándose en la cabecera y comienza a desabrochar sus pantalones bajándolos enseguida junto con su ropa interior y la quita por completo dejándose los calcetines y la camisa flexionando y abriendo enseguida las piernas, Heero se hinca en la cama frente a Quatre y se desabrocha los pantalones bajándolos ligeramente junto con su ropa interior, se acomoda entre las piernas de Quatre y comienza a acariciarse el miembro para excitarse y poder comenzar lográndolo segundos después

Heero está a punto de penetrar a Quatre pero recuerda que no se ha puesto condón e intenta agarrar uno del cajón del buró pero el rubio se lo impide, Heero nuevamente se agarra el miembro y lo direcciona hacia la entrada, Quatre se sujeta de uno de los hombros de Heero y voltea hacia abajo para ver como lentamente Heero entra en él sujetándose con fuerza de las sábanas con la otra mano al sentir que ha llegado al tope, Heero mira directamente a Quatre a la cara y enseguida el voltea mirándose los dos a los ojos con el rostro sonrojado, Heero coloca su mano derecha sobre la pierna izquierda de Quatre y comienza con las embestidas de forma lenta sin dejarse ambos de mirar a los ojos mientras gimen y jadean de forma lenta, Heero al embestir a Quatre y él al sentir las embestidas que poco a poco comienzan a acelerarse haciendo que a Quatre le cueste trabajo mantener los ojos abiertos mientras que Heero los empuña apretando un poco la pierna de Quatre para abalanzarse mejor, pronto sus gemidos traspasaban las paredes oyéndose tenuemente hacia la habitación de al lado que le pertenecía a Trowa quien enseguida reconoce los gemidos y enojado se levanta de la cama, toma una chamarra del clóset y sale de la habitación y después de la casa, estaba muy molesto, Quatre lo había hecho a propósito, después de todo lo que Duo había dicho era muy cierto, Quatre ya no era el mismo...

Pronto la otra mano de Heero encuentra ocupación masturbando con frenesí a Quatre quien desfallece de placer gimiendo con pasión, nuevamente Heero alenta las embestidas al sentirse venir dentro de Quatre gimiendo con fuerza al sentir esos brotes de semen dentro del rubio sintiendo después un tibio líquido sobre la mano mismo que limpia después con un pañuelo, ambos suspiran aliviados y satisfechos mientras sus respiraciones intentan normalizarse, Heero sale lentamente de Quatre y se sube los pantalones y la ropa interior acomodándose después la camisa que en todo momento había traído puesta, Quatre se recarga completamente en la cabecera y mira hacia el techo suspirando hondo, sí que se había descargado el coraje contra Trowa y pronto la culpa llega, había utilizado a Heero como nunca había creído que iba a utilizar a alguien y había hecho el sexo sin sentimientos, solo había sido penetración y nada más, ni siquiera había cabida para un beso o una caricia, sí que se sentía completamente sucio y Heero no se sentía mejor, hacer el sexo así nunca le había sucedido, había sido solo un acto sexual sin chiste, se sentía culpable...

El rubio agarra su ropa y se pone de pie bajándose de la cama para ponerse la ropa interior y los pantalones seguido de los zapatos, ninguno de los dos se mira a los ojos, Quatre se despide sin mirar a verlo y sale de la habitación, Heero enojado se deja caer sobre la cama y piensa en Duo, como le gustaría hacerlo suyo pero no como ese acto sexual patético, con él quería algo verdadero, algo con significado, sin duda después de eso su relación con Quatre no iba a ser la misma...

Quatre llega a la casa de Duo como había decidido anteriormente y para su sorpresa quien le abre es Trowa, el rubio se sorprende de que su cuñado esté ahí y sin saludarlo o decir algo le pasa de lado entrando a la casa, Duo sale de la cocina preguntando quien había llegado encontrándose con Quatre en la sala, los amigos se saludan muy sonrientes y Quatre le da a Duo un abrazo junto con el pésame por la muerte de su prima y Duo reclama en broma a "su amigo" por no haberlo visitado antes encontrando Quatre una excusa para salir de esa y pronto los tres se encontraban en la sala bebiendo café, Duo y Trowa sentados juntos en un sillón tomados de la mano y Quatre sentado solo en otro sillón, el trenzado siendo muy listo nota al instante la hostilidad entre Trowa y Quatre y muy sonriente se hace el disimulado disfrutando mucho de ese ambiente

Duo. ¿Quieren más café?

Trowa. Yo estoy bien

Quatre. Yo aún tengo Duo, gracias

Duo. Mnh, está bien, ahora vengo, seguro que quieren conversar un poco

El trenzado suelta su mano de la mano de Trowa y se pone de pie dirigiéndose a la cocina para ver desde ahí sin ser visto la escena tan patética entre Trowa y Quatre quienes permanecen en silencio por muchos minutos hasta que Trowa aprovecha para reclamar a Quatre el haberlo hecho con Heero

Quatre. Cállate, Duo podría oírte

Trowa. No me importa, quiero que te largues y nos dejes solos

Quatre. ¿Para hacer el amor?

Trowa. Yo no soy como tú

El rubio se ofende ante el comentario del ojiverde y se pone de pie dirigiéndose a él a quien le da una fuerte bofetada por haberlo ofendido, Trowa se enoja por aquella acción mientras que Duo ríe por lo bajo atrás de la puerta, que divertido era ver a dos amantes pelearse de ese modo

Quatre. Eres un imbécil Trowa

Trowa. Y tú no te quedas atrás

Quatre. Creí que me querías

Trowa. Te amo Quatre, pero no intentaré tapar el sol con un dedo

Quatre. ¿Qué quieres decir?

Trowa. Me costó mucho trabajo creerlo pero entenderlo fue un poco más fácil, tú no me quieres, ni quieres a Heero, solo te interesas por ti, por nadie más

De los ojos de Quatre comienzan a salir lágrimas mientras escuchaba atento las palabras de Trowa, sentía una presión muy fuerte en el pecho por aquellas palabras tan hirientes y sintiéndose completamente derrotado comienza a llorar, Trowa se pone de pie del sillón y se acerca a Quatre intentando abrazarlo pero él lo avienta completamente furioso

Quatre. ¿Cómo te atreves? Los quiero a los dos, demasiado... pero tú pareces no entender

Trowa. ¿Entender qué? ¿qué me quieres pero prefieres estar con mi hermano?

Quatre. Eso no es verdad

Trowa. ¿Entonces por qué no lo dejas? Dejaré a Duo, dejaría a cualquiera por ti ¿no lo entiendes? Te amo

Quatre. Entiéndeme tú, no sé de quién estoy enamorado, estoy muy confundido

Trowa. Tan solo recuerda aquella tarde en mi habitación, recuérdalo

Quatre. Lo recuerdo, pero también recuerdo mi primera vez y no fue contigo

El rubio baja su mirada ante la expresión de tristeza de Trowa por esas palabras y camina hacia la puerta de la casa pasándole de lado al ojiverde sin siquiera mirarlo o hablarle y Trowa no intenta detenerlo, tan solo empuña sus ojos y cuando los abre una lágrima rueda por su mejilla, lo que le había dicho Quatre le había herido profundamente, el chico no tenía claros sus sentimientos y el solo pensar que se pudiera decidir por su hermano le hacía sentir una tristeza indescriptible, quería mucho a Heero, pero Quatre para él era lo más importante en el mundo, en cambio Duo se aguantaba las ganas de reír, nunca los había visto pelear y debía reconocer que era muy divertido, lo único que había detestado era saber que Heero y el rubio lo habían vuelto a hacer y que alguien fuera capaz de preferir a otra persona que no fuera él, era la primera vez que alguien prefería a la otra persona entando él entre esas dos, sin duda Trowa era demasiado ciego y tonto, preferir a Quatre por encima de él era algo sumamente estúpido, pero eso a él no le importaba, su plan iba de maravilla, pronto Trowa y Quatre iban a odiarse y el rubio iba a preferir a Heero por encima de Trowa pero él ya tenía a Heero de su lado por lo que el amor de Quatre no iba a ser correspondido así que el rubio de pacotilla se iba a quedar solo como un perro, eso era bastante agradable...

Duo sale de la cocina haciéndose el preocupado porque no ve a Quatre en la sala a pesar de que sabía que el rubio se había ido, el ojiverde le dice a Duo una excusa por Quatre y cuando menos se lo espera Trowa le rodea el pecho con ambos brazos abrazándolo afectuosamente por la espalda, Duo abre sus ojos con mucha sorpresa

Duo. ¿Qué... pasa?

Trowa. No sabes cuánto te necesito

Duo tuerce los ojos cuando escucha las palabras de Trowa y después siente un fuerte escalofrío cuando el ojiverde comienza a besarle el cuello, Duo se pone muy nervioso por aquellos besos y después por aquellas manos que comienzan a acariciarle el pecho por debajo de la camisa, las manos de Duo se mueven temblorosas hacia los brazos de Trowa y lo detiene, el ojiverde abre los ojos y suelta a Duo volteándose el trenzado enseguida quedando los dos frente a frente, Trowa agarra ambas manos de Duo mientras lo mira a los ojos profundamente

Duo. No Trowa

Trowa. Te quiero Duo

Duo. Pero...

Sin darle tiempo a terminar Trowa se acerca más a Duo y sin soltarle las manos lo besa en los labios cerrando los ojos, Duo mantiene los suyos abiertos mientras Trowa le besa y poco a poco él le corresponde el beso cerrando también los suyos, el ojiverde comienza a soltarle las manos a Duo para tomar su cuerpo entre sus brazos, el trenzado abre sus ojos cuando el beso comienza a subir de tono e intenta apartar a Trowa de su cuerpo colocando ambas manos sobre el pecho de su novio intentando darle pequeños empujones pero Trowa no desiste separándose de los labios de Duo solo cuando el aire comienza a faltar

Trowa. ¿Cuál es tu habitación?

Totalmente callado los labios de Duo comienzan a temblar, en los ojos de Trowa se veía el deseo, el chico esperaba que ese día ellos intimaran por primera vez y en su semblante se notaba aquella determinación de que no iba a aceptar un no por respuesta, Duo lo sabía, estaba completamente consciente de aquello y sabía que si le decía a Trowa que no todo su plan se vendría abajo, él ya le había dicho al chico que estaba comenzando a quererlo y sabía muy bien que la prueba más fehaciente de amor era esa

Duo. Aquella

El trenzado señala la habitación que anteriormente compartía con Hilde y voltea a ver a Trowa quien le agarra la mano y comienza a caminar, Duo duda unos segundos y le sigue comenzando ambos a subir las escaleras lentamente, el trenzado iba solo un escalón atrás de Trowa tomados aún de las manos, la mano de Duo temblaba completamente, él no quería hacerlo, no quería que su primera vez fuera con Trowa, él quería que fuera con Heero, porque él se había guardado para la persona de la que estuviera enamorado, Trant lo había rechazado pero ahora era distinto, Heero también lo amaba, Trowa solo quería sexo de él y además él no lo amaba, ni siquiera lo quería o estimaba pero ya no había marcha atrás, unos cuantos centímetros los separaban de la habitación, Trowa abre y entra primero encendiendo la luz, Duo pasa y el ojiverde cierra la puerta, ambos se miran a los ojos y Trowa se acerca a él abrazándolo

Trowa. Tu sí me quieres ¿verdad?

Duo. Si Trowa, te quiero mucho

Trowa. ¿Mi hermano ya no te gusta?

Duo. No, solo existes tú para mí, nadie más

Trowa sonríe ampliamente ante la declaración y suelta a Duo observándolo a los ojos y convenciéndose de aquellas palabras por una dulce sonrisa que el trenzado le regala aunque sin saberlo ésta era fingida, Trowa agarra a Duo de los hombros y se acerca comenzando ambos a besarse mientras caminan hacia la pared donde Trowa recarga a Duo y suelta sus labios comenzando a besarle el cuello, Duo voltea su cabeza a un lado y cierra con fuerza sus ojos, no sentía ninguna vibra con aquellos besos, solo sentía los labios de Trowa sobre su piel deslizándose lentamente y después sus suaves manos acariciar su pecho y su cintura, las manos de Trowa comienzan a quitarle a Duo su camiseta sacándola por la cabeza del chico y sus labios nuevamente se apoderan de los suyos mirándose después ambos a los ojos

Trowa agarra la mano de Duo y lo dirige hacia donde está la cama quitándose la camisa desabrochando uno a uno los botones que la sujetaban y de paso aprovecha para quitarse los pantalones habiéndose quitado antes los zapatos y después termina de desvestir a Duo lentamente mientras él cierra sus ojos, no quería ver cuando Trowa lo desnudara, ni siquiera quería sentir al chico tan cerca de él, oler su aroma, sentir su respiración, eran sensaciones que prefería no tenerlas ahí pero debía hacerlo si quería que su plan funcionara al 100...

Una vez acostados Trowa comienza a besar el cuello de Duo mientras desciende su mano lentamente hacia su miembro el cual sujeta con delicadeza haciendo gemir al trenzado cuando siente aquella mano, poco a poco el ojiverde desciende a besos por el pecho del trenzado hasta llegar a su entrepierna, Duo cierra sus ojos recargando pesadamente su cabeza sobre la almohada mientras que Trowa sujeta la pierna derecha de Duo con su mano izquierda y la separa un poco más mientras con la otra toma el miembro de Duo y le regala un tierno beso en la punta haciendo que Duo abra sus ojos y vea hacia el techo, miles de veces había hecho sexo oral pero nunca antes había sentido aquella sensación, pronto la lengua de Trowa exploraba hábilmente el miembro de Duo dando besos de vez en cuando, el trenzado jadeaba mientras se retorcía un poco y cerraba sus ojos agarrándose fuertemente de la sábana con ambas manos y cuando Trowa se mete su miembro a la boca comenzando con la succión Duo abre fuertemente sus ojos y arquea su cuerpo hacia delante abriendo sus ojos y mirando a Trowa mientras gime de placer apretando con más fuerza las sábanas

La sensación de llegar al límite le hace sentir un fuerte calambre en la sección abdominal y pronto su semilla estalla en la boca de Trowa cayendo nuevamente sobre la cama dejando caer la cabeza sobre la almohada mientras respira con rapidez, Trowa traga el líquido y abriendo sus ojos mira el rostro relajado de Duo y entonces sonríe soltando tanto el miembro como la pierna de Duo y nuevamente sube apoderándose de los labios del trenzado y sin soltarlos baja su mano derecha hasta la pierna izquierda de Duo y la separa, Duo frunce un poco el ceño al sentir el movimiento y él abre su otra pierna, aun besándose Trowa sujeta su miembro y lo direcciona a la entrada de Duo quien comienza a temblar nuevamente, el ojiverde siente aquel miedo y suelta los labios de Duo y sin entrar en él lo mira profundamente, Duo abre sus ojos y también lo mira

Duo. ¿Qué esperas?

Trowa. Está bien

El trenzado estaba desesperado, entre más pronto comenzara Trowa más pronto terminaría y su tormento también lo haría, sentía enormes deseos de llorar, muchas ganas de aventar a Trowa e irse corriendo pero sabía que hacer eso era un error, debía llegar hasta el final y ya, no tratar de pensar, o pensar en Heero, cualquier cosa que lo hiciera salir de la realidad era buena, pero hacerlo sería imposible sobre todo al sentir como Trowa entra lentamente por su estrecha cavidad sintiendo como comienza a dilatarse abriendo paso a un intenso dolor y pronto todo su cuerpo se estremece, la penetración era lenta, totalmente adaptada a una experiencia tan nula como la suya pero aun así era el dolor más intenso que nunca antes había sentido y desde el fondo de su garganta exhala un pequeño grito de dolor y sus brazos se aprietan a la espalda de Trowa que comienza a hacer movimientos de abajo hacia arriba mientras se apoya con sus manos en las piernas de Duo, quien aprieta con fuerza sus ojos, saliendo de las orillas de estos unas pequeñas lágrimas, Trowa también mantenía sus ojos cerrados y mientras embestía a Duo le besaba con pasión el cuello y la oreja

Los gemidos de ambos se perdían entre las cuatro paredes que los rodeaban y completamente extasiados sudaban y también respiraban con rapidez, los brazos de Duo apretando con firmeza la espalda de Trowa y sus manos arañaban la tersa piel del chico quien después quita sus manos de las piernas de Duo dirigiendo la derecha a la cadera del trenzado para no perder el ritmo y la izquierda al glúteo derecho de Duo el cual acaricia mientras que Duo cierra ambas piernas en la parte baja de la espalda de Trowa quien no pudiendo más brota su semilla dentro de Duo llenándolo completamente con su ser y ambos gimen con fuerza ante aquel profundo orgasmo, relajándose enseguida

Poco a poco Duo suelta la espalda de Trowa y él sale del chico saliendo tras su miembro un poco del líquido depositado que escurre de la cavidad de Duo, el trenzado y el ojiverde se miran a los ojos, Trowa limpia de la frente de Duo un poco de sudor y sonriéndole se agacha dándole un beso en los labios y después se baja de él posicionándose a un lado mientras mira hacia el techo, Duo se voltea hacia la pared dándole la espalda a Trowa y acostándose sobre su hombro izquierdo, el trenzado cierra sus ojos con fuerza y se evita las ganas de llorar, había perdido su virginidad con quien no quería, se había entregado a un hombre al que no solo no quería sino que ahora detestaba, ahora sentía un profundo odio hacia él, se había aprovechado de su debilidad, había poseído un cuerpo que no le pertenecía, sin duda Trowa era un ser despreciable y en cambio Trowa estaba feliz, había tenido una de sus mejores experiencias, jamás iba a olvidar aquella entrega de amor, porque para él eso era, una entrega por amor, Duo sin duda debía de quererlo mucho y sus acciones lo habían demostrado, Quatre también se había entregado a él pero era muy distinto, ahora sabía que Duo era virgen y si se había acostado con él era porque de verdad lo quería, en cambio Quatre no tanto como decía, había descubierto una parte de Duo que desconocía, sin duda ahora lo quería más...

Tras unos momentos de silencio Trowa se acerca a Duo quien todavía le daba la espalda y colocándole una mano sobre el brazo comienza a besarle tiernamente el hombro mientras Duo permanece estático e inmune a los besos, se sentía ajeno a su cuerpo, como si no estuviera ahí, su mente viajaba a otro lugar lejos de esa cama

Trowa. ¿Te gustó?

Duo. Sí, mucho

Trowa sonríe ante la respuesta y besa el cuello del chico, Duo en cambio observaba la pared con la mirada perdida mientras unas lágrimas mojaban la almohada

Trowa. Te quiero Duo, te quiero mucho

Duo. Yo también, te quiero Trowa

Trowa. Hacerte mío ha sido lo mejor que me ha pasado en mucho tiempo, dime por favor que no te arrepientes

Duo. Jamás lo haría, estuviste muy bien

Trowa. Tú también

Nuevamente Trowa comienza a besarle el hombro a Duo quien continúa con la mirada perdida hacia la pared contestando a las preguntas de Trowa tan solo por inercia, las ganas de salir corriendo se habían esfumado, era como si ya nada le importara, tan solo quería cerrar los ojos y pensar que aquello no había sucedido, ese era su escape de la realidad...

La expresión en su rostro era de total desconcierto y el color de su piel totalmente pálido, el doctor le decía con aquel papel aquello a lo que tanto le había temido, la prueba de embarazo había salido positiva y sabía muy bien quien era el padre, Wufei había sido el único hombre con el que había tenido relaciones sexuales y él único que sin duda sería el padre de aquel hijo que esperaba, lamentablemente él ahora se había convertido en un patán que seguramente negaría la paternidad, ella amaba a Wufei con todo su corazón pero él ya no era el mismo y la razón de ese cambio era completamente desconocida para ella

Aun así Relena se arma de valor y va hacia su casa encontrándose con una enorme sorpresa, en la sala estaban un par de maletas y reconoce pronto en ellas las que su padre había tomado cuando hace casi 5 meses había tenido que salir en un viaje de negocios, la chica se alegra olvidándose casi por completo de su nuevo problema y corre emocionada al jardín encontrándose a su padre conversando con Heero quien escuchaba atento las anécdotas de su padre quien al ver a Relena parada en el marco de la puerta se pone de pie y camina unos pasos hacia la chica mientras que ella con rapidez se acerca a su padre aventándose a sus brazos saliendo de sus ojos unas pequeñas lágrimas, la chica era muy mimada, tanto por Trowa como por su padre quien muy contento abrazaba a su hija

Odín. Mi pequeña ¿cómo estás?

Relena. Extrañándote mucho papi

Padre e hija se sueltan y Odín da a Relena un beso en la mejilla, Heero mira a ambos y sonríe, su hermana últimamente había estado muy triste y sabiendo que no se llevaban bien no le había preguntado nada acerca de su problema pero ahora se sentía más aliviado viéndola contenta

Odín. Ven a ver todo lo que te traje

Relena. ¡Sí, regalos!

Odín. Sí, muchos regalos para mi princesa

Heero. Por eso está tan tonta papá, la consientes mucho

Relena. Eres un sapo horrendo

Heero. Sapo tú

Odín. No comiencen

Los tres se retiran a la sala donde Odín abre una maleta exclusivamente con regalos para Relena, vestidos, zapatos, joyas y uno que otro souvenir, para Heero y Trowa también traía regalos pero más pocos, sobre todo para Trowa quien era el mayor, además de que Heero siempre había sido su consentido, durante su adolescencia Trowa le había causado muchos problemas y nunca se habían llevado muy bien...

De pie junto a la cama del trenzado estaba Trowa vistiéndose mientras que Duo continuaba en su anterior posición, sobre su hombro izquierdo y mirando la pared con la vista perdida, el ojiverde termina de vestirse y mira al trenzado mostrándose preocupado, se sienta en la cama y se acerca a él dándole un beso en la mejilla

Trowa. ¿Seguro que estás bien?

Duo. Sí, estoy bien

Trowa. No creas que porque esto pasó ya no te llamaré o...

Duo. No te preocupes, yo lo sé

Trowa. Está bien, nos vemos entonces

Duo. Adiós

Nuevamente Trowa besa la mejilla de Duo y se pone de pie saliendo del cuarto después, Duo escucha la puerta cerrarse y cierra sus ojos con fuerza mientras se agarra de la sábana comenzando a llorar amargamente, desahogándose hasta ya no poder más y con todo y dolor en su cuerpo se pone de pie y se dirige hacia el baño que está afuera de la habitación para meterse a bañar, sabía que aun así Trowa estaría dentro de él, que nada podía hacer para borrar la huella de su cuerpo pero al menos se iba a sentir un poco más limpio así que entra a la regadera y abre la llave cayendo el agua pura sobre su cuerpo y mientras se enjabona continúa llorando escuchando poco después un pequeña risa y entonces para su llanto y deja el jabón en la jabonera cerrando después las llaves del agua, Duo mira a todas partes y enojado grita

Duo. ¿Ahora qué quieres?

"Que patético eres Duo"

Duo. No es verdad

"Claro que sí lindo primito, eres patético y estúpido"

Duo. ¡Vete de aquí! No eres real

"Si lo soy"

Duo. Estas en mi cabeza, nada más

La voz deja de escucharse por completo y asustado Duo jala una toalla y se cubre, no había terminado de bañarse pero ya no quería estar ahí, sentía escalofríos, su prima estaba aún ahí atormentándolo pero él no iba a soportar eso mucho tiempo, era hora de que hiciera a su tía caso por primera vez en su vida así que decide que ir al Psicólogo era buena idea, a partir del día siguiente iba a empezar a ir...

La puerta de la casa se abre y por ella entra Trowa sorprendiéndose por completo cuando ve a su padre ahí sentado en el suelo junto con Relena que abría sus regalos muy emocionada, Odín voltea y ve a su hijo mayor y sonríe poniéndose enseguida de pie, Trowa se acerca a él y ambos se abrazan separándose casi enseguida, Odín coloca su mano derecha sobre el hombro izquierdo de su hijo y lo mira a los ojos

Odín. Confío en que has podido manejar la casa en mi ausencia

Trowa. Bienvenido padre

Odín. Dime Heero, ¿Trowa cumplió sus deberes?

Heero. No

Odín. ¿Qué?

Enojado Odín mira a Heero y después a Trowa quien miraba a su hermano con una expresión de pocos amigos mientras que Relena abandonando su anterior alegría miraba la escena calladamente

Odín. ¿Es cierto Trowa?

Trowa. No sé de qué habla Heero

Heero. ¿Ya se te olvidó que me golpeaste?

Odín. ¿Qué?

Más enojado Odín se acerca a Trowa y lo jala del cuello de la camisa mirándolo con dureza y Trowa le mantiene también la mirada a pesar de lo pesada que era

Odín. ¿Por qué?

Trowa. Ya sé que te duele que le haga daño a tu nene pero...

Odín. No me hables así Trowa

Relena. Espera papá, fue un pleito de ambos, los dos tuvieron la culpa

Odín. Son hermanos, no enemigos

Odín suelta el cuello de la camisa de Trowa y con paso cansado se sienta en uno de los sillones suspirando hondo y después voltea hacia Heero seguido de Trowa quienes a su vez lo miraban

Odín. Hacía años que no peleaban, ya no son unos niños

Heero. No quiero hablar de eso papá

Odín. Es verdad... mejor cuéntenme cómo va la escuela

Heero. Bien, logre la beca al 95

Odín. ¿De verdad? ese es mi muchacho

Ahora ya muy contento Odín se pone de pie y le echa un brazo encima a Heero quien sonriendo ligeramente mira a su padre, Heero era bastante inteligente, además pertenecía a clubes dentro de la escuela y tenía buen trabajo para ser un chico que estudiaba ya que generalmente no se les daba buenos empleos por culpa de los horarios

Odín. ¿Y Quatre? ¿sigues con él?

Heero. Sí

Odín. Invítalo mañana a cenar

Heero. Si, está bien

Odín. ¿Y tu hija? ¿todo en la escuela bien?

Relena. Sí, el otro día...

La chica comienza a platicarle a su papá como le había ido en la escuela todos esos meses de ausencia y él escuchaba alegre y atento, su hija no era muy lista pero siempre intentaba echarle ganas y eso le alegraba mientras que Trowa se muestra preocupado, seguramente seguía él de decirle a su papá sobre la escuela y tenía que decirle acerca de su expulsión, Heero lo miraba y también se preocupa, conociendo a su padre sabía que seguramente no iba a pasar por alto una situación como esa y entonces el momento temido llega y el ojiverde no tiene más remedio que decirle a su padre acerca de la expulsión de la Universidad, claro que omitiendo la verdadera causa

Odín se acerca a Trowa lentamente al escuchar la noticia y levanta su mano azotándole en la mejilla una fuerte bofetada con el lomo de la mano, haciéndolo caer al suelo con un pequeño hilo de sangre saliéndole de la boca, sus hermanos se sorprenden por aquella acción, nunca antes su padre había golpeado a alguno de ellos, Trowa se sujeta la mejilla mientras mantiene su cabeza agachada y enseguida Relena se acerca a él colocándose de cuclillas a su lado

Relena. ¡Papá!

Odín. ¿Crees que para eso trabajo? ¿de qué demonios me sirvió haberles dado educación si vas a salir con estas estupideces?

Heero. Papá, creo que...

Odín. Tú cállate Heero, y tú Trowa, no regresas a la casa hasta que recuperes tu semestre

Ante la petición de su padre Trowa empuña sus dientes manteniendo su cabeza baja mientras que Odín se retira a su recámara, Heero también se acerca a su hermano y lo ayuda a ponerse de pie, Trowa mira hacia la puerta de la recámara de su padre y frunce el ceño con furia mientras se limpia la sangre

Relena. Se le pasará Trowa, no tienes que irte

Heero. Por primera vez estoy de acuerdo con Relena, no te vayas

Sin responderles Trowa avanza subiendo las escaleras y entrando a su recámara, Heero y Relena voltean a verse y al mismo tiempo comienzan a avanzar hacia las escaleras subiéndolas y tocando a la puerta de la recámara de Trowa pero al no contestarles ellos entran observando como su hermano mete ropa que saca de su clóset a una maleta que tiene sobre la cama, Heero la cierra y mira con firmeza a su hermano

Heero. No te vas

Trowa. Hazte a un lado, además es lo que quieres ¿no?

Heero. Claro que no

Trowa. Déjame empacar

Heero. ¿Y a dónde irás idiota?

Trowa. No sé

Heero. Vamos Trowa

Trowa. Déjame tranquilo

Relena. Pero hermano...

Trowa. Lo siento nena, adiós

El ojiverde quita la mano de Heero de la maleta y metiendo una última cosa cierra la maleta y la carga dirigiéndose hacia la puerta y sale de la habitación seguido de la casa, Heero y Relena salen de la habitación y ven desde el barandal cuando su hermano se va, Relena comienza a llorar y se retira a su habitación mientras piensa no solo en su hermano sino también en su embarazo, sí su padre había sido capaz de golpear a Trowa por algo como eso entonces a ella le iba a ir mucho peor si se enteraba que esperaba un hijo, mejor era no decírselo, después pensaría que hacer, y en cambio Heero se acerca más al barandal y lo aprieta con fuerza cerrando sus ojos, por primera vez ocurría un problema como aquel en su familia, era cierto que nunca habían sido la familia perfecta pero esto había sobrepasado los límites, Trowa había sido corrido de su propia casa y él se sentía en parte culpable por no haber podido detenerlo...

El mayor de los Peacecraft Yuy llega a casa de uno de sus amigos, su nombre Traize Khusrenada, ex novio de Relena a quien le pide acilo mientras encuentra un departamento donde vivir y él accede, el chico invita a Trowa un café y ambos conversan en la sala

Traize. Entonces estuvo grueso

Trowa. Te juro que a veces lo detesto

Traize. No digas eso, es tu padre

Trowa. Y yo su hijo, aun así se atrevió a tratarme como criminal

Traize. Pero no entiendo que hiciste para que te expulsaran

Trowa. Verás...

El ojiverde le cuenta todo a Traize acerca de Duo y lo que había pasado en las regaderas de la escuela y su amigo riendo casi a carcajadas escuchaba la historia

Trowa. No te burles

Traize. Pero qué bárbaro, siempre has sido un galán pero ésta vez te pasaste

Trowa. Sabes bien que sé resistirme pero con él es distinto, es tan sensual, te hechiza

Traize. Más bien no sabes resistirte ¿recuerdas aquella vez que te llevaron a los separos porque te encontraron teniendo sexo en un parque?

Trowa. Ni me lo recuerdes, gracias a que pagaste la fianza nadie se enteró

Traize. Es verdad, pero aun así para ti solo existe él ¿cierto?

Trowa. ¿Quatre? Sí, pero ya no sé

Traize. ¿Y eso?

Trowa. Él no se decide, quiere a Heero y yo me siento a gusto con Duo, es un chavo genial, además Quatre está cambiando mucho, parece otro, la verdad no sé qué hacer

Traize. No pues estas grueso amigo

Trowa. Ni me lo digas, y ahora mi padre me corre de la casa

El ojiverde se sentía sumamente deprimido por todo lo sucedido pero la imagen de aquella tarde haciéndole el amor a Duo le sube un poco los ánimos, al menos algo bueno había sucedido ese día, ya mañana reanudaría su búsqueda de Universidades, al menos aún tenía su empleo como asesor en la Preparatoria y podía seguir manteniéndose porque incluso recuperando el semestre no pensaba volver a casa, aquella bofetada había cambiado el curso de su vida... a la mañana siguiente en la escuela Quatre y Duo esperaban a Heero como todos los días en la cafetería para que almorzaran juntos pero Heero ya llevaba mucho tiempo demorado

Duo. Otro día avísame cuando te vayas

Quatre. Lo siento, de verdad era urgente

Duo. Está bien, no importa, mejor déjame te cuento que sucedió ayer antes de que Heero llegue ¿sí?

Quatre. Claro, cuéntame

Duo. Lo hicimos Quatre, Trowa y yo tuvimos sexo

La sangre de Quatre se hiela y baja hasta sus pies al oír tal declaración y por instinto suelta los libros que sostenía con su mano derecha quedándose completamente perplejo, Duo ve la expresión del chico y se divierte mucho pero disimula preocupándose por recoger los libros del suelo, Quatre reacciona cuando ve que Duo se agacha y le ayuda a levantarlos pero notablemente sus manos temblaban, ambos chicos se miran y enseguida Quatre baja la mirada, el trenzado mostrándose preocupado ayuda a Quatre a sentarse en una de las mesas disponibles de la cafetería ya que se encontraban de pie

Duo. ¿Qué tienes?

Quatre. Per... perdón yo...

Duo. ¿Te duele? ¿duele aquí?

Duo lleva su mano hasta el pecho de Quatre y enseguida la quita, el rubio baja su mirada y asiente con la cabeza, Duo sonríe ampliamente ante la respuesta y trata de mostrarse comprensible

Duo. Sé que lo quieres pero yo también y recuerda que es mi novio, no tuyo

Quatre. Perdóname yo...

Duo. No te preocupes, recuerda dos cosas, Heero te quiere a ti, no necesitas de Trowa porque ¿sabes una cosa? Él me quiere a mí, y yo a él

Quatre. Duo...

Duo. Lo sé, te gustaría que te correspondiera pero él lo dijo, me dijo ayer que me amaba mientras lo hacíamos, fue tan hermoso

Quatre se coloca la mano derecha sobre el pecho y se evita las ganas de llorar, Trowa lo había engañado, a él le había dicho que lo amaba y que sería capaz de dejar a Duo o a cualquier otro por él pero ese mismo día había hecho suyo a Duo, ahora comprendía todo, lo único que Trowa quería de él era sexo y no Heero como el ojiverde se lo hacía querer ver, que tonto se sentía al dejarse engañar por Trowa, él se había entregado al ojiverde por amor y él tan solo había jugado con sus sentimientos, un sentimiento de ira comenzaba a invadirle, ahora más que nunca estaba convencido de sus sentimientos hacia Heero, él era quien de verdad lo quería, siempre lo trataba muy bien, ahora ya no había dudas, Trowa pasaría a la historia dentro de su corazón, o al menos de ese día en adelante su único propósito iba a ser olvidarse de Trowa y arrancar ese amor que sentía por él

Quatre. ¿Sabes algo Duo?

Duo. ¿Qué cosa? Dime

Quatre. Puedes estar tranquilo, Trowa para mi está muerto

Duo. ¿Por qué?

Quatre. Hay cosas que no puedo decirte, perdóname

Duo. Está bien

Quatre. Espero que seas feliz con Trowa

Duo. Gracias, yo estoy seguro de que sí ¿sabes que me dijo?

Quatre. ¿Qué?

Duo. Que sería capaz de dejar a cualquiera por mí ¿no es un encanto?

Nuevamente Quatre siente una opresión en el pecho al oír las palabras de Duo ya que habían sido las mismas que el ojiverde le había dicho el día anterior y ahora se daba cuenta también de que todo lo que Trowa le había estado diciendo era una mentira, algo que le decía a todos para que se acostaran con él, pero ¿con qué clase de basura se había metido? Ahora se sentía el doble de culpable por haber engañado a Heero con su hermano, se sentía sumamente sucio, en cambio Duo se evitaba reír, había escuchado la conversación de Trowa y Quatre del día anterior y por eso había dicho eso, porque sabía bien que Quatre iba a pensar justamente lo que en ese momento estaba pensando, que Trowa era un pervertido y además mentiroso, ahora su juego ya comenzaba a tener los resultados deseados...

Tras aquellas confesiones un silencio invade el espacio entre Duo y Quatre y justamente minutos después llega Heero un poco apurado, había tenido examen y había sido de los últimos en entregarlo ya que había llegado tarde al salón porque su auto había sufrido una descompostura, el chico ojiazul saluda primero a Quatre con un beso en los labios y después a Duo con un beso en la mejilla disimulando muy bien los dos frente a Quatre quien no nota nada extraño entre Heero y Duo, el rubio estaba muy serio al igual que Heero pero pide permiso para retirarse al baño y enseguida volver poniéndose de pie al decirlo y alejándose, entonces Duo aprovecha y estira sus manos para tomar las de Heero quien le mira pero no le contesta a la sonrisa, aún estaba preocupado por Trowa, su hermano no le contestaba el celular y no sabía dónde demonios había pasado la noche, el trenzado se preocupa de ver a Heero más serio de lo normal y pregunta la razón por su comportamiento

Heero. Ayer regresó papá, se enteró de la expulsión de Trowa y lo corrió de la casa

Duo. ¿Qué?

Heero. Llamo a su celular pero parece que lo trae apagado

Duo. Lo siento, a mí no me dijo nada, y eso que soy su novio

Heero frunce el ceño al recordar que Duo era novio de Trowa y se recarga en el respaldo de la silla soltando las manos de Duo quien se preocupa por ese rechazo

Heero. ¿Todavía no lo dejas?

Duo. ¿Y tú ya dejaste a Quatre?

Heero. Es distinto

Duo. Claro, debí suponerlo

Heero. Duo, lo mío con Quatre es bastante sólido, algo de mucho tiempo

Duo. ¿Y por eso?

Heero. Por eso

Duo. Mnh

Duo también se recarga en el respaldo de la silla y se cruza de brazos volteándole el rostro al ojiazul quien se estira nuevamente y toma las manos de Duo sonriéndole ligeramente, el trenzado voltea hacia él y le sonríe también apretando sus manos con las de Heero

Heero. Lo dejaré pronto, te lo prometo

Duo. Yo también

Heero. Te amo, recuérdalo

Duo. Lo haré, no tienes que pedírmelo

Los dos se sueltan de las manos y momentos después regresa Quatre posicionándose a un lado de la mesa mirando a Heero quien también voltea a verlo, los dos aún se sentían extraños por el acto sexual del día anterior tan extraño que habían tenido pero aun así frente a Duo parecían los mismos de siempre

Quatre. Debo irme

Heero. ¿Y eso?

Quatre. No me siento bien, faltaré a mi última clase

Duo. ¿Quieres que te acompañe a tu casa?

Quatre. No gracias, mandaré que vengan por mí

Heero. Quatre, quiero hablar contigo ¿cuándo te sientas mejor hablamos?

Quatre. Sí, está bien, adiós chicos

Con cara de pesadumbres Quatre se agacha y se despide de ambos chicos con un beso en la mejilla y se va no intuyendo que aquello de lo que quería hablar con él Heero se trataba de su rompimiento y en cambio Duo sí sonriendo ampliamente

Duo. Gracias mi amor

Heero. Ahora no era momento, pero verás que voy a dejarlo

Duo. Que feliz me siento

Esta vez Duo decía la verdad, se sentía sumamente contento, Heero iba a dejar a Quatre por él, como debía de ser, era imposible que alguien se decidiera por el rubio teniéndolo a él de rival, ni siquiera el amor que Trowa sentía por el rubio había triunfado sobre su sensualidad, sin duda él era mucho mejor que esa basura insignificante de Quatre, y ahora la persona que más amaba iba a ser completamente suya... terminando el almuerzo Heero y Duo deben ir a sus respectivas clases pero el trenzado inventa que tiene que ir a un lugar y le pide a Heero que lo acompañe diciéndole que no tardaran y que no perderá su clase pero cuando llegan al laboratorio de Química, lugar al que se refería el trenzado, Duo cierra la puerta recargándose en ella

Heero. ¿Qué pasa?

Duo. Caíste

Heero. ¿Qué?

Duo. Te amo tanto Heero

A paso lento y sensual Duo se acerca a Heero y comienza a besarle atrás de su oreja, el ojiazul sonríe y toma el rostro de Duo con ambas manos dándole un tierno beso en los labios que pronto comienzan a profundizar, las manos de Heero rodeándole la cintura y las de Duo entrelazadas en su cuello, Heero avanza hacia las mesas de laboratorio y sube a Duo en uno de los bancos sin dejarse de besar y Duo cierra sus piernas en la espalda baja de Heero mientras el ojiazul comienza a acariciarle el cuerpo por encima de la ropa, la mano derecha de Heero explora completamente el pecho del trenzado y llevando su mano derecha a la nuca de Duo nuevamente comienza a besarlo, las manos de Duo aprietan la espalda de Heero y éste levanta a Duo quien continuaba con las piernas entrelazadas a la espalda baja del ojiazul y comienza a caminar hacia la regadera que se encontraba al fondo en la esquina del laboratorio

Duo sonríe sobre los labios de Heero al darse cuenta que van hacia la regadera y el ojiazul estirando su mano abre la llave cayendo el agua sobre sus cuerpos completamente calientes por la excitación, ambos podían sentir el miembro excitado del otro y pronto sus besos comienzan a apasionarse cada vez más exhalando pequeños y lentos gemidos sobre la boca del otro, Duo separa sus piernas poco a poco y toca el piso, ambos se sonríen y las manos de Duo comienzan a meterse por debajo de la camisa de Heero acariciando esos bien formados pectorales mordiéndose el labio inferior mientras cierra los ojos, Heero se acerca más a Duo y después de besarse en los labios Heero comienza a darle besos a Duo en el cuello mientras le habla

Heero. Debemos... ir a otro lugar

Duo. No no, continúa

Heero. No me detendré... lo prometo... pero aquí no

Duo. Hazme tuyo Heero, aquí y ahora

Ante la petición Heero se muerde el labio inferior duramente, estaba completamente excitado, nunca antes se había sentido así, debía hacer suyo a Duo, no debía importarle que estaban dentro de uno de los laboratorios de la escuela que en menos de 15 minutos cuando terminara el receso iba a ser invadido por lo estudiantes de la siguiente clase y que además cualquier profesor iba a poder entrar antes de terminado el receso, pero debía de arriesgarse, estaba sumamente excitado y Duo también, debían hacerlo

Así que sin más discusiones Heero comienza a quitarle a Duo la ropa que estaba completamente empapada por el agua dejando mostrar su hermoso cuerpo al desnudo, que hermoso era, con ropa o sin ropa Duo era perfecto, también Duo disfruta de la desnudez de Heero, un chico tan atlético y bien proporcionado como él resultaba exquisito a la vista, el trenzado lleva su mano hasta su propio miembro y se comienza a masturbar siendo observado por Heero quien alucina esa imagen, tan excitante y sensual que no puede resistirse por lo que se acerca al trenzado y agarrando su pierna izquierda con la mano derecha la levanta a la altura de su cadera y entonces agarrando su miembro comienza a introducirlo a aquella hermosa y caliente cavidad

Duo exhala un gemido ante la intromisión, no dolía tanto como la primera vez pero si dolía y Heero comienza a moverse sin poderlo hacer con mucho vigor debido a la posición, Duo continua masturbándose y siendo penetrado por Heero quien aprovecha para poderle besar el cuello al trenzado o lamerle los pezones, Duo se sentía en la gloria, no solo se entregaba al amor sino también al placer, que excitante era todo aquello, lástima que la semilla de Heero brota pronto dentro de Duo terminando con ello el acto sexual pues la de Duo le hace segunda gimiendo los dos de placer ante el orgasmo, encontrándose sus bocas en un lento pero excitante beso mientras respiraban con dificultad, los dos abren sus ojos y se sonríen, había sido su primera vez con alguien a quien amaran, que diferente a todas las demás entregas que habían sido solo por sexo...con las ropas mojadas y puestas nuevamente Heero y Duo salen del laboratorio por una de las ventanas que daba hacia uno de los jardines de la escuela y escapan, habían perdido su clase pero no les importaba, estaban juntos y eso era lo que realmente les interesaba

Los amantes llegan hasta lo que parece un bosque que se encontraba a varios metros lejos de la escuela, habían corrido sin detenerse, no querían saber nada del mundo, tan solo querían estar ellos dos solos, lejos del bullicio de la ciudad y de las personas que en ella vivían, que hermoso sería el mundo si tan solo existieran ellos dos aunque fuera unos momentos...

Totalmente agotados los dos se dejan caer al pasto siendo rodeados por los árboles cuyas hojas se movían lentas por el aire, ambos respiraban con dificultad y voltean a verse comenzando a reír, para Heero no era común sentirse tan pleno, el concepto de felicidad hasta ese momento no lo conocía y para Duo aquello era como un sueño hecho realidad, esta segunda vez que se había enamorado nada tenía que ver con la primera porque en ésta ocasión era completamente correspondido, el ojiazul deja de reírse y se acerca a Duo dándole un beso en los labios y subiéndose a su cuerpo lentamente, Duo sonríe y empuja a Heero para girarlo y ahora él estar encima, ambos se sonríen y vuelven a besarse, después Duo recarga su cabeza en el pecho de Heero mientras lo abraza con fuerza, Heero besa la cabeza de Duo y también le abraza permaneciendo ambos así en silencio

Tan solo el moverse de los árboles y el cantar de uno que otro pájaro eran los sonidos que se podían apreciar, el trenzado suspira hondo y levanta su cabeza para observar fijamente a Heero quien se había quedado completamente dormido, Duo sonríe tiernamente y le da un beso en los labios, toma las manos de Heero y con cuidado de no despertarlo las aleja de su cuerpo para poderse levantar poniéndose de pie después de muchos esfuerzos por no moverlo mucho y despertarlo, el trenzado lo observa y nuevamente sonríe susurrando un te amo y se aleja un poco de ahí, tenía hambre y seguramente encontraría alguna fruta y mientras caminaba silbaba una canción, que feliz se sentía, su corazón sentía una gran paz como hace mucho no la sentía...

Duo regresa tras solo haber encontrado un árbol de tamarindos y ve a Heero sentado entre la hierba mirando hacia el frente, parecía pensativo, el trenzado se acerca a él y se sienta a su lado recargando su cabeza en el hombro de Heero quien se gira un poco y le da un beso en la nariz, Duo sonríe

Heero. Creí que te habías ido

Duo. Jamás haría eso... te ves mal Heero

Heero. Estoy preocupado por Trowa, es todo

Duo. Ah

El trenzado se queda en silencio después del comentario de Heero y siente un pequeño dolor en el estómago, no quería que Heero pensara en nada más que no fueran ellos dos, no quería que sus pensamientos estuvieran ocupados por alguien más incluso si ese alguien fuera de su familia, él no lo quería compartir con absolutamente nadie, el ojiazul no se percata de ese disgusto y voltea hacía con Duo moviéndose un poco haciendo que el trenzado levante su cabeza de su hombro, ambos se miran a los ojos, Heero agacha su mirada y toma las manos de Duo que lo observaba fijamente, el ojiazul levanta sus ojos y los clava en los de Duo mostrándose completamente serio

Heero. Duo, hay algo que quiero preguntarte

Duo. Claro

Heero. ¿Tú y mi hermano intimaron alguna vez?

Duo se queda sin palabras para poder contestar aquella pregunta ¿cómo decirle a Heero, el amor de su vida que ya había sido antes de su hermano y que además Trowa le había quitado la virginidad? Seguramente eso iba a destrozar a Heero y muy probablemente lo iba a rechazar, mejor era no decírselo, tanto que había tenido sexo con Trowa como que él antes era virgen así que Duo sonriendo contesta que no y Heero suspira aliviado, que feliz le hacía saber que aquello que sospechaba no era verdad, porque Heero tenía entendido que Duo era muy liberal y esas cosas, por eso le preocupaba

Heero. No es noticia para ti si digo que yo sí lo hice con Quatre ¿verdad?

Duo. No, él me contó todo

Heero. Pero te juro que no lo tocaré nuevamente

Duo. No me jures nada Heero

Heero. Duo...

Duo. Mientras lo hagas conmigo nada me importa

El ojiazul abraza a Duo con fuerza y después comienza a besarlo tiernamente siendo absolutamente correspondido comenzando ambos a acostarse en el pasto, sus ropas ya estaban secas y nuevamente comienzan a despojarse de ellas hasta quedar completamente desnudos sobre la verde hierba, Duo encima de Heero acostado sobre él, el ojiazul toma el rostro del trenzado con ambas manos y contempla una vez más ese hermoso rostro, Duo sonríe ampliamente y lleva su mano derecha hacia la pequeña liga que mantenía su cabello trenzado y desata su trenza lentamente cayendo sus cabellos sobre el pecho de Heero quien toma un mechón de ellos y huele profundamente ese agradable aroma cerrando sus ojos

Duo se levanta poco a poco soltando Heero sus cabellos y el ojivioleta se sienta sobre las caderas de su amante, el ojiazul sonríe y coloca sus manos sobre las caderas de Duo quien levanta las suyas unos cuantos centímetros y se acomoda para direccionar su entrada al miembro erecto de Heero comenzando lentamente a descender, penetrándose hasta quedar nuevamente sentado sobre las caderas de Heero quien jadea al sentirse dentro de Duo y él gime al sentir a Heero dentro, ambos se quedan quietos unos momentos cerrando sus ojos y al abrirlos se miran fijamente, Duo apoya sus manos sobre el abdomen de Heero y se levanta un poco volviendo a sentarse sobre Heero gimiendo un poco los dos por el movimiento, nuevamente se miran y Heero coloca sus manos ahora sobre los glúteos de Duo para ayudarlo a moverse y para separarlos y hacer menos doloroso el acto, los dos cierran los ojos y comienzan a hacer los movimientos lentamente, Duo moviendo sus caderas de arriba hacia abajo siendo ayudado por Heero y ambos comienzan a gemir haciendo después los movimientos más rápidos

Duo cierra sus ojos y pronto comienza a emitir pequeños gritos acompañados de sus gemidos mismos que hacen que Heero se sienta más excitado, que hermoso era ver ese rostro distorsionado por el placer, Duo quita sus manos del abdomen de Heero para poderse levantar más, haciendo las embestidas un poco más violentas y ahora también Heero emitía gritos con sus gemidos y quitando su mano derecha del glúteo de Duo la lleva hacia el miembro del chico agarrándolo y comenzando a masturbarlo, ambos se sentían en la gloria, tanto que todos los sentidos habían desaparecido, solo estaba el placer, la entrega, el amor ¿por qué no? y entonces al no poder más brotan sus semillas al mismo tiempo, Duo grita el nombre de Heero al éxtasis y Heero el de Duo casi al mismo tiempo, Duo sin abrir sus ojos se deja caer sobre el cuerpo de Heero respirando con dificultad y los brazos de su amante le rodean la espalda fundiéndose en un abrazo profundo, sus cuerpos sudorosos se relajaban y Heero saca su miembro de la cavidad de Duo saliéndose atrás de éste una gran cantidad de semen, había tenido uno de los orgasmos más placenteros de su vida y había sido con Duo, con su Duo, dicha más grande no podía existir en el mundo

Armándose de total valor Relena decide darle a Wufei la noticia de su embarazo, si el chico no le quería responder ella no podía hacer nada para obligarlo pero aun así Wufei tenía el derecho de saberlo así que va a la casa del chico pero para su sorpresa una mujer le abre la puerta observando a Relena de pies a cabeza de forma despectiva, Relena también la mira feo y pregunta por Wufei, la mujer le dice que no está pero cuando va a cerrar la puerta se escucha la voz de Wufei quien le pregunta quien ha llamado a la puerta, Relena le grita que es ella y él le pide a la chica que abrió que le cierre la puerta a Relena, ella muy enojada no se deja cerrar la puerta y avienta a la chica haciendo que la puerta se abra, Wufei se molesta mucho por esa actitud tan caprichosa y le dice a Relena que se vaya de su casa pero ella no accede hasta no hablar con él, el chino se la piensa mucho y decide dejar pasar a Relena pidiéndole a la otra chica que los deje hablar a solas, ella obedece y sube las escaleras hacia la habitación de Wufei, Relena sabía bien que le pertenecía ya que ella misma había estado adentro antes, ambos chicos se miran a los ojos mostrándose los dos enojados, sobre todo Wufei

Wufei. Habla, no tengo tú tiempo, Sally me espera

Relena. Wufei ¿qué te sucedió? De repente te portaste mal conmigo

Wufei. No has de saber

Relena. No, no sé

Wufei. Abrí los ojos Relena, sé que eres una cualquiera

Relena. No te permito...

Wufei. ¡Yo no te permito a ti venir a mi casa a cuestionarme! Vete

Relena. Yo te amo Wufei

Wufei. Mentira, lárgate de mí vista

Muy enojado Wufei se pone de pie y se acerca a la puerta abriéndola indicándole a Relena el camino de salida, la chica se pone de pie y se acerca a la puerta pero no se sale, en cambio mira a Wufei a los ojos, él se evitaba verla a ella a los ojos porque de verdad no quería tratarla tan mal pero se sentía muy herido como para tratarla bien

Relena. Wufei, estoy embarazada

Wufei. ¿Qué?

Con los ojos completamente abiertos Wufei no da crédito a lo que Relena dice y armándose de mucho valor toma a la chica del brazo y la avienta afuera de la casa, ella casi a punto de llorar lo mira con tristeza a los ojos, en cambio Wufei se veía muy furioso

Wufei. ¿Y vienes a decirme que soy el padre? No me hagas reír, si eres una ramera

Relena se avienta a Wufei comenzando a golpearlo mientras llora y él tan solo agarra a la chica de los brazos para detenerla, ella se calma un poco y ambos se miran a los ojos

Relena. Sí, lo eres

Wufei. Mentirosa, ni tú has de saber quién es el padre

Relena. ¡No es cierto! Solo lo he hecho contigo Wufei

Wufei. Mentira, sé todo, sé que andabas con muchos, él me lo confirmó

Relena. ¿Quién?

Wufei. No te hagas, Duo

Relena siente un horrible escalofrío cuando escucha el nombre del amigo de Heero ¿él le había dicho a Wufei que ella andaba con muchos a la vez y que era una vil zorra? ¿aquel que hasta se hacía llamar su amigo lo había hecho? No lo podía creer, simplemente era increíble, ahora comprendía un par de cosas respecto al trenzado, aquel chico no era lo que quería hacer creer al mundo, aquel chico era casi el mismo diablo, ahora comprendía porque a veces se mostraba frío con las personas, ahora sabía de su afición por destruir las cosas, por eso había querido su ayuda para destruir la hermandad entre Trowa y Heero, por su culpa ahora los hermanos no se podían si quiera ver a los ojos, se comportaban como enemigos y ahora ya hilaba también aquel asunto con Quatre, ya le parecía raro ese afán suyo por hacer un jueguito, también se sentía mal de haber traicionado a Quatre...

Wufei mira fijamente a Relena y le sorprende su rostro lleno de preocupación, la chica se pone completamente pálida y se desmaya siendo atrapada por los brazos de Wufei que se preocupa por la chica y la lleva en brazos al sillón más amplio de la sala gritándole a Sally que lo ayude y la chica baja corriendo las escaleras para auxiliarlo... a los pocos minutos Relena despierta encontrándose con los rostros de Sally y Wufei que la observaban, el chino pregunta si se siente bien y Relena niega con la cabeza

Relena. Debo decirle a Heero todo

Wufei. ¿Tú hermano?

Relena. Hazte a un lado

Wufei. No, todavía te ves pálida

Relena. Tú no entiendes, Duo no es bueno

Sin entender de qué habla Relena Wufei la suelta y la chica se pone de pie saliendo apurada de la casa, ya no le importaba si Wufei quería aceptar la paternidad o no, ya solo le interesaba decirle a Heero lo que sabía de Duo, debía protegerlo de él...

Trowa sale de casa de Traize decidido a hablar con Quatre, de decirle que la posibilidad de que estuvieran juntos ya no existía, estaba decidido a darle una oportunidad a Duo, él si lo quería de verdad, el rubio tan solo era un chico superficial y aunque él lo amaba estaba convencido de que no quería seguir estándolo, estaba decidido a olvidar a Quatre, sabía que le iba a costar mucho pero debía tomar una determinación y lo había hecho, Duo se merecía una oportunidad de ser amado y él se la iba a dar... la hermana mayor de Quatre abre a Trowa la puerta y lo deja pasar llamando a Quatre quien al ver que Trowa ha ido cruzado de brazos se acerca al ojiverde observándolo fijamente, ambos de pie frente a frente se miraban con dureza

Quatre. ¿Qué quieres? ¿sexo?

Trowa. Ya sé que es lo único que ofreces pero no he venido a eso

Quatre. Imbécil

Trowa. ¿Imbécil? Al contrario, tú lo eres, no valoraste el amor que te tuve

Quatre. ¿Amor? ¿qué me tuviste? Por favor, deja de fingir, aquí el único que amó fui yo

Trowa. Si como no, hipócrita

Totalmente furiosos los dos se miraban con ojos asesinos, cada uno tenía en la cabeza una idea demasiado aferrada del otro que no les permitía ver la realidad de las cosas, ambos tenían la mente demasiado envenenada por culpa de Duo, dos personas que se amaban de verdad ahora se trataban como solo se trata al peor de los enemigos

Trowa. Y de pensar que hasta golpee a mi hermano por ti, que poca cosa me siento

Quatre. Y tú no sabes el asco que me da recordar que tuvimos sexo

Trowa. Yo también siento asco, pobre Duo, no se merecía que lo engañara con alguien como tú

Quatre. ¡No me importan tus culpas! Heero de verdad no se merecía que lo engañara con una basura tan asquerosa como tú

Trowa. Cállate ya estúpido

Quatre. Lárgate de mi casa

Ya con los estribos perdidos Quatre corre hacia la puerta y la abre, Trowa lo mira una última vez con furia y sale bastante enojado escuchando solo el azotar de la puerta, Quatre se deja caer al suelo soltando fuertemente el llanto y Trowa continúa corriendo enojado hasta que ya no puede y se deja caer al suelo golpeándolo con fuerza, había dicho y escuchado cosas bastante hirientes, sentía que el corazón se le oprimía solo de recordarlo y Quatre también estaba devastado, como sentía la enorme necesidad de tener a Heero cerca abrazándolo, Trowa lo había lastimado como nunca había creído que alguien iba a poder lastimarlo, sin duda iba a pasar mucho tiempo para que ambos pudieran olvidarse...

El ojiverde sintiéndose mejor sube a su automóvil que había dejado a dos cuadras de la casa de Quatre y decide ir a la casa de su padre para hablar con Heero seriamente, necesitaba pedirle perdón por todo, su hermano se había comportado tan mal con él seguramente también por culpa de Quatre, ese maldito rubio tenía la culpa de todo al haberse convertido en la manzana de la discordia entre dos hermanos...

Relena llega a su casa pero no había nadie, ni su padre ni Heero estaban y las personas de la servidumbre ya se habían ido, estaba casi por oscurecer y una tormenta se avecinaba, de pronto la puerta de la casa se abre y Relena se pone de pie ya que esperaba sentada en la sala pero la chica no cuenta con que quien entra es Duo y nadie de su familia, la chica se sorprende y pregunta que hace él ahí

Duo. Hola cuñadita, vine por ropa para Heero, me espera en mi casa

Relena. ¿Qué?

Duo. Lo invite a dormir, con lo "amigos" que somos...

Relena. Eres una mala persona Duo

Duo. ¿Por qué me dices eso?

Relena. Quieres a Heero para ti a costa de lo que sea ¿no?

Duo. ¿De qué me hablas?

Relena. Lo sabes bien, pero algo que no sé es que demonios tenía yo que ver con eso

Duo. Ay cuñadita, no te entiendo

Duo comienza a avanzar lentamente hacia la chica que asustada camina hacia atrás mirando fijamente a Duo a los ojos, en ellos se podía ver una mirada fría y vacía, a la vez en su rostro una sonrisa retorcida surcaba sus labios

Relena. Aléjate, gritaré

Duo. ¿Por qué lo harías? No te haré nada, solo explícame mejor

Relena. Le dijiste a Wufei que soy una zorra

Duo. Y lo eres, tanto que hasta tu propio hermano te mueve el tapete

Relena. ¿De qué hablas asqueroso?

Duo. A mí no me engañas, sé lo que sientes por Trowa, que sucia eres

Relena pone una cara de asco al oír aquellas palabras, lo que decía Duo era mentira, ella no sentía ninguna atracción sexual por ninguno de sus hermanos, el trenzado estaba completamente loco por decir eso, Relena choca contra la pared y se queda estática viendo como Duo se acerca hasta acorralarla contra la pared

Duo. Calma, todo está bien ¿sabes algo? Yo me sentía atraído por mi tío Zechs así que te comprendo, el incesto es algo delicioso

Relena. ¡Aléjate!

La chica avienta a Duo pero él solo retrocede un paso, la chica era muy débil y cuando ella intenta huir siente como las manos de Duo se cierran en su cuello comenzando a apretarlo, ella abre sus ojos con fuerza viendo asustada los ojos del trenzado que brillan mientras comienza a reírse, un enorme escalofrío le recorría el cuerpo, Duo iba a matarla, de eso estaba segura ¿qué clase de demonio loco se escondía detrás de ese hermoso rostro?...

Ante la desesperación Relena le da un fuerte golpe a Duo en el estómago y él la suelta un poco aprovechando ella para empujarlo con más fuerza y avanzar un poco pero él le mete el pie haciéndola caer al piso, la chica se voltea y ve como Duo se acerca a ella intentando volverla a ahorcar pero ella nuevamente lo patea haciéndolo caer al piso y entonces aprovecha para ponerse de pie y correr no sin antes agarrar de la mesa cerca de la puerta un portarretrato y aventárselo a Duo a la cabeza haciéndolo caer de rodillas, entonces Relena sale de la casa corriendo con todas sus fuerzas, Duo levanta la cabeza y enojado golpea el suelo con fuerza

Duo. ¡Demonios! Se me escapó, le dirá todo a Heero, él me va a dejar

Completamente asustado Duo agarra el portarretrato y camina hacia la puerta no sin antes dejarlo en su lugar y salir de la casa de los Peacecraft Yuy para buscar a Relena pero en los alrededores no la encuentra comenzando a preocuparse, la chica iba a decir todo y eso a él no le convenía... Relena corre asustada por la calle y a lo lejos ve lo que parece ser el automóvil de Trowa y ella lo reconoce a pesar de que ya el sol se había ocultado, la chica se atraviesa y Trowa que iba muy recio ya que estaba muy enojado alcanza a frenar enojándose porque la chica se le había atravesado, Relena se acerca a la puerta del copiloto y Trowa la abre para que pueda subir, Relena sube y llorando le pide a Trowa que avance el carro y vayan a casa de Duo, Trowa no entiende que quiere pero arranca el auto

Trowa. ¡Pude haberte matado estúpida!

Relena. No te fijes en eso, acelera

Trowa. ¿Qué te tiene así?

Relena. No tengo tiempo ¡acelera!

Trowa. Ponte el maldito cinturón

Relena no hace caso a Trowa y mira hacia el camino, él muy molesto tanto por lo de Quatre como por lo de que estuvo a punto de atropellar a su hermana le exige de mala gana una explicación a la chica quien no le presta atención, pronto la lluvia se suelta y Trowa mirando hacia el frente intenta no distraerse pero se da cuenta que Relena aún no trae el cinturón de seguridad

Trowa. Relena, explícame que está pasando... y ponte ese cinturón

Relena. Trowa, Duo es una persona muy mala

Trowa. No digas eso de él

Relena. Es malo

Trowa. Cállate

Trowa dejaba de ver al frente por instantes y Relena miraba también a su hermano en instantes, el ojiverde comenzaba a alterarse, no iba a permitir que Relena dijera esas cosas de su novio a quien tanto quería

Trowa. No te permitiré que hables mal de Duo

Relena. Trowa, abre los ojos, él es solo un seductor

Trowa. ¡No es verdad!

Relena. Él tiene la culpa de que todos nos hayamos peleado

Trowa. No es verdad

La lluvia comienza a hacerse más fuerte y el camino comienza a hacerse confuso pero Trowa mantiene la misma velocidad, Relena estaba muy nerviosa, si le explicaba todo a su hermano en ese momento él podía alterarse mucho y perder el control del volante, era mejor decírselo cuando ya el motor del auto estuviera apagado pero Trowa ya estaba más que molesto, Relena decía tonterías y no le quería explicar nada, comenzaba a ponerse muy nervioso, no era la primera vez que escuchaba que Duo no era buena persona y comenzaba a cuestionárselo

Trowa. Relena, explícame todo por favor

Relena. ¡Te dije que aceleres!

Trowa. Está bien, pero ponte el cinturón

Relena. Deja de molestar, maldita sea

Trowa. ¡Qué te pongas el maldito cinturón!

Enojada Relena agarra el cinturón para ponérselo pero Trowa al gritarle voltea hacía con ella distrayéndose volteando al frente cuando una intensa luz lo encandila haciendo un movimiento violento con el volante para esquivar a ese camión que estaba muy cerca de ellos, Relena grita cuidado cuando el automóvil pierde el control y se va en picada contra un árbol que se encontraba fuera de la carretera y en el cual él automóvil se estrella, el impacto no había sido tan fuerte pero al estar el carro con la trompa hacia abajo y Relena sin el cinturón de seguridad... Trowa voltea y ve con horror como su hermana se encontraba con medio cuerpo dentro del auto y la otra parte atravesando el parabrisas del auto y abriendo los ojos con fuerza dilatándose sus pupilas grita con terror su nombre

Trowa. ¡ R E L E N A A A !

No pudiendo más con la impresión el ojiverde pierde el conocimiento mientras la lluvia no pierde intensidad en ningún momento, el claxon del automóvil no deja de sonar ni un segundo y pronto el sonido de una ambulancia se escucha por el lugar, muchos accidentes habían estado sucediendo durante el transcurso de la tormenta pero en ésta ocasión la verdadera tormenta se desataría a partir de este horrible suceso

Continuará...



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